El anuncio del Gobierno de retirar la reforma a la educación superior no frenó la movilización prevista para este jueves. Los estudiantes aseguran que se trata de la "marcha más grande que ha visto Bogotá en los últimos años".

La denominada ‘Toma de Bogotá’, como han llamado los estudiantes la manifestación prevista para este jueves, no se canceló a pesar del anuncio del presidente Juan Manuel Santos sobre el retiro de la reforma a la Ley de Educación Superior si se levantaba el paro.

Aunque los estudiantes celebraron la inesperada postura del Gobierno, aclararon que la anunciada gran movilización estudiantil sigue en marcha y que el rumbo del paro universitario se definirá este fin de semana en una reunión de urgencia de la Mesa Amplia Nacional Estudiantil (MANE).

La ‘Toma de Bogotá’ es la tercera gran movilización nacional organizada por la MANE. De acuerdo con Jairo Rivera, presidente de la Federación de Estudiantes Universitarios (FEU) y vocero de la MANE, se espera la asistencia de 5.000 personas que llegarán de Pereira, Medellín, Neiva, Cali, Villavicencio, Tunja y otras ciudades.

Rivera señaló que junto al estudiantado que protesta en la capital y otros sectores sociales, los participantes de la marcha podrían llegar a sumar cerca de 120.000. Por su parte, la Alcaldía de Bogotá espera unos 35.000 asistentes.

Según los estudiantes, la jornada tiene varios objetivos: generar presión política entorno al hundimiento de la reforma a la Ley de Educación Superior, lo cual aún está por definirse, e incentivar el debate de la educación como un derecho.

“Queremos construir una reforma democrática y generar una reflexión sobre las libertades democráticas que amparan el derecho a protestar. El debate de la educación no es un capricho”, expresó Rivera en rechazo a algunos señalamientos que relacionan a los estudiantes con actos violentos registrados en las manifestaciones.

El representante estudiantil defendió las protestas. “Son una manifestación de amor hacia el país. Es una pelea por los derechos sociales y la educación”.

Por su parte, Óscar Aponte, también vocero de la MANE, explicó que la magnitud de la jornada, que “paralizará las principales vías de Bogotá”, se debe a la participación activa de varios actores: “Marcharán el estudiante, el transportador, el trabajador, el maestro y el padre de familia”.

Entre las organizaciones de carácter sindical y social que marcharán están la Federación Colombiana de Educadores (FECODE), la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) y la Confederación General del Trabajo (CGT).

Mediante un comunicado, el presidente de FECODE, Senén Niño, expresó su respaldo al estudiantado.“Los estudiantes tienen todo el apoyo de FECODE y estaremos presidiendo la protesta promovida por la MANE a favor de la educación (...) Mientras las protestas sigan transcurriendo dentro de los cauces de la civilidad, el movimiento estudiantil ganará mayor opinión en su propósito de defender la educación pública superior”.

Cabe recordar que los estudiantes defienden la nueva jornada de protestas por ser el único mecanismo que les genera resultados positivos. “Si no se hubieran realizado estas movilizaciones, el proyecto habría pasado a pupitrazo”, indicó Rivera.

Las marchas también contarán con la presencia de los estudiantes de secundaria. Pedro Arango, dirigente de la FECODE, aseguró que unos 250.000 maestros y cerca de 300.000 estudiantes de los grados décimo y 11 de los colegios públicos distritales marcharán desde las 10 de la mañana. Añadió que los docentes podrán reiniciar las clases a partir de las 3 de la tarde.

Finalmente, Arango advirtió que el próximo 16 de enero comenzarán las clases si se retira la reforma, de lo contrario, “se entrará en un cese de actividades”.

Alerta en movilidad

Las marchas comenzarán hacia las 10 de la mañana en más de 20 puntos de concentración y concluirán hacia las 2 de la tarde en una cumbre política en la Plaza de Bolívar.

En la jornada se podría llegar a afectar el sistema masivo de transporte público Transmilenio, de acuerdo con los pronunciamientos de la MANE. “Será un día de ‘transmimarchas”, apuntó Rivera en alusión a posibles bloqueos en las estaciones. Añadió que debido a la participación de otras ciudades, “las entradas a Bogotá también podrían estar selladas”.

Ante el colapso anunciado en el tránsito vehicular, el vocero de la organización indicó que el trancón es una “cuestión secundaria”. “Nuestra intención no es incomodar a la gente. Este jueves será un día para pensar en la educación. Los invitamos a marchar y a apoyar la educación”, apuntó.

Los estudiantes aseguraron que participarán de un campamento en la Plaza Bolívar. “Vamos a instalarnos en un centro político como una propuesta de resistencia y desobediencia civil. Esperamos contar con las garantías”, señaló Rivera.

Cabe recordar que el 12 y el 13 de noviembre la MANE realizará el Encuentro Nacional Programático, que busca adelantar la construcción de una propuesta alternativa de reforma a la Ley de Educación Superior.

