Tailandia

24 muertos en nuevos choques entre manifestantes y el ejército

"Casi una guerra civil"

Agence France-Presse, 16/05/10

Bangkok.- La violencia en las calles por enfrentamientos entre manifestantes opositores y el ejército recrudeció ayer y causó la muerte de ocho personas, con lo cual la cifra de víctimas fatales en las últimas 48 horas se elevó a 24, situación que puso a Tailandia al borde de la guerra civil y llevó a varias embajadas a evacuar a su personal.

Un líder opositor alertó sobre el deterioro de la situación

"La situación es casi de guerra civil", dijo Jatuporn Prompan, uno de los líderes de los "camisas rojas", opositores del gobierno del primer ministro Abhisit Vejjajiva, al que acusan de ilegítimo por haber llegado al poder mediante pactos parlamentarios y con el apoyo del ejército.

El premier, en tanto, afirmó, en un discurso difundido por televisión, que el gobierno no puede "ceder y permitir que quienes violan la ley y proveen de armas a los militantes enfrenten al gobierno", y aseguró que el ejército continuará con la operación que comenzó el jueves, que consiste en "asfixiar" y aislar a los miles de manifestantes que levantaron barricadas en el corazón financiero de Bangkok.

El área ocupada por los "camisas rojas" fue declarada zona franca por el gobierno, lo que implicó la prohibición de acceso a civiles, periodistas y camiones que transportan alimentos y bebidas. Días atrás, se había cortado el suministro de agua y electricidad en la zona.

Vejjajiva, quien expresó su tristeza por los trágicos enfrentamientos, consideró que la "mejor manera" de evitar nuevas víctimas es "poner fin a la manifestación". La oposición, sin embargo, advirtió que continuará con la lucha "hasta que el gobierno asuma su responsabilidad" por las muertes ocurridas.

El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, manifestó su "creciente preocupación" por la crisis tailandesa. También lo hicieron Singapur, China y los Estados Unidos.

Los enfrentamientos, los más graves en el país desde el "mayo negro" de 1992, dejaron desde marzo 54 víctimas fatales y más de 1200 heridos.


Represión del Ejercito a los “camisas rojas”:
16 muertos

Associated Press, 15/05/10

Bangkok.– La violencia en Tailandia no cesa, y la posibilidad de una solución pacífica para la crisis parece cada vez más lejana. En un nuevo enfrentamiento entre el ejército y los manifestantes opositores, por lo menos 16 personas murieron y 125 resultaron heridas, ayer en el centro de Bangkok.

Los incidentes más graves se registraron a media mañana, cuando los militares dieron orden de avanzar sobre el campamento que los "camisas rojas" (opositores) levantaron en una avenida céntrica de la capital, en un operativo que buscaba terminar con la protesta que lleva más de dos meses.

Los disparos, las granadas y los explosivos lanzados entre ambos bandos comenzaron horas después de que las fuerzas de seguridad, apoyadas por vehículos blindados, dispersaran a los manifestantes con cañones de agua, gas lacrimógeno y balas de goma para recuperar el control de las zonas ocupadas.

Los opositores consideran que el gobierno que lidera el primer ministro Abhisit Vejjajiva es ilegítimo por haber llegado al poder mediante pactos parlamentarios y con el apoyo del ejército.

Los "camisas rojas" son, en su mayoría, seguidores del ex premier Thaksin Shinawatra, depuesto en un golpe militar, en 2006. Shinawatra cobró popularidad entre campesinos y trabajadores urbanos con programas de microcréditos y salud pública.

Tras diez días de tregua en los que prevalecieron las negociaciones entre el primer ministro y los "camisas rojas", la situación se tornó caótica. Dos sucesos fueron los desencadenantes: anteayer, Vejjajiva retiró la oferta de llamar a elecciones anticipadas, a cambio de la disolución del movimiento de protestas. Unas horas después, Khattiya Sawasdiphol, uno de los líderes de la oposición, recibió un disparo en la cabeza y, según informó el director del hospital donde está internado, "sus posibilidades de sobrevivir son muy débiles".

Los enfrentamientos entre fuerzas gubernamentales y opositores provocaron ya 37 muertos y más de mil heridos. Se estima que estos sucesos son los más graves en Tailandia desde 1992, año en que ocurrió el denominado "mayo negro", una masiva protesta contra el gobierno del general Suchinda Kraprayoon, que duró tres días, y en la cual murieron más de 50 manifestantes.

A raíz del recrudecimiento de la violencia, el gobierno extendió anteayer a otras 15 provincias el estado de emergencia que rige desde hace un mes en Bangkok. Las embajadas de Estados Unidos, Japón, Gran Bretaña, Nueva Zelanda y Holanda, que se encuentran en la zona de protesta, se vieron obligadas a cerrar sus puertas ante la escalada de violencia.

Tras los enfrentamientos, que duraron todo el día, tres periodistas resultaron heridos. Dos de ellos, tailandeses, recibieron disparos en las piernas; un periodista canadiense recibió impactos en la pierna, el abdomen y la muñeca, y se encuentra muy grave.

Un líder opositor declaró que Abhisit "ha emprendido una guerra civil" y pidió al gobierno que "retire al ejército y detenga la violencia".

El rey de Tailandia, Bhumibol Adulyadej, de 82 años, no se ha pronunciado aún sobre el conflicto.