Perú

Lo que se trae el nuevo gabinete del gringo PPK

Editorial de A Luchar N° 8
periódico de la Liga Socialista
sep/oct 2005

Cierta calma parece haber retornado, como para que en la superestructura, en la que se mueven el gobierno y la clase política aplicando los planes económicos, haya apariencia de normalidad y reacomodo. El manoseo de encuestas y la expectativa electoral que alimenta las ilusiones democráticas de las masas tienen como objetivo paliar su hartazgo con la política tradicional.

Las cifras macroeconómicas "positivas" no significan una vida mejor, salvo para los ricos, pero no para la gran mayoría. El mercado laboral se sigue deteriorando: el subempleo y la sobreexplotación son la norma, y la emigración está presente en la agenda de cada familia, pues sus ingresos no registran ningún incremento.

Otras cifras oficiosas nos dicen que la pobreza se ha incrementado, que hoy tenemos 380 mil personas más que el 2001; que los peruanos con deficiencias alimentarias se incrementaron de 33% a 35%, que los peruanos que se atienden en salud ya no son el 40 sino el 30%, como resultado de la continua reducción de la inversión pública que hoy es 2,8% del PBI.

Esos son los resultados de la macroeconomía que ha hecho de PPK el símbolo de una política económica neoliberal, que él mismo ha definido como la continuación de Fujimori. Y hoy con este personaje, la burguesía logró que el mundo de los negocios tomara el control político de manera completa para dirigir los destinos del país. Los grandes sectores empresariales tienen motivo para celebrar, pues su mejor representante querrá imponer los negocios que quedan por terminar: la privatización de los puertos, aeropuertos y centrales eléctricas (en manos de empresas asociadas a intereses chilenos), la privatización del agua (que generará facturas parecidas a las de la Telefónica), el blindaje a las grandes mineras, la concesión de carreteras, la privatización de Petroperú, el TLC digitado por el imperialismo yanki, y la ofensiva contra los trabajadores en su esfuerzo por una mayor reducción de los medrados derechos laborales.

Para estas tareas cuentan con el apoyo de sus amigotes de Unidad Nacional, con Lourdes Flores a la cabeza y el APRA, del reconvertido Alan García y de toda la "clase política". Solo se difiere en la forma como preservar el robo y el genocidio lento que es irse muriendo de hambre cada día, mientras se preparan para el carnaval electoral y el recambio de mafias del 2006.

La crisis del régimen, que los grandes medios difunden como información, disfraza momentáneamente la crisis social; que alza las manos exigiendo solución a sus demandas. La política económica que desatiende las urgentes demandas de la población enriquece a los empresarios y empobrece a la población trabajadora; consagra el aprovechamiento mercenario del Estado por los grupos de poder, incrementa nuestra dependencia y vulnerabilidad, asesina al campesinado, el agro, la salud, educación publica y pretende terminar, este período entregando nuestros recursos y al país entero de rodillas en un TLC con EEUU en bandeja de oro.