La crisis en Europa

Comienzan protestas obreras

Por Flor Beltrán, desde París para SoB
Socialismo o Barbarie, periódico, 09/10/08

Bélgica se vio paralizada el lunes 6 de octubre por una huelga general que sobrepasó a los dirigentes burocráticos, que sólo habían llamado a manifestar. Pero la paralización de las actividades fue la manera elegida por la mayor parte de los colectivos de trabajadores. También pararon escuelas y universidades.

La protesta había sido llamada por las tres principales confederaciones y constituía una especie de “advertencia” al gobierno del malestar por la pérdida de poder adquisitivo. El transporte público fue paralizado al igual que buena parte de la industria, la distribución y los correos. El paro fue total en Bruselas –la capital que también es la sede principal de la Unión Europea– y en las grandes ciudades como Amberes, Gante, Charleroi y Lieja.

Las emisoras públicas de la radio y televisión RTBF se sumaron a la huelga. En los canales, los telediarios son precedidos de un mensaje de apoyo a la movilización. En la región francófona de Valonia, la más pobre de Bélgica, piquetes de manifestantes bloquearon el acceso a las zonas industriales. Los trabajadores de grandes industrias como la automovilística Audi y de tiendas como Carrefour también cruzaron los brazos.

Dentro de un mes, patronal y sindicatos deben negociar un nuevo convenio interprofesional. Los trabajadores exigen la indexación automática de los salarios en función del costo de vida. La patronal se niega. También reclaman al gobierno la reducción del IVA y subsidio a los precios de gasolina y calefacción.

En Francia, los obreros de la fábrica Renault de Sandouville, donde quieren suprimir 1.000 empleos, cesaron el trabajo en la mañana del martes 7, con motivo de la llegada del presidente de la República Nicolas Sarkozy.

Los huelguistas se agruparon en las puertas de esta fábrica. “Sarkozy, estás perdido, los obreros de Renault están en la calle”, gritaban los manifestantes, mientras encendían neumáticos y lanzaban petardos, esperando el arribo de Sarko.

En la concentración, estaban también obreros de la Renault de Cléon, cerca de Ruán, y subcontratistas como Faurecia y Plastic Ómnium. Finalmente Sarkozy anuló la visita, diciendo que no era conveniente ir a una fábrica en huelga.

También maestros y profesores hicieron huelga el martes 7 por “más presupuesto para el 2009, condiciones de trabajo y estudio mejoradas” y otros reclamos. Se enfrentan a una nueva ley sobre el servicio mínimo, que obliga a las alcaldías a garantizar que los alumnos permanezcan en las escuelas para que los padres puedan ir al trabajo. Pero muchos alcaldes se niegan a garantizar eso, porque no tienen personal calificado, no quieren contratarlo.

Son síntomas de que los trabajadores no aceptarán tan fácilmente pagar la crisis del capitalismo financiero.