La crisis en España

A cambio de privilegios para los burócratas sindicales

CCOO y UGT firman la paz social y
la moderación salarial por tres años

Kaos en la Red / Gara 10/02/10

El pacto traslada al sector privado el acuerdo de los empleados públicos: recorte salarial, paz social y pérdida de derechos a cambio de mayores privilegios para la burocracia de CCOO y UGT

1.– CCOO, UGT y CEOE pactan contener los salarios y cambiar la negociación

Los burócratas de CCOO y UGT se dan la mano
con los representantes patronales, después
de esta traición.

Contener los salarios en los próximos tres años, con la posibilidad de posponer el cobro de los incrementos pactados, es una de las cesiones de CCOO y UGT en el acuerdo de negociación colectiva que firmaron ayer con las organizaciones patronales CEOE y Cepyme. El nuevo acuerdo estará vigente durante tres años y recoge subidas salariales de hasta un 1% para 2010, entre el 1% y el 2% para 2011, y entre el 1,5% y el 2,5% para 2012.

Sin embargo, los empresarios podrán dejar de aplicar estas subidas según la situación económica y posponerlas en nuevos plazos.

Para ello, las empresas deberán ponerlo en conocimiento de la Comisión Paritaria o Mixta del Convenio Colectivo, justificando las razones de inestabilidad económica por las que se pretende no aplicarlo y plantear nuevos plazos para recuperar los salarios que se han dejado de pagar.

Por otro lado, el acuerdo tiene el supuesto objetivo de limitar la temporalidad en la contratación, aunque se limita a establecer «la conveniencia» de que los convenios de las empresas o sectores determinen el volumen de contratación temporal y propone la modalidad de contrato a tiempo parcial indefinido como «una alternativa a la contratación temporal».

El texto recuerda que las necesidades permanentes de las empresas se deben atender con contratos indefinidos, y las coyunturales con contratos temporales, relación que hasta ahora no se viene cumpliendo.

Asimismo, puntualiza que los convenios colectivos deben articular instrumentos que permitan equilibrar flexibilidad para las empresas y seguridad para los trabajadores, «teniendo en cuenta que los mecanismos de adaptación internos son preferibles a los externos y a los ajustes de empleo».

Reforma de la negociación

CCOO y UGT llaman a movilizarse contra
el retraso en la edad de jubilación...

...pero en defensa del Pacto de Toledo
y otros acuerdos que ellos firmaron.

Kaos en Red, 12/02/10

Se oponen al retraso "obligatorio" de la edad de jubilación a los 67 años, pero para defender el pacto de Toledo y los acuerdos del 2006 que ellos firmaron. Es decir, retrasar de la edad de jubilación más allá de los 65 años pero en forma "voluntaria", volver a rebajar las pensiones mediante la  ampliación del período de cómputo para calcularlas, seguir bonificando a la patronal por determinado tipo de contratos, profundizar en los planes privados de pensiones (obteniendo jugosos ingresos participando en su gestión).

Hay que lavarse la cara dada la impopularidad de la iniciativa gubernamental, mientras siguen aceptando la inevitabilidad de los recortes y participan de la negociación de nuevos recortes de derechos en jubilación, legislación laboral, pactos sociales contra los salarios por 3 años...

Por otro lado, una cláusula adicional establece un plazo de seis meses para que los agentes sociales se comprometan a reformar las reglas jurídicas que rigen la negociación colectiva, con el fin de que los convenios «sean eficaces para empresas y trabajadores». En ese mismo periodo, las partes negociarán la cuestión de la «flexiseguridad», así como la reforma laboral remitida al diálogo social y las medidas urgentes para el mantenimiento y el fomento del empleo.

Tras la firma del acuerdo, los secretarios generales de UGT y CCOO, Cándido Méndez e Ignacio Fernández Toxo, respectivamente, destacaron la importancia de renovar el actual modelo de negociación colectiva para dotar de mayor flexibilidad interna a las empresas, al tiempo que valoraron la trascendencia de este acuerdo como antesala a la negociación de una reforma laboral.

