Bolivia

Bolivia - Universidad Mayor de San Andrés

Una lucha estudiantil como hace mucho no se veía

Por Martín Camacho
Desde La Paz
Para Socialismo o Barbarie, 03/12/08

Insultos, agresión y amenazas de militantes de la LOR-CI a un compañero de Socialismo o Barbarie Bolivia

Un comportamiento vergonzoso

El lunes 1° de diciembre, después de cinco días de toma, se realizó una asamblea. Al finalizar, algunos estudiantes trajeron resoluciones de la asamblea a los compañeros que estábamos en el edificio tomado.

Una de las resoluciones tenía observaciones concretas de parte de los que estábamos en la toma todos los días, ya que planteaba que se cerrase el edificio donde se pasan clases habitualmente y que se usara el edificio tomado para realizar esas clases.

La posición de los que estábamos en la ocupación, era que no estaban dadas las condiciones para garantizar la seguridad de los compañeros, sabiendo, además que, entre los estudiantes, un sector defiende al actual decano.

Fue entonces cuando empiezan las agresiones verbales y luego la agresión física de parte de un militante de la LOR-CI a un compañero reconocido cuadro de SOB Bolivia. El militante de la LOR-CI no entendía nada en la cuestión de seguridad, por no haber estado nunca manteniendo la toma en el edificio. Sólo había pasado una noche para dormir.

Pero donde más se equivocan estos “revolucionaros” es que no se puede agredir a nadie que está en la lucha y más en una toma de un edificio cuando está brindando seguridad a este. Y segundo, que los golpes no se dan entre compañeros revolucionarios.

Este repudiable incidente se agravó mucho más. Poco después, se hizo presente el dirigente de esta organización (y no ya un mero militante de base), Javo Ferreira. Este amenazó personalmente a Martín Camacho con “romperle todos los dientes” sí se demostraba que el compañero de SoB “había pegado primero”...

¿Estos son los métodos de la LOR-CI cuando se siente incapaz de entrar a un conflicto, o de ganar una argumentación política, golpear o pretender amedrentar a un militante integrante de otra corriente internacional?

Por este intermedio, repudiamos entonces este hecho y exigimos una autocrítica por este vergonzoso comportamiento a la LOR-CI, integrante de la corriente internacional del PTS argentino.

Informe de una de las luchas más importantes desde hace tiempo del estudiantado de la Universidad estatal de La Paz.

Una vez más la carrera de Comunicación Social evidencia que es la vanguardia estudiantil de la UMSA (Universidad Mayor de San Andrés). La cantidad de estudiantes que se movilizaron durante las acciones que se realizaron y la repercusión en la opinión pública demuestra que es una de las carreras que sigue estando en pie de lucha.

Los hechos que llevaron a la movilización no son nuevos: desde el 2003 se han contratados docentes fraudulentamente, con incontables irregularidades. Se está luchando para que la corrupción no llegue a las aulas.

Los procesos de contratación de estos profesores se realizaron en los tiempos de Gonzalo Sánchez de Losada con el total aval de las direcciones corruptas de la Universidad.

Cronología de una lucha que no termina

Durante todo este año la carrera se pronunció por la expulsión de los docentes fraudulentos. Una y mil veces se realizaron acciones por vía legal para destrabar el conflicto y que estos docentes no entren a dar clases. Lamentablemente, de la mano del decano Raúl España, estos docentes pudieron entrar a dar clases después de 5 años de no trabajar... Pero, aunque durante todo ese tiempo no trabajaron, cobraron sus salarios. La suma asciende a unos 800.000 pesos bolivianos (casi 120.000 dólares) que estos personajes han robado así a los estudiantes.

El actual decano Raúl España –personaje siniestro y reconocido partidario del MNR (Movimiento Nacionalista Revolucionario, partido neoliberal)– posibilitó la vuelta de estos docentes fradulentos, luego de ganar las elecciones a decano gracias a su voto.

