Estados Unidos

La fábrica que se convirtió en símbolo de los desempleados

Los trabajadores ocupan la planta

Deutsche Presse–Agentur (DPA), 09/12/08

Chicago.– Los desesperados trabajadores que tomaron una fábrica que cerró abruptamente sus puertas el viernes pasado en Chicago se convirtieron en las últimas horas en el símbolo de la crisis económica que castiga a Estados Unidos.

Despedidos luego de que el Bank of America cancelara el crédito de la empresa, los empleados de Republic Windows & Doors ocuparon la fábrica y protagonizaron una sentada para reclamar el pago de sus salarios y de sus vacaciones. El viernes pasado, los 250 miembros del sindicato se organizaron en tres turnos para mantener ocupada la planta hasta que se llegue a un acuerdo con los dueños y el banco.

"Estamos haciendo esto por otros trabajadores del país –dijo el operador Ron Bender, que trabaja para la empresa desde hace 14 años–. Esto le puede ocurrir a cualquiera. Pueden cerrar y dejarte en la calle y no pagarte ninguna indemnización."

Decenas de periodistas y cámaras de televisión de todo el país estaban ayer en la planta y sus alrededores para seguir las alternativas de las negociaciones entre el sindicato, los directivos y el banco. Las escenas resumían la cruda realidad de la economía norteamericana y su mercado laboral, que en 2008 vio desaparecer 600.000 puestos de trabajo sólo en la industria de las manufacturas.

La atención de la prensa norteamericana y extranjera sobre el futuro de los trabajadores de Republic Windows llevó a que varios líderes comunitarios expresaran su apoyo y aliento a la protesta. Uno de ellos es el reverendo Jesse Jackson, que el domingo visitó a los empleados y les regaló varios pavos.

Incluso el presidente electo Barack Obama salió en defensa de los damnificados y dijo que su desgracia es un reflejo de la economía norteamericana.

"Los trabajadores reclaman los beneficios y pagos que se han ganado, y creo que están absolutamente en su derecho de hacerlo. Lo que les ocurre a ellos refleja lo que ocurre en toda la economía", dijo Obama, que comenzó su carrera política en Chicago.

"Jamás imaginamos que esto podría tener semejante repercusión", dijo Melvin Maclin, vicepresidente de la unidad gremial que representa a los trabajadores, al diario The Chicago Tribune . "Esperábamos ir presos", añadió.

Hasta ayer, sin embargo, los propietarios no habían iniciado acciones para expulsar a los manifestantes.

La ocupación de la planta había comenzado el viernes por la mañana, horas después de que el Departamento de Trabajo norteamericano informara que en noviembre se habían perdido 533.000 empleos, lo que llevó la tasa de desempleo norteamericana al 6,7%, su nivel más alto en los últimos 15 años.

Los directivos de la empresa le comunicaron al sindicato que estaban obligados a cerrar porque el Bank of America les había suspendido la línea de crédito el martes pasado.

La legislación federal obliga a que se les pague a los trabajadores las vacaciones que no cobraron y que se les avise con 60 días de anticipación cualquier despido colectivo o, en su defecto, se les pague el salario durante ese período. Pero la compañía adujo que no podía hacer esos pagos porque el banco "básicamente estaba controlando todos los gastos y éstos no fueron autorizados, sostuvo Leah Fried, representante del sindicato.

"Es totalmente vergonzoso que las instituciones financieras se beneficien de un rescate y que el Bank of America no otorgue crédito a quienes se supone que tienen que recibirlo, declaró Fried.

Republic Windows & Doors, con 48 años en el mercado de la construcción, se vio seriamente afectada por el derrumbe de esa actividad, pero los analistas y sindicalistas consideraron que la firma probablemente hubiera podido salir a flote si no le hubieran negado el crédito.