Toxo abogó por una presencia más activa de los trabajadores en las empresas y pidió al Gobierno el mantenimiento de los estímulos fiscales «en lo que queda de crisis», ya que la retirada «precipitada o su reducción podría tener efectos negativos». Por su parte, Méndez añadió que la negociación colectiva es la herramienta para contrarrestar los efectos de la crisis y valoró que el actual acuerdo tenga como primer objetivo «mantener, recuperar y crear empleo».

El presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, incidió en la importancia del acuerdo «porque transmitirá confianza a las empresas y a los ciudadanos» y añadió que «cumple el objetivo de la moderación salarial en un momento en que las empresas lo están pasando mal». Díaz Ferrán también señaló, respecto a la subida salarial pactada para este año de hasta el 1%, que eso será lo que se recomendará a las empresas y que ese «hasta» es «muy entendible y los negociadores lo interpretarán adecuadamente».

El presidente de la CEOE no quiso explicar en qué elementos había cedido la patronal por considerar que «no era oportuno».

Zapatero: El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, aseguró que el acuerdo sobre negociación «dará estabilidad, seguridad y confianza a las empresas y los trabajadores y ayudará a la recuperación».

LAB califica el acuerdo como un nuevo fraude

LAB afirmó ayer que el acuerdo de negociación alcanzado entre las patronales y CCOO y UGT supone «un nuevo fraude a combatir». La central sindical abertzale recordó que CCOO, UGT, CEOE y Cepyme suscribieron en el año 2002 el primer Acuerdo Interconfederal de Negociación Colectiva y que este pacto se ha ido renovando a excepción del año pasado.

LAB denunció que los sindicatos firmantes dicen aceptar la moderación salarial «a cambio de mantener y recuperar el empleo», pero añadió que «una vez más, se sacrifican las rentas salariales y no hay ningún compromiso para mantener el empleo ni para mejorar la calidad del mismo». Aseguró que ni los salarios ni las condiciones laborales de los trabajadores son las causantes de la crisis, pero «son ellos quienes están pagando las consecuencias de la misma». El sindicato señaló que los anteriores acuerdos también fueron por la vía de la moderación salarial, una estrategia que «no repercute en una mejora de las condiciones laborales». «Es un nuevo fraude que se nos quiere imponer a los trabajadores que vamos a combatir. No admitimos imposiciones de quienes pretenden condicionar la dinámica sindical en la negociación colectiva de Euskal Herria y es por ello que el acuerdo estatal no es una referencia válida para LAB».

Por el contrario, apostó por responder a la ofensiva patronal con un modelo sindical de «confrontación que nos tiene que llevar a mejorar la correlación de fuerzas con la patronal» y a conseguir convenios colectivos «con contenido, que den respuesta a las necesidades de los trabajadores».

2.– Sindicatos y patronal se comprometen a reformar la negociación colectiva en seis meses

El acuerdo recomienda fijar en los convenios "volúmenes de contratación temporal"

El pacto salarial que alcanzaron anoche patronal y sindicatos no sólo se limita a la revisión anual de los sueldos para los próximos tres años. El texto que han firmado esta tarde los líderes de CC OO, UGT, CEOE y Cepyme recoge el compromiso de los agentes sociales a reformar la negociación colectiva en medio año.

Este es uno de los cambios que más se han reclamado en los últimos meses desde diferentes ámbitos y por primera vez figura por escrito en un acuerdo de esta naturaleza. Tanto los partidarios de los cambios en los modelos de contratación (Banco de España y CEOE, entre otros), como los sindicatos reclaman cambios en la negociación colectiva. El objetivo será hacerla más "flexible".

De hecho, en las últimas semanas se han lanzado varias propuestas para llevar a cabo los cambios. Así Ignacio Fernández Toxo, secretario general de CC OO, habló a mitad de enero de eliminar el ámbito provincial de la negociación, lo que la simplificaría al dejarla sólo en dos ámbitos: el sectorial y el de empresa.

Por su parte, es probable que CEOE acuda a esta negociación con una de sus reclamaciones históricas: acabar con el principio de ultraactividad, es decir que los convenios no estén vigentes más allá del periodo para el que se han firmado.