Seguridad y orden público

La alcaldesa de Bogotá (d), Clara López, señaló que bajo la coordinación de la Secretaría de Gobierno convocó a la MANE, la Policía Metropolitana de Bogotá, las secretarías de Salud y Movilidad, el Fondo de Prevención y Atención de Emergencias (FOPAE), el Instituto Distrital de la Participación y Acción Comunal (IDPAC) y la Personería Distrital, para establecer cómo funcionará el plan de contingencia especial para este jueves.

Los acuerdos buscan el respeto a los derechos a la movilización y a la protesta, y minimizar el impacto para quienes no participan de las marchas estudiantiles. "Continuamos trabajando con la MANE y con sus comités de Derechos Humanos para que las marchas transcurran en completo orden", señaló López.

Gobierno retirará reforma a la educación superior
si estudiantes levantan paro

Así lo anunció el presidente Juan Manuel Santos, tras una reunión con los congresistas de las comisiones sextas de Senado y Cámara en la que se discutió el retiro de la iniciativa. La idea es discutirla y presentarla el próximo año.

Tras más de un mes de diferencias entre el Gobierno y sectores estudiantiles por cuenta del proyecto de reforma a la Ley 30 de Educación Superior, radicado el pasado 3 de octubre en el Congreso de la República, el presidente Juan Manuel Santos anunció que si los estudiantes levantan el paro y regresan a clases, retirará la iniciativa del Legislativo para buscar mayores consensos.

El mandatario se pronunció al término de un encuentro con congresistas de las comisiones sextas de Senado y Cámara, encargadas de discutir la reforma, quienes le expresaron al mandatario sus argumentos para retirar la iniciativa.

“Las comisiones de Senado y Cámara me han solicitado que por qué no retiramos el proyecto y hacemos una labor adicional de pedagogía (…) Esa propuesta me parece adecuada, y siempre y cuando los líderes de este proceso se sienten a negociar y cesen el paro, yo le pediría al Congreso autorización para retirar el proyecto”, dijo Santos.

El jefe de Estado lamentó que algunos jóvenes no podrán acceder a cupos en las universidades públicas si todos los que allí estudian pierden el semestre e insistió en que la reforma tiene elementos muy positivos “que algunos no han querido entender o no los han entendido”.

“El proyecto aumenta los recursos para la universidad pública y fortalece a la universidad. Permite la ampliación de los cupos y mejora la calidad de la educación superior”, insistió el mandatario.

Por eso el anuncio de retirar la iniciativa no es un punto final para la reforma. La idea, explicó Santos, es sentarse con los estudiantes y los demás actores de esta situación para discutir el proyecto y llevarlo de nuevo al Congreso el próximo año.

Uno de los congresistas que en la reunión con Juan Manuel Santos lideró la propuesta de retirar la iniciativa fue Plinio Olano, vocero de La U en la Comisión Sexta del Senado, quien expuso los inconvenientes que existen para tramitar la iniciativa y por eso sugirió este camino.

Desde el Partido Liberal también se escucharon este miércoles voces a favor del retiro de la reforma. Simón Gaviria, miembro de la Dirección Plural Nacional Liberal, sugirió postergar el estudio del proyecto para el próximo año al considerar que la iniciativa no tiene ambiente favorable, que aún no hay los consensos necesarios y que es necesario dar espacio a que estudiantes y rectores presenten sus propuestas.

Otro miembro de la dirección liberal, Luis Fernando Velasco, coincidió con esa posición y su sugerencia fue que el Gobierno analice con más calma las peticiones que todos los sectores han hecho sobre al proyecto. También sugirió que este semestre sería mejor no abordar la discusión y que en marzo del 2012 se podría pensar en un proyecto mejor concertado.

Pero estas no fueron las únicas colectividades que pidieron el retiro de la iniciativa, pues el Polo Democrático, en postura lógica a su condición de partido opositor de gobierno, había sugerido ese escenario. Incluso, el senador Camilo Romero pidió la renuncia de la ministra de Educación e inició una campaña de recolección de firmas para ese propósito.

También se escucharon voces individuales de otros partidos, como la de la representante Ángela Robledo (Partido Verde), quien también pidió el retiro de la iniciativa.

La decisión del presidente Santos se da un día antes de realizarse la llamada 'Toma de Bogotá', una movilización nacional que convoca a estudiantes de otras ciudades. Óscar Aponte, vocero de la Mesa Amplia Nacional Estudiantil (MANE), calificó la jornada de protestas como la “marcha más grande que ha visto Bogotá en muchos años, ya que se movilizarán el estudiante, el trabajador, el maestro y el padre de familia”. Por su parte, Jairo Rivera, presidente de la Federación de Estudiantes Universitarios (FEU), indicó que se espera una convocatoria de 120.000 personas.

Ahora el balón está en la cancha de los estudiantes, quienes exigían el retiro del proyecto para levantar el paro educativo. A esta hora, la MANE, que representa a todos los sectores estudiantiles, analiza el anunció del Gobierno y en las próximas horas entregará un comunicado con su postura.

El fin de semana estudiantes decidirán
si levantan el paro

Pese al anuncio del presidente Santos, voceros de la Mesa Amplia Nacional Estudiantil (MANE) afirmaron que la 'Toma de Bogotá' sigue vigente para este jueves. Exigieron garantías para la construcción de un nuevo modelo de educación superior.

