Economía mundial

Decisión de urgencia ante peligro de quiebra

Nacionalización de las hipotecarias Freddie Mac y
Fannie Mae

Europa Press, 06/09/08

Washington.– El Departamento del Tesoro estadounidense esta dando los toques finales a un plan diseñado para nacionalizar las firmas de garantía hipotecaria Freddie Mac y Fannie Mae y que será anunciado oficialmente este mismo fin de semana, según fuentes cercanas al proceso citadas por el diario estadounidense "The Wall Street Journal".

El plan prevé poner ambas hipotecarias, que aglutinan cerca la mitad de la deuda hipotecaria de EEUU, valorada en 12 billones de dólares, bajo el control del organismo Federal Housing Finance Agency, lo que implica que el Gobierno tomaría las riendas de ambas entidades, al menos de manera temporal.

Esto implicaría una sustanciosa inyección de capital estatal en ambas sociedades, que se aplicaría de manera gradual en base trimestral para ir saneando sus balances progresivamente, según las mismas fuentes.

Además, el Tesoro prevé una renovación total de la cúpula directiva de ambas empresas y tanto el consejero delegado de Fannie Mae, Daniel H. Mudd, como el de Freddie Mac, Richard Syron, serían eventualmente despedidos, aunque algunos detalles finales del acuerdo están sujetos a cambios y pendientes de cerrarse.

Esta nacionalización supondría la mayor intervención gubernamental de una entidad financiera por parte del Gobierno estadounidense desde que comenzó la "crisis subprime' hace algo mas de un año.

La administración norteamericana ya autorizó el pasado mes de febrero un paquete de "estímulos" económicos de 168.000 millones de dólares (117.768 millones de euros) a través del rescate de la entidad Bear Stearns. Desde entonces, tanto la administración como la Reserva Federal estadounidense (Fed) han tomado un papel cada vez más agresivo en respuesta a la que se ha convertidos en una de las peores crisis financieras de las últimas décadas.

Fannie Mae and Freddie Mac son dos piezas clave en el mercado hipotecario estadounidense. Sus problemas han amenazado en los últimos meses con empeorar la situación del mercado inmobiliario estadounidense al aumentar los impagos.

La intervención estatal podría ayudar a los prestamistas a mantener los tipos de las hipotecas en un nivel más bajo de lo habitual si prosigue la inestabilidad en el sector.

El Departamento del Tesoro tiene potestad para intervenir en ambas hipotecarias en virtud de la legislación aprobada en el Congreso el pasado mes de julio. La decisión sobre su futuro papel podría quedar el manos de la nueva administración, tras las elecciones generales.

Desde que se aprobó la legislación, funcionarios federales han estado trabajando junto a banqueros de Morgan Stanley en la elaboración de un plan de salvamento sobre ambas entidades.

Mientras tanto, los títulos de ambas hipotecarias se desplomaron el pasado viernes tras el cierre de la Bolsa de Nueva York en la sesión de prenegociación, con un retroceso del 25% en el caso de Fannie Mae y un 20% en Freddie Mac.

Reunión de urgencia

El plan de rescate cuenta con la colaboración del presidente de la Reserva federal, Ben Bernanke y el responsable de Federal Housing Finance Agency, James Lockhart. Según fuentes cercanas al proceso, los consejeros delegados de ambas hipotecarias acudieron el pasado viernes a una reunión junto con Bernanke y el secretario de Tesoro, Henry Paulson.

Estas reuniones tendrían como objetivo la consecución del visto bueno sobre el plan de ambos ejecutivos, aunque en la práctica su autorización no sea necesaria.

"Estamos haciendo progresos en nuestro trabajo", declaró la portavoz del Departamento del tesoro, Jennifer Zuccarelli, que no quiso añadir más detalles sobre el transcurso de la reunión. Los portavoces de ambas hipotecarias también mantienen la confidencialidad acerca del presunto plan de salvamento orquestado por el Gobierno estadounidense.

Fannie Mae y Freddie Mac poseen o garantizan más de 5 billones de dólares en hipotecas o títulos hipotecarios y han sufrido pérdidas combinadas de cerca de 14.000 millones de dólares en los últimos doce meses debido a una oleada de impagos.