Otro de los puntos sobre la mesa será la fijación de los temas (salarios, organización interna del trabajo...) que se tienen que negociar en cada ámbito.

Además del compromiso de reforma de la negociación colectiva, el acuerdo recomienda, por primera vez, a los negociadores de los convenios que fijen en sus acuerdos "el volumen global de contrataciones temporales".

Vista la facilidad con la que el gran número de contratos temporales ha permitido la destrucción de empleo, los sindicatos han venido reclamando su reducción (ahora el 25% de los asalariados tiene un contrato temporal, pero antes de la crisis llegó al 35%). De hecho, esta fue una de las principales demandas que llevaron a la mesa de negociación.

La redacción de este punto es bastante ambigua, pero en los acuerdos anteriores (el último el de 2008) no se recogía esta posibilidad.

El aspecto más concreto de las 24 páginas del texto es el periodo de vigencia del acuerdo, tres años, y el porcentaje de subida salarial que se recomienda para cada ejercicio. Así, se habla de un aumento "para el año 2010 hasta el 1%; para 2011 entre el 1% y el 2%; y para 2012 entre el 1,5% y el 2,5%". Los sindicatos aceptan de esta forma moderar los salarios durante este trienio, a cambio de "mantener y recuperar el empleo", según la redacción del acuerdo. No obstante, a lo largo del periodo de vigencia del acuerdo hay una cláusula que salvaguarda el poder adquisitivo de los asalariados durante este periodo.

Ante la difícil situación que atraviesan las empresas españolas y sus dificultades de financiación, otro de los consejos del preacuerdo para el empleo y la negociación colectiva 2010, 2011 y 2012 es el de "posibilitar la inaplicación de los incrementos salariales del convenio correspondiente a aquellas empresas cuya estabilidad económica pudiera verse dañada, como consecuencia de tal aplicación". En todo caso, para aplicar las cláusulas de descuelgue, nombre con el que se conoce a esta posibilidad, se tendrá que seguir el camino que muestra el propio convenio y ponerlo en conocimiento de la comisión paritaria de seguimiento del convenio.

3.– Los sindicatos ceden en los salarios a cambio de empleo

"Se puede luchar juntos contra la crisis pese a tener intereses contrapuestos". Así resumió ayer el secretario general de UGT, Cándido Méndez, el éxito ejemplarizante del pacto de negociación colectiva que patronal y sindicatos han cerrado para los próximos tres años, que firmaron ayer.

El acuerdo pone fin a casi dos años de desencuentro entre empresas y trabajadores, que no había logrado acordar un marco de entendimiento desde diciembre de 2007, cuando se firmó el convenio que estuvo en vigor durante el ejercicio 2008. Aunque el elemento más llamativo, e inicialmente más controvertido, de la negociación fue la subida salarial, los agentes sociales finalmente han "arrimado el hombro", en palabras de Méndez, y han optado por canjear casi dos años de subidas salariales reales por el mantenimiento del empleo.

La redacción del acuerdo deja bien a las claras que la subida salarial de este año puede ser de "hasta un 1%", un techo que permite a los comités de empresa negociar las alzas salariales entre el 0% y el 1%. Desde CCOO creen que la referencia tenderá a ser del 1%, pero eso dependerá de lo que negocien las partes.

Con todo, aunque la subida pactada fuera del 1%, eso supone que en la práctica los salarios se congelarían, ya que el consenso de expertos pronostica que los precios subirán este año el 1,3%. El esfuerzo de los trabajadores se prolongará también en 2011, ya que la banda de alzas salariales en la que tendrán que negociar estará entre el 1% y el 2%, precisamente la misma horquilla sobre la que se moverán los precios en 2011.

Con los términos del acuerdo, 2012 será el primer año en el que se ganará algo de poder adquisitivo, ya que la subida salarial puede llegar a ser de hasta el 2,5%. En cualquier caso, si en los tres primeros años de vigencia del convenio la inflación acumulada es superior a las alzas salariales, los negociadores tienen la potestad de fijar una cláusula de salvaguarda que lleve a recuperar todo el poder adquisitivo perdido durante los tres años y que se compensará en las nóminas de 2013.

