Entrevista sobre la huelga de la Imprenta Nacional

"El Gobierno vio la fuerza que tenemos para
defender nuestros derechos"

Por Leonor Rojas
Prensa Socialista Nº 120, febrero/marzo 2012

En el marco de la reactivación de luchas vividas durante el pasado 2011, sectores de trabajadores participaron en huelgas como respuesta a los intentos de ajuste del Gobierno para cobrar la crisis a las y los explotados. Particularmente, a finales del año, se desarrolló una huelga en la Imprenta Nacional por la defensa de las condiciones de trabajo. Cabe destacar que los trabajadores de la imprenta se caracterizaron por su organización y movilización en los últimos años.

A continuación, presentamos un extracto de la conversación que sostuvimos desde Prensa Socialista con Guillermo Murillo, trabajador y dirigente sindical de la Imprenta Nacional y actual directivo de la Asociación Nacional de Empleados Públicos y Privados (ANEP).

¿Por qué surgió la necesidad de iniciar la huelga?

–Se inició a raíz del incumplimiento del Ministro de Seguridad y Gobernación de este gobierno y además miembro de la Junta Administrativa de la Imprenta, Mario Zamora, de firmar la negociación y el saneamiento de la convención colectiva. Como parte del proceso de saneamiento, se retiró de la Procuraduría General de la República la consulta de validez de la convención. Fue la Ministra de Trabajo quien retiró la consulta por la realización de la huelga.

¿Cuáles son las principales lecciones de este movimiento?

–Se dio unidad en la imprenta para defender nuestros derechos, como en este caso la convención colectiva, y se logró la unidad del grupo como trabajadores en general.

Lo novedoso fue que todas las decisiones se tomaron como un colectivo. Había una dirección del movimiento, pero este grupo no tomaba las decisiones sin antes consultar a los trabajadores.

Además, el Gobierno vio la fuerza que tenemos los trabajadores de la Imprenta Nacional para defender nuestros derechos.

Durante la huelga en la imprenta, también se dieron movilizaciones similares por parte de los anestesiólogos y los trabajadores bananeros de la empresa Chiquita en Sixaola. ¿En qué consistió la solidaridad de los trabajadores de la imprenta hacia los trabajadores bananeros?

–Hubo solidaridad desde los compas del PST que recogieron firmas de representantes estudiantiles para apoyar la huelga y de compañeros que fueron el enlace con los trabajadores bananeros como Edgar Morales.

Compartimos con dirigentes bananeros que nos acompañaron en la imprenta. Al día siguiente, recolectamos tres cajas de víveres para enviar a Sixaola, porque sabíamos que los trabajadores bananeros no tenían salario y el comisariato no les daba crédito para comprar.

Se hizo conciencia acerca de la lucha y la unidad de los sindicatos, pues por un lado nosotros luchábamos luego de año y medio de espera y ellos, los trabajadores bananeros, se iban a huelga por primera vez en 27 años. De esta forma, pudimos estrechar lazos entre los trabajadores.

¿Cuáles son las principales amenazas de las condiciones laborales de los trabajadores de la imprenta con respecto a la crisis fiscal?

–La crisis fiscal nos afecta como trabajadores y ciudadanos, en este caso del sector público. El Gobierno ha amenazado con realizar 30 mil despidos, 5 mil de ellos contra los interinos y 25 mil puestos en propiedad más están en juego.

Aunado a esto, la Viceministra de Seguridad, Marcela Chacón Castro, amenazó a los trabajadores de la imprenta de cerrarla, por lo que alrededor de 200 quedarían eventualmente desempleados.

Los problemas de la imprenta no se deben a la movilización de los trabajadores, sino a los intereses de quienes manejan la empresa. La imprenta genera unos 3 mil millones de colones, que dejan de percibir grandes empresarios como un grupo de Llorente de Tibás, cercano al Gobierno y cuyo editorialista es asesor de Laura Chinchilla.

La Imprenta Nacional es como una pequeña JAPDEVA, porque el Gobierno quiere quitar la convención colectiva y el sindicato, además de cerrar la imprenta, con la única diferencia de que aquí no ofrecen plata. Hay que ver qué sucede.

Reiteramos las gracias con la solidaridad del PST hacia nuestra lucha.