Esos profesores fraudulentos son 11 en total. Pero, en Bolivia, para eligir decano, existe el voto ponderado: o sea, que el voto de los docentes vale por 50 votos de los estudiantes. En la elección, el voto estudiantil rechazaba contundentemente a Raúl España. Pero, gracias a los 11 votos de los docentes “truchos”, España pudo ganar. Entonces, les devolvió el favor haciéndolos entrar, una vez más, a las aulas.

Estos profesores son reconocidos funcionarios de la derecha. Este es el caso de Antonio Vargas, de Podemos (partido de derecha) y asesor del Comité Cívico de Sucre. Y también de Alex Urquidi, colaborador de Sánchez Verzain (ministro del Interior en el gobierno del sanguinario Sánchez de Losada).

Con estos antecedentes tenemos una radiografía de la situación universitaria, donde la corrupción está al orden del día y las prebendas son moneda corriente. Es el panorama una educación a favor de las camarillas (de derecha), que además significa una baja sustancial del nivel educativo.

Los estudiantes en pie de lucha para echar a los docentes truchos

El martes 18 de noviembre, dos estudiantes decidieron entrar en huelga de hambre en las oficinas del decanato, acción que lamentablemente no fue consultado por nadie y tampoco votada en ninguna asamblea. Pero, a partir de ese día, la carrera estuvo movilizada con diferentes acciones, donde participaron unos 500 estudiantes.

El jueves 20 de noviembre se realizó una asamblea que aprobó hacer una marcha el día siguiente donde participamos unos 350 estudiantes. La movilización se dirigió a donde estaban los compañeros en huelga de hambre.

Al llegar al edificio, el sentimiento de la gente era de realizar acciones que fuesen más allá de una simple huelga de hambre. Es que la misma no estaba dando frutos. La propuesta fue tomar el edificio. Pero las direcciones del Centro de Estudiantes de la carrera y varios de los docentes se dedicaron a dar explicaciones sin sentido de porqué ese día “no se podían tomar medidas radicalizadas”...

Pero, por suerte, la desmovilización no llegó a mayores: después de exhortarlos a que vuelvan a sus casas, los estudiantes seguían en las calles.

El martes 25 se realizó otra asamblea. En ella la mayoría de los estudiantes siguieron presionando en el sentido de que la salida al conflicto era tomar medidas más contundentes. Aquí la dirección del Centro de Estudiantes tuvo que tomar parte en el asunto para no quedar tan despegada de la base, disconforme, con toda razón, por la inacción del Centro.

La ocupación

Seguido de esto, el jueves 27, una nueva asamblea con bastante participación decide la toma del edificio mientras el resto de los estudiantes bajarían en marcha. Esta marcha no fue tan contundente pero sí con más decisión en la acción que se iba a realizar: o sea, la toma del edificio donde está la administración de la Universidad y el canal de TV universitario.

El edificio se tomó de una forma bastante desorganizada, después de una hora de idas y vueltas. Quedó en evidencia que era falso el pretexto de días anteriores de que no era posible la toma “por falta de organización”. El único problema era que las direcciones tenían miedo del desborde de la base y no sabían como controlarlo. Estas direcciones nunca estuvieron a la altura de las circunstancias.

En el transcurso de los días, se evidenciando cada vez más, quién era la dirección y quién controlaba el edificio. Las organizaciones que tenían las mayores responsabilidades (por tener más integrantes y ser parte del Centro de Estudiantes), quedaron en evidencia porque –junto con la directora de la carrera– comenzaron a hacer todo lo posible para levantar la medida. Buscaban cualquier pretexto que la oportunidad de salir del trance lo más “decentemente” posible.

Mientras tanto, otros compañeros que tomamos la acción revolucionaria, éramos los que garantizábamos el control del edificio y la continuidad de la toma. Entre ellos estábamos los compañeros y simpatizantes de SOB Bolivia.