El esfuerzo por la moderación salarial se compensa con la recomendación de que los negociadores incluyan cláusulas específicas para mantener o mejorar el empleo. Tanto es así que el acuerdo se denomina Para el empleo y la negociación colectiva, y cada uno de sus capítulos supedita las relaciones laborales entre empresa y trabajadores a lograr el objetivo de conservar puestos de trabajo. También, en una vuelta de tuerca más, se han acordado medidas para reducir la temporalidad en las empresas, un objetivo que aparecía marcado en la agenda del Gobierno para la reforma laboral, pero que sindicatos y patronal han preferido cerrar de antemano ya que, en opinión de Fernando Lezcano, secretario de comunicación de CCOO, "es más eficaz".

Límites a la temporalidad

De esta forma, el acuerdo fija el marco de las relaciones laborales los próximos tres años sobre cuatro pilares: empleo, reducción de la temporalidad, flexibilidad y formación. Los sindicatos y la patronal solicitaron ayer a los líderes de sus federaciones y uniones territoriales que introduzcan medidas destinadas a "promocionar la contratación indefinida, la transformación de contratos temporales en fijos y el mantenimiento del empleo".

Además, los empresarios se comprometen a adoptar fórmulas que eviten el encadenamiento de contratos temporales y piden fomentar el uso de las fórmulas contractuales existentes, como la modalidad de fijo–discontinuo o los contratos de formación en lugar de los modelos de duración determinada.

También hay compromisos de formación de la plantilla y de flexibilidad interna, una petición especialmente demandada por los sindicatos para mejorar los horarios y ganar poder en la organización del tiempo de trabajo.

4.– La patronal CEOE quiere una reforma laboral profunda a cambio del pacto salarial

La patronal lo tiene claro: el acuerdo con los sindicatos respalda su exigencia al Gobierno de negociar "una reforma laboral importante" y demuestra a toda la sociedad que "junto a CCOO y UGT es capaz de arrimar el hombro" para sacar a España de la crisis.

Así se expresó ayer el presidente de CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, por la mañana, dentro de los órganos de dirección de la confederación empresarial y, por la tarde, en rueda de prensa junto al presidente de Cepyme, Jesús Bárcenas, y los secretarios generales de UGT, Cándido Méndez, y de CCOO, Ignacio Fernández Toxo.

Los cuatro coincidieron en intentar enviar al Gobierno, por lo mal que lo está pasando, y a la sociedad, “un mensaje de confianza en las posibilidades de sacar la economía adelante”.

Sin embargo, en CEOE Díaz Ferrán defendió el acuerdo con los sindicatos, apoyándose en la tesis de Santiago Herrero, presidente de la Comisión de Relaciones Laborales, con la idea de que el acuerdo salarial para el trienio 2010–2012 es una demostración de que los empresarios pueden entenderse con las centrales en los temas que les son propios. Por lo tanto, responden así a la concepción que puedan tener el Gobierno y una parte de la sociedad de que los empresarios sólo piensan en el despido y en reducir los salarios.

Cesiones de CEOE

Quizás, por esta razón, Díaz Ferrán no quiso especificar por la tarde “en qué aspectos podía haber cedido CEOE” para llegar a un acuerdo con los sindicatos. “No me parece oportuno responder a esa pregunta. Lo importante es que hemos llegado a un acuerdo [con CCOO y UGT] y no lo que hemos dejado atrás”. Jesús Bárcenas, presidente de la pequeña y mediana empresa, terció en la cuestión y explicó que “probablemente el acuerdo no satisface plenamente ni a empresarios ni a sindicatos, porque todos hemos dejado algo en el camino para llegar al consenso”.

Las interpelaciones al acuerdo en la patronal se produjeron en la Comisión de Relaciones Laborales, que es donde están los expertos. Algunos protestaron porque, si bien el acuerdo fija un incremento salarial del 1% para 2010, para los dos próximos ejercicios traza sendas horquillas, de entre el 1% y el 2%, para 2011, y de entre el 1,5% y el 2,5%, para 2012.