El problema es que una gran cantidad de entidades poseen bonos y valores de ambas entidades debido a que se trata de sociedades que cuentan con garantía del estado, por lo que su quiebra podría arrastrar a numerosos bancos más además de agravar los problemas del sector inmobiliario de un país en crisis.

El secretario del Tesoro, Henry Paulson, ha asegurado en varias ocasiones que no dejaran caer a las hipotecarias, más que nada, porque podría llevar al desplome del sistema financiero estadounidense y a una grave crisis a escala internacional debido a su gran tamaño.

Sin embargo, los inversores siguen reticentes a invertir en ambas sociedades ya que no se fían de las intenciones del Gobierno, lo que ha llevado a los títulos de Fannie y Freddie a depreciarse cerca de un 90% en el último año.

El Congreso estadounidense creó Fannie Mae en 1.938 durante la gran depresión para comprar hipotecas aseguradas a prestamistas y así proporcionarles liquidez suficiente para conceder nuevos préstamos. Fannie siguió operando como una agencia gubernamental durante las décadas de los 40' y 50' a pesar de que se dieron pasos hacia la privatización de la sociedad. En 1.968, el presidente estadounidense Lyndon Johnson decidió privatizar la entidad.


Pánico en EE.UU. por crisis de empresas hipotecarias

AFP, 21/08/08

Nueva York.– Los dos gigantes del refinanciamiento hipotecario de Estados Unidos, Fannie Mae y Freddie Mac, eran objeto de un movimiento de pánico en la Bolsa de Nueva York ayer, debido a persistentes rumores sobre su nacionalización inevitable e inminente.

Las acciones de estos dos grupos, durante largos años vistos como fortalezas indestructibles, continuaban ayer la caída libre de las últimas sesiones, cerrando en baja de 22,06%, a 3,25 dólares en el caso de Freddie Mac y de 26,79%, a 4,40 dólares para Fannie Mae, niveles no vistos en cerca de 20 años.

La perspectiva de un salvamento dirigido por el Estado parecía la más probable para los observadores, ya que el gobierno cuenta con toda la autoridad para intervenir, luego del plan de apoyo gubernamental iniciado a mediados de julio.

Fannie Mae y Freddie Mac poseen o garantizan 5,2 billones de dólares de créditos hipotecarios, o sea, más del 40% del conjunto del crédito hipotecario estadounidense. El hundimiento de los mercados inmobiliario y de crédito hacen derrumbar las posibilidades de pago de sus deudas.

Según la cadena financiera CNBC, los dirigentes de Freddie Mac y de Fannie Mae se reunirían con representantes del Tesoro.

Muchos medios mencionaron ayer “el enorme fracaso” de las medidas adoptadas sobre Fannie y Freddie.

En un editorial, el diario financiero Wall Street Journal concluyó que el secretario del Tesoro, Henry Paulson, “pronto no tendrá otra alternativa que meter su violín en bolsa y poner en manos de los contribuyentes la recapitalización de los gigantes del sector hipotecario”.

Alimentando este escenario, el ex economista jefe del FMI Kenneth Rogoff declaró el martes que “Freddie Mac y Fannie Mae tendrían que haber sido cerrados hace diez años” y expresó su convicción de que “deben ser estatizados”.

“El mercado tiene miedo de una estatización” y de las pérdidas que esto significa para los accionistas, resumió el analista Gregori Volokhin.

Para él, “una recapitalización es necesaria, pero la cuestión es saber si vendrá del sector público o del privado”. Si fuera privado, podría hacerse por vía de los fondos soberanos, según Volokhin, y recurriendo a los riquísimos fondos asiáticos y de los Emiratos, que ya socorrieron a varios bancos estadounidenses.

“En el caso de una estatización, los tenedores de deuda se van a salvar, pero los accionistas perderán toda su inversión”, advirtió.

Los problemas de ambos grupos ya tuvieron consecuencias desastrosas para los accionistas: el valor de la acción de Fannie Mae se dividió por 16 en un año y por 21 para Freddie Mac. La capitalización de ambos es de solo 5.300 y 2.300 millones de dólares, respectivamente.