La levantada de una lucha en pleno ascenso

Las reuniones que se realizaban al final de cada día, eran una seguidilla de discursos de los estudiantes o docentes vinculados al POR (Partido Obrero Revolucionario) que planteaban levantar la toma porque “era muy peligroso seguir con una medida así”. En vez de dar aliento para seguir la lucha, trataban de desmoralizar a los estudiantes de todas las formas posibles, especialmente a los compañeros que se quedaban todos los días y las noches en la ocupación.

Por eso no fue casual que hayan traicionado y desoído a las diferentes asambleas que ratificaban la exigencia de anular el proceso de contratación. Finalmente lograran levantar la toma mediante una asamblea totalmente organizada y controlada por los aparatos del Centro de Estudiantes, el URUS (la juventud del POR) y la directora de la carrera.

La máxima traición fue haber pactado con las autoridades universitarias, dejando una lucha por la mitad, cuando la relación de fuerzas no venia en bajada sino que estaba en asenso.

¡Esto no se puede perdonar! El conflicto estaba en todos los medios y llegaban cada ves más solidaridades. Contaba ya con el apoyo de la Federación Universitaria local de la UPEA (Universidad de El Alto) y el sostén de las carreras de Arquitectura, Psicología, Medicina, Ciencias Puras, Técnica, Humanidades y Derecho de la UMSA, sin contar que cada vez se sumaban más y más compañeros de la propia carrera. Y, una de las cosas graves, fue haber desaprovechado la solidaridad de los compañeros de la Universidad de Puno, Perú. ¡Es en esos momentos que se volcaron la levantar la lucha, en complicidad con las autoridades de la UMSA!

La entrega de la lucha se pactó en una reunión donde estaba la rectora Teresa Rescala junto con el secretario general, asesoría legal, vicerrector y otros funcionarios de la UMSA. De la otra parte se encontraban estudiantes y docentes que fueron elegidos en reuniones realizadas en el edificio. Salvo Socialismo o Barbarie Bolivia y el MST (Movimiento Socialista de Trabajadores de Bolivia, grupo que nada tiene que ver con su homónimo de Argentina), las demás corrientes de la facultad fueron a la rastra de lo que dictaminaron los directivos.

En resumen, lo resuelto fue realizar un “proceso” que juzgase la contratación. Hicieron la promesa de realizarlo en 45 días, cosa que nadie se cree, más aun en el ámbito de la justicia universitaria.

Lo que terminaron acordando, nada tiene que ver con la exigencia que se planteaba en las asambleas que era la anulación definitiva de la contratación. Había además otros puntos en las peticiones, como la construcción de un edificio único para la Facultad de Ciencias Sociales.

Estas resoluciones se tenían que refrendar en una asamblea que se realizó el martes 2 de diciembre. Como ya adelantamos, se organizó una asamblea totalmente preparada y controlada por los aparatos del Centro de Estudiantes, el URUS (la juventud del POR). Manejada burocráticamente, no se dejaba hablar a los compañeros, se los cortaba en sus exposiciones y se tergiversaba todo. El ejemplo clave fue cuando se terminó votando si se aceptaba lo que se había acordado con la rectora, o se “seguía con la toma hasta febrero”... Una alternativa falsa y ridícula, para meterle miedo a la base.

Es necesaria la construcción de direcciones estudiantiles independientes y revolucionarias

Para ganar las luchas que vendrán más temprano que tarde, hay que formar nuevas direcciones independientes y revolucionarias consecuentes, que estén a la altura de las circunstancias.

Estos corruptos están desde hace años chupando la sangre de los estudiantes. Y lo seguirán haciendo si no nos preparamos para enfrentar a las autoridades universitarias y a las direcciones estudiantiles burocráticas, que siempre estarán de espaldas a los intereses de la mayoría.

Sin esto, no podrá haber cambios substanciales… y estará latente que, después de repetidas traiciones, se produzca una desmoralización de los estudiantes.