No sin razón, algunos miembros de la citada Comisión recordaron que los sindicatos fijan siempre su objetivo salarial en las cifras más altas de las horquillas. Otra protesta patronal es que el acuerdo establece que la revisión salarial al final del trienio tendrá en cuenta la inflación real, aunque matiza que la recuperación del poder adquisitivo, si procediese, “se adecuará temporalmente en función de lo que se pacte”.

Ante estas quejas, Herrero, negociador del pacto con los sindicatos, recordó que el acuerdo respeta “la autonomía de las partes para que cada cual se entienda con los sindicatos en función de la situación de la empresa o el sector”. Precisamente, el acuerdo recomienda a los convenios la limitación salarial, pero también de los beneficios, para destinarlos a la reinversión.

Un acuerdo para doce millones de trabajadores en más de 5.000 convenios

– ¿En qué consiste el pacto?

Son las directrices que pretenden marcar la patronal y los sindicatos para la negociación en los más de cinco mil convenios que se discuten cada año en España.

– ¿Qué tipo de cuestiones aborda?

Entre otras, las referencias para fijar el incremento salarial; la posibilidad de que las empresas en dificultades puedan incumplir la subida; la política de contratación; la formación y clasificación profesional o la organización de la jornada y el tiempo de trabajo.

– ¿Cuántos trabajadores están cubiertos por los convenios?

Alrededor de doce millones de trabajadores por cuenta ajena. Su cobertura se distingue entre los convenios sectoriales de ámbito nacional; los de comunidad autónoma; los provinciales y de empresa. Ésta es una de las razones del enésimo compromiso de la patronal y los sindicatos para reformar la negociación colectiva en seis meses.

– ¿Cuál es el grado de cumplimiento de las directrices de la patronal _y de los sindicatos?

No todo el mundo en los sectores y empresas cumple a rajatabla las directrices de la patronal y de los sindicatos. Durante los años de crecimiento era la inflación la que marcaba la evolución de los salarios. Y, en consecuencia, con un crecimiento de los precios relativamente alto, la aplicación de la cláusula de revisión hacía que las ganancias de los trabajadores pudiesen terminar el año con un incremento medio superior a la inflación real en un punto o dos puntos.

– ¿Cuáles son las novedades específicas del acuerdo de este año?

Varias e importantes. En primer lugar, que con el pacto la patronal y los sindicatos retoman los acuerdos interconfederales para la negociación colectiva que se interrumpieron el año pasado por la falta de acuerdo sobre la referencia salarial. En segundo lugar, que, por primera vez en estos acuerdos, CEOE, CCOO y UGT fijan cifras concretas en los incrementos retributivos. En tercer lugar que, debido a la recesión, la revisión de los salarios se hace al final del trienio 2010–2012.

– ¿Cómo ve el Banco de España la reforma laboral que plantea el Gobierno?

Más allá del pacto salarial, José Luis Malo de Molina, director del Servicios de Estudios, dijo ayer que hubiera preferido “una reforma fuerte ante la actual recesión”


Comunicado unitario

4,5 millones de parados, jubilación a los 67 años,
bajada de salarios, despido barato

¡Hay que pararles los pies!

Kaos en la Red, 13/02/10

Llamamos a unir todas las fuerzas para hacer frente e al plan del Gobierno y la patronal y echar abajo sus reformas preparando las condiciones para una huelga general

Hemos pasado de la promesa del pleno empleo en las últimas elecciones, y de “lo peor ya pasó” y de “los brotes verdes” a los anuncios de prolongar la edad de jubilación a los 67 años, ampliar el periodo de cálculo de las pensiones, recortar en 50.000 millones de euros el gasto público y comenzar a negociar una nueva reforma laboral que, en medio de muchas imprecisiones aún, preanuncia, entre otros el abaratamiento del despido y la bajada general de salarios.