Tras el anuncio del presidente Juan Manuel Santos sobre el retiro de la reforma a la Ley de Educación Superior si los estudiantes levantan el paro universitario, representantes estudiantiles y algunos voceros de la Mesa Amplia Nacional Estudiantil (MANE) aseguraron que continuarán las marchas programadas.

Aunque uno de los objetivos de las marchas siempre había sido el retiro de la iniciativa, los estudiantes destacaron que las movilizaciones también buscan la construcción de un nuevo modelo de educación superior.

Según los líderes estudiantiles, en los próximos días se realizará una reunión amplia y de urgencia para definir el rumbo que tomará el paro universitario.

Por ahora, los voceros de la MANE precisaron que la 'Toma de Bogotá' continúa vigente para este jueves. Así lo reveló a Semana.com Jairo Rivera, presidente de la Federación de Estudiantes Universitarios (FEU).

"La movilización va porque no sólo se hace por la reforma sino para incentivar el debate de la educación como un derecho. La pelea no se agotó en el retiro de la reforma", apuntó Rivera, quien minutos después de conocerse la postura del Gobierno aseguró que el estudiantado "no aceptará un retiro con condicionamientos".

Por su parte, Juan Sebastián López, vocero de la MANE, explicó que el estudiantado necesita saber cómo será incluido en la creación de un nuevo proyecto de reforma para definir si se mantienen en paro.

Mientras tanto, otros representantes estudiantiles celebraron la posición del jefe de Estado. "Estamos muy contentos con el anuncio del presidente y vamos a marchar porque queremos la construcción de un proyecto desde la Universidad", señaló Sergio Fernández, miembro de la MANE.

Finalmente, Carlos Andrés Amaya, representante a la Cámara y congresista a favor del archivo de la iniciativa, agradeció al mandatario a nombre de los estudiantes y aclaró que las protestas continuarán para conseguir instalar una "gran mesa nacional en la que se discuta una nueva reforma".

El anuncio del Gobierno

El presidente Santos anunció este miércoles que si los estudiantes levantan el paro y regresan a clases retirará del Legislativo, para buscar mayores consensos, el polémico proyecto de reforma a la Ley 30 de Educación Superior.

El mandatario se pronunció al término de un encuentro con congresistas de las comisiones sextas de Senado y Cámara, encargadas de discutir la reforma, quienes le expresaron al mandatario sus argumentos para retirar la iniciativa.

"Las comisiones de Senado y Cámara me han solicitado que por qué no retiramos el proyecto y hacemos una labor adicional de pedagogía (…) Esa propuesta me parece adecuada, y siempre y cuando los líderes de este proceso se sienten a negociar y cesen el paro, yo le pediría al Congreso autorización para retirar el proyecto", dijo Santos.

El jefe de Estado lamentó que algunos jóvenes no podrán acceder a cupos en las universidades públicas si todos los que allí estudian pierden el semestre por cuenta del paro e insistió en que la reforma tiene elementos muy positivos "que algunos no han querido entender o no los han entendido".

"El proyecto aumenta los recursos para la universidad pública y fortalece a la universidad. Permite la ampliación de los cupos y mejora la calidad de la educación superior", insistió el mandatario.

Por eso el anuncio de retirar la iniciativa no es un punto final para la reforma. La idea, explicó Santos, es sentarse con los estudiantes y los demás actores de esta situación para discutir el proyecto y llevarlo de nuevo al Congreso el próximo año.

Uno de los congresistas que en la reunión con Juan Manuel Santos lideró la propuesta de retirar la iniciativa fue Plinio Olano, vocero de La U en la Comisión Sexta del Senado, quien expuso los inconvenientes que existen para tramitar la iniciativa y por eso sugirió este camino.

Desde el Partido Liberal también se escucharon este miércoles voces a favor del retiro de la reforma. Simón Gaviria, miembro de la Dirección Plural Nacional Liberal, sugirió postergar el estudio del proyecto para el próximo año al considerar que la iniciativa no tiene ambiente favorable, que aún no hay los consensos necesarios y que es necesario dar espacio a que estudiantes y rectores presenten sus propuestas.

Otro miembro de la dirección liberal, Luis Fernando Velasco, coincidió con esa posición y su sugerencia fue que el Gobierno analice con más calma las peticiones que todos los sectores han hecho sobre al proyecto. También sugirió que este semestre sería mejor no abordar la discusión y que en marzo del 2012 se podría pensar en un proyecto mejor concertado.

Pero estas no fueron las únicas colectividades que pidieron el retiro de la iniciativa, pues el Polo Democrático, en postura lógica a su condición de partido opositor de gobierno, había sugerido ese escenario. Incluso, el senador Camilo Romero pidió la renuncia de la ministra de Educación e inició una campaña de recolección de firmas para ese propósito.

También se escucharon voces individuales de otros partidos, como la de la representante Ángela Robledo (Partido Verde), quien también pidió el retiro de la iniciativa.