Estados Unidos

Record de suicidios y problemas psiquiátricos entre militares

¿Por qué un mayor mata a 13 de sus colegas?

Hasan se negaba a ser enviado a Afganistán

BBC World, 05/11/09

Ex soldados protestando contra la guerra:
hay desmoralización en las filas del
mayor ejército del mundo

Los investigadores estadounidenses están tratando de desentrañar las razones que llevaron al mayor Nidal Malik Hasan, un psiquiatra especializado en estrés postraumático, a ocasionar una matanza en la base militar de Fort Hood, en Texas.

El especialista de la BBC en temas de seguridad, Nick Childs, dice que las indagaciones del caso son una prioridad máxima para el ejército y el Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés).

Particularmente, los expertos prestarán atención a si hubo indicios sobre la posibilidad de que la matanza ocurriera y fueron pasados por alto.

En una conferencia de prensa realizada este viernes, fuentes del ejército confirmaron que doce militares y un civil murieron durante el incidente. De las 28 personas que fueron hospitalizadas, 14 han requerido intervenciones quirúrgicas.

Hasan, quien fue abatido con cuatro disparos, sobrevivió al tiroteo y está internado en condición estable y bajo custodia.

¿Abusos?

Oficialmente se sabe poco sobre el mayor Hasan, un musulmán de 39 años nacido en Vriginia e hijo de inmigrantes árabes. Sin embargo, los detalles comienzan a emerger y aquellos que lo conocen aseguran que no es un extremista religioso.

Se sabe que trabajó durante seis años como psiquiatra en un importante centro de atención a soldados que volvían de la guerra, el hospital Walter Reed, en Washington, y que en julio pasado fue transferido a Fort Hood.

Familiares de Hasan dijeron que había sufrido abuso racial y religioso, que se lo había destinado a Afganistán, algo que él rechazaba, y que quería abandonar el ejército.

Hasan había sido trasladado a Fort Hood en abril. Su primo, Nader Hasan, dijo en entrevistas con medios estadounidense que se había estado resistiéndo a ser desplegado en Afganistán.

Sin embargo, un portavoz militar declaró que no podía confirmar esto último. En palabras del coronel John Rossi, "no vamos a especular sobre los motivos (de la matanza). Dejemos que los investigadores hagan su trabajo".

Fort Hood: record de suicidios

Un hecho que ahora los investigadores no pueden dejar de observar es la incidencia de los suicidios entre militares apostados en la base de Fort Hood, donde se han reportado diez este año.

Ésta es una de las cifras más altas en una instalación de ese tipo en Estados Unidos, afirma el especialista de la BBC Nick Childs.

Es que las huellas emocionales de la participación de efectivos de esa base en las guerras de Irak y Afganistán se hacen evidentes tanto en la misma Fort Hood como en las comunidades circundantes, añade Childs.

Con sus 850 kilómetros cuadrados, la base de Texas es una de las más grandes de Estados Unidos, si no la mayor.

La instalación alberga a unos 45.000 militares, aunque muchos de ellos han sido trasladados al teatro de operaciones.

La memoria de los soldados muertos en las guerras se honra en varios sitios, tanto en la base como en lugares cercanos. Ello ocurre, por ejemplo, en la escuela de la población de Killeen, donde muchos alumnos han perdido a padres o familiares.

Por las características de la base y su enorme población militar, Fort Hood ha estado en el centro de atención del país en términos de lo que se llama "despliegue sostenible" del ejército y también en cuanto a las repercusiones del estrés postraumático, explica Childs.


Al parecer Hasan, psiquiatra, iba a ser enviado pronto a Afganistán y estaba molesto por las guerras en ese país y en Irak

Estupor y dudas por la masacre de Texas

Agencia Reuters, 07/11/09

Fort Hood, Texas.– Mientras las autoridades norteamericanas investigaban cuáles fueron las razones de la masacre en la mayor base militar del país, que anteayer dejó 13 muertos, ayer se reveló que el atacante, el mayor del ejército Malik Nadal Hasan, había recibido tratamientos psicológicos debido a su mala relación con los pacientes cuando estudiaba medicina.