Hablan de “Diálogo” y “paz social” mientras descargan un auténtico paquete de medidas de guerra contra los trabajadores (bajas salariales, reforma de las pensiones, reforma laboral, privatización de los servicios públicos, subida del IVA...). ¿Por qué este giro?, porque con 4,5 millones de parados/as (según la EPA) y un déficit público del 11,4%, había, dice el Gobierno, que “mandar señales a los mercados financieros” y evitar así el camino de Grecia y el fantasma de la suspensión de pagos.

Son las medidas propias de un Gobierno de los banqueros y la patronal, por eso las medidas son aplaudidas por el Fondo Monetario Internacional, la CEOE y los Emilio Botín y compañía, que instan al Gobierno a “aplicarlas ya”.

No a la jubilación a los 67 años porque es una vergüenza para los mayores, un revés a los parados y un portazo a los jóvenes

Si hay 4,5 millones de parados, si el 40% de los jóvenes está en paro y resulta una quimera encontrar empleo cumplidos los 50 años ¿Qué sentido tiene prolongar la edad de jubilación? Debería ser al revés, reducir la edad de jubilación a 60 años para dar el merecido descanso a los que llevan toda una vida trabajando, para que esos puestos los ocupen trabajadores desempleados, y para abrir paso a los/as jóvenes.

La medida anunciada por el Gobierno sólo se explica porque está pensada para los “inversionistas”, para favorecer el gran negocio de las pensiones privadas a costa de empobrecer a la gran mayoría.

En medio del rechazo social a la medida, el Gobierno y la patronal alegan que ya hay cerca de 9 millones de pensionistas, que llegarán a 10,1 millones en el 2020 y de seguir así no habrá dinero para pagar las pensiones. Ese argumento solo es creíble bajo la lógica capitalista de hacer de todo un negocio, incluidas las necesidades humanas más elementales. Fuera de esa lógica capitalista ¿por qué no va a ver dinero para las pensiones?

Hasta 1995, fecha de los Pactos de Toledo, que suscriben la totalidad de los Grupos Parlamentarios, con las llamadas cotizaciones sociales se venía financiando no solo las Pensiones, sino también la Sanidad Pública. Este Pacto supone una importante modificación en las cuentas del Sistema Público de Pensiones, que pasa a registrar unos importantes superávit, que permitió en su momento al Gobierno del PP una sustancial rebaja de las cotizaciones que fueron directamente a incrementar los beneficios empresariales y que inició el camino de convertir las pensiones en un negocio vía los fondos privados de pensiones a los que además se les hicieron fuertes deducciones fiscales y se convirtieron así en uno de los instrumentos de la inversión especulativa que nos ha llevado a donde estamos ahora.

Para los banqueros, los militares, la Iglesia, la casa Real… ¿sí hay dinero? ¿ y para las pensiones no?: la jubilación es un derecho y el Sistema Público de Pensiones tiene plena viabilidad económica, ahora y en el futuro y esta Reforma es un ataque ideológico, innecesario económicamente, para favorecer al capital financiero y que de ninguna manera debe acabar derivando en una nueva rebaja de las llamadas cotizaciones sociales.

No a la reforma laboral del abaratamiento del despido y la bajada de salarios

En medio del descontento social generado por el anuncio de la reforma de las pensiones y buscando la complicidad de los llamados “agentes sociales”, el gobierno Zapatero anunció las propuestas para la nueva reforma laboral. La CEOE ha declarado que el documento “va en la buena dirección” y los dirigentes de CCOO y UGT se han mostrado satisfechos porque es “flexible y discutible”.

El Gobierno justifica las propuestas en nombre de la “creación de empleo” mientras declara una y otra vez que “no habrá pérdida de derechos” que “no se reducen las indemnizaciones por despido”.

Pero una vez más faltan a la verdad para intentar esconder los verdaderos objetivos de esta reforma: la bajada general de salarios, el abaratamiento del despido y acentuar la precarización laboral.

Dicen que la reforma se hace para crear empleo, pero nadie encontrará en el texto presentado un solo indicio de cuántos, cuándo y en dónde se van a crear puestos de trabajo. Peor aún, el recorte del gasto público tiene como una de sus primeras consecuencias la reducción del empleo público.

Hablan de crear empleo cuando van a amortizar los puestos de trabajo que van quedando vacantes en la administración pública.

Cada vez que hablan de reformar las leyes para crear empleo… ¡comienzan por los despidos! Su propuesta de incentivar el “contrato de fomento de la contratación indefinida” que rebaja la indemnización a 33 días por año, ¿qué es sino una forma de encubrir el abaratamiento de los despidos? Peor aún, el texto apunta la necesidad de reconducir el despido para hacer mayor uso de las “causas objetivas” lo que facilita los despidos y reduce la indemnización a 20 días por año trabajado.

Otra de las medidas pretende “incentivar” el contrato a tiempo parcial en dos modalidades: con fijación de horario y con flexibilidad en la organización de la jornada. Reducir la jornada de trabajo reduciendo el salario ¿qué es sino una reducción general de los salarios? En un país que no llegamos ni a mileuristas ¿quién va a vivir con salarios de 450 ó 500 euros? Y además, pretenden que la jornada quede a libre disposición del empresario para “adaptarla a las variaciones del proceso productivo”.

¡Quieren más precariedad!

Reducir la jornada es la medida clave para repartir el trabajo y combatir así el desempleo, esa es una bandera por la que venimos abogando durante años desde el sindicalismo de clase. Pero nosotros decimos: sin reducción del salario. Con nuestra propuesta se reparte el trabajo y la crisis recae en los verdaderos responsables, los capitalistas. Con la propuesta del Gobierno no se combate el paro ni se reparte el trabajo, se reducen a la mitad los salarios y se reparte la miseria.

Quieren, entre otras cosas, abrir sectores como la construcción, la administración pública o la sanidad a las ETTs convirtiéndolas además en “entidades colaboradoras” de los Servicios Públicos de Empleo. El Gobierno también quiere entregar a las Mutuas patronales el control de las bajas por enfermedad, que tratan como “absentismo laboral”.

Estamos pues muy lejos de una Reforma suave. Por eso opinamos que los dirigentes de CCOO y UGT no tienen derecho alguno a negociar este nuevo latrocinio, máxime cuando esta reforma se da mientras se propone la subida de la edad de jubilación a los 67 años.

Toxo y Méndez, por el contrario, han remarcado que quieren “separar” la negociación de la reforma laboral de la de las pensiones, como si no estuvieran estrechamente relacionadas, como si no formaran parte de un mismo paquetazo contra los trabajadores. Gobierno y patronal hablan de paz social pero nos han declarado la guerra a los trabajadores, esa es su receta para “salir de la crisis”. Las organizaciones abajo firmantes estamos convencidos de que el descontento social va en aumento y que los trabajadores podemos echar atrás ambas reformas y abrir un escenario de lucha por verdaderas medidas contra el paro y la crisis.

Por eso llamamos desde aquí a todos los trabajadores/as, a los Comités de Empresa y las Secciones sindicales, a las organizaciones sociales y políticas de la clase obrera, a unir todas las fuerzas para hacer frente unitariamente al plan del Gobierno y la patronal y echar abajo sus reformas preparando las condiciones para una huelga general.

Súmate/os al movimiento para pararles los pies con una gran movilización, enviando un correo a: csm@nodo50.org

Primeros Firmantes: Centro Social La Traba; Coordinadora Sindical de Madrid (CSM): Alternativa Sindical de Trabajadores. (AST) (Telefónica), Sindicato Autónomo de Trabajadores Casa de la Moneda Nueva Plataforma (SATNP), Sindicato Unitario (SU), Comisión de Trabajadores Asamblearios (CTA) (Iberia) y Plataforma Sindical (PS) (EMT), Colectivo Obrero Popular de Roca (COP), Sindicato Unificado Independiente de Trabajadores del Hotel Meliá Castilla (SUIT) y Plataforma Sindical Independiente de Blas&cia, S.A. (PSI); Comisiones de Base (CoBas); Comité de Empresa de UPS de Vallecas; Corriente Roja; Partido Comunista de los Pueblos de España (PCPE); Partido de los Trabajadores de España (PTE); Sindicato Asambleario de la Sanidad (SAS); Solidaridad Obrera (SO); Unión Proletaria.