En la matanza, la peor en una base norteamericana, 12 de los 13 muertos eran soldados, confirmó el comandante Steven Braverman, del hospital de la base. De los 30 heridos, 28 se mantienen "estables", añadió. Entre ellos está Hasan, que se encuentra inconsciente y conectado a un respirador artificial, tras recibir cuatro impactos de bala durante el tiroteo.

Los motivos del ataque aún no han sido establecidos, pero al parecer Hasan, psiquiatra, iba a ser enviado pronto a Afganistán y estaba molesto por las guerras en ese país y en Irak. "Estaba mortificado por la idea de tener que ir al frente. Era su peor pesadilla", reveló ayer uno de sus primos, Nader Hasan. "Era víctima de acoso por parte de sus compañeros" por ser musulmán, añadió.

Según su versión, el atacante había contratado a un abogado para retirarse del ejército, "pero había llegado al límite de sus posibilidades". Por su parte, un tío del tirador, Noel Hasan, dijo que su sobrino "no tenía muchos amigos" y que repetía con frecuencia que "el ejército era su vida".

En declaraciones a la cadena NBC, Cone dijo que nunca pensó que Hasan podría representar una amenaza para la base. El general rechazó descartar la hipótesis de un acto terrorista, "pero los elementos con los que se cuenta hasta el momento no se orientan en esa dirección".

Durante seis años, antes de ser destinado a la base de Fort Hood en julio, Hasan, de 39 años, trabajó en el hospital militar Walter Reed para completar sus estudios de psiquiatría como interno, residente y, en 2008, como becario. Había recibido su diploma médico en Bethesda, Maryland, en 2001.

Mientras trabajó en el Walter Reed, Hasan tuvo ciertas "dificultades" que derivaron en su sometimiento a tratamiento psicológico y supervisión adicional, señaló Thomas Grieger, director de capacitación de ese centro militar en aquel entonces.

Grieger destacó que los problemas que tuvo Hasan fueron por las relaciones con los pacientes. Su tarea era tratar a los soldados que sufrían de estrés postraumático a su regreso de Irak y Afganistán.

Investigación

En tanto, hace seis meses, Hasan llamó la atención de la policía y de los servicios de seguridad debido a los comentarios que escribió en distintos sitios de Internet extremistas. En uno de ellos, Hasan equipara a los terroristas suicidas con un soldado que se arroja encima de una granada para salvar a sus compañeros.

Las autoridades federales confiscaron ayer la computadora de Hasan durante un registro de su departamento en la localidad texana de Killeen.

Según contó una vecina, Hasan retiró la mayoría de sus pertenencias del departamento en los días previos al tiroteo. Patricia Villa dijo que entre el miércoles y el jueves últimos el soldado le ofreció "algunas cosas, incluso un libro nuevo del Corán", y que le dijo que sería enviado a prestar servicios a otro país.

Un video tomado por una cámara de seguridad de un supermercado abierto las 24 horas, difundido por la CNN, muestra a Hasan el mismo día de la masacre, vestido con una túnica blanca típica de los musulmanes, al entrar a comprar su desayuno.

El propietario del local, que conocía desde hace años a quien él llama "Comandante Nadal", indicó que, como casi todos los días, Hasan compró su desayuno. "Lo encontré normal", dijo. Entró, compró un café y no hizo nada diferente que hiciera presagiar la tragedia, añadió.

"No vamos a especular sobre los motivos del ataque", puntualizó John Rossi, vocero de Fort Hood. Por su parte, desde la Casa Blanca, el presidente Barack Obama pidió ayer a los estadounidenses que no saquen conclusiones apresuradas sobre las razones que motivaron el tiroteo, hasta conocer todos los hechos. "No conocemos todas las respuestas aún", afirmó. Además, comentó que se reunirá con el director del FBI, Robert Mueller, y con otros funcionarios.

Obama asistirá al funeral de las víctimas del tiroteo, aunque hasta el momento no se ha fijado la fecha.

Por su parte, un imán de la mezquita a la que solía acudir Hasan dijo que éste jamás manifestó tendencias extremistas ni deseos de venganza.