Grecia

La huelga general paraliza Grecia

Los dos sindicatos convocantes cifran
el seguimiento en un 80%

Decenas de miles de personas manifestaron en
Atenas y otras ciudades

Por M. A. Sánchez–Vallejo
El País, 25/02/10

La primera huelga general conjunta de los dos principales sindicatos griegos, que representan a la mitad de los cinco millones de trabajadores del país, se convirtió ayer en un barómetro del apoyo real que el Gobierno socialista de Yorgos Papandreu tiene entre la ciudadanía a la hora de acometer el plan anticrisis para recortar el déficit (12,7% del PIB) y la deuda pública (300.000 millones de euros).

A falta de datos oficiales –los sindicatos convocantes hablan del 80%–, el seguimiento del paro fue masivo en bancos, colegios, institutos y universidades; oficinas de la Administración y en el transporte colectivo, que incumplió algunos servicios mínimos. Se cancelaron también losferrys entre islas y los vuelos domésticos e internacionales, lo que supuso el cierre del espacio aéreo del país. La actividad de los establecimientos comerciales fue irregular. Sólo la Bolsa de Atenas funcionó con normalidad, al contrario que la Acrópolis y el resto de monumentos arqueológicos del país, que cerraron.

Sin embargo, la asistencia a la manifestación convocada en la capital griega por los dos sindicatos convocantes, la Confederación General de Trabajadores Griegos (GSEE, sector privado) y Adedy (funcionarios) –ambos afines al gubernamental Movimiento Socialista Panhelénico (Pasok)–, fue escasa. Unas 20.000 personas según fuentes policiales –el doble, según los sindicatos convocantes–, sin contar unos centenares que siguieron la marcha del sindicato comunista Pame. Salónica, la segunda ciudad griega, fue también escenario de movilizaciones callejeras.

Al término de la concentración de Atenas, ante el edificio del Parlamento, se produjeron incidentes aislados entre unos 50 encapuchados armados con piedras y artefactos explosivos de fabricación casera y la policía antidisturbios, que respondió con cargas y botes de humo.

La crisis, que la paguen los ricos

"La crisis, que la paguen los ricos" y "El pueblo es más importante que los mercados" fueron las consignas más repetidas por los manifestantes. "Los trabajadores públicos se han convertido en chivos expiatorios a los que se acusa del déficit de dos dígitos de Grecia y de la deuda pública", señaló Spyros Papaspyros, secretario general de Adedy, el sindicato de funcionarios que ya convocó su propia huelga general el pasado 10 de febrero.

"Las acciones de protesta de los trabajadores continuarán durante el mes de marzo", añadió Papaspyros, sin descartar más movilizaciones en primavera. Por su parte, Gianis Panagopulos, secretario general del GSEE, afirmó que "Europa tiene los ojos puestos en nosotros, hoy nos estamos manifestando por la esperanza y el futuro... para que se cancelen las medidas [de austeridad del Gobierno]. Los griegos sabemos que la situación económica es insostenible, pero estas medidas no son de recibo".

A la ausencia de datos oficiales se sumó la falta de información sobre la jornada de huelga. La poderosa Unión de Editores de Prensa Diaria de Atenas secundó la convocatoria y las ediciones digitales de los periódicos y las agencias de noticias no suministraron ninguna información en 24 horas; tampoco emitieron informativos las televisiones y las radios.

La huelga general de ayer, la segunda que se produce en dos semanas, coincidió con la presencia en Atenas del equipo de técnicos de la Comisión Europea, el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), que desde el martes realizan una inspección preliminar del estado de las cuentas públicas griegas antes del primer examen formal de las mismas, el próximo 16 de marzo.

En el ambiente flotaba también el globo sonda lanzado la víspera por el vicepresidente del Gobierno, Teodoros Pangalos, que el martes adelantó que el empleo fijo para toda la vida en el sector público tiene los días contados.

Mientras tanto, el gubernamental Pasok y el principal partido de la oposición, Nueva Democracia (ND, centro–derecha), se han enzarzado en una pelea parlamentaria sobre a quién atribuir la responsabilidad en la falsificación de las estadísticas griegas.

A instancias del Gobierno, que el martes presentó una proposición no de ley para crear un comité de investigación griego –al margen del europeo– encargado de determinar quién falseó los datos (especialmente el déficit y la deuda pública), las pesquisas se centrarán sólo en el periodo comprendido entre los años 2004 y 2009, es decir, el correspondiente al anterior Gobierno de ND. Este partido, que no se opone a la formación del comité de investigación, pretende sin embargo que el análisis se retrotraiga a 1981, año en que el Pasok llegó por primera vez al poder.

El martes, con cuatro días de retraso, el Gobierno de Atenas respondió a la demanda de aclaraciones de la Comisión Europea sobre el uso de instrumentos financieros –en concreto, permutas de divisas– con la ayuda de bancos de inversión para maquillar su nivel real de deuda pública.


La sociedad griega se paraliza contra el plan de austeridad

Jornada de protesta contra los recortes anunciados
en sueldos y pensiones

Agencia EFE, 24/02/10

Atenas.– Grecia afronta hoy una huelga general convocada por las grandes centrales sindicales contra los profundos recortes anunciados por el Gobierno del socialista Yorgos Papandreu para sacar al país de una grave crisis financiera y reducir el déficit. Tras elparo de los funcionarios de hace dos semana, hoy son todos los trabajadores los que están llamados a la huelga.

En total, más de dos millones de trabajadores adscritos a la Confederación General de Trabajadores de Grecia (GSEE), la Unión de Funcionarios Civiles (ADEDY) y a la organización sindical comunista (PAME). Sin servicio en los puertos, vitales para las conexiones con las islas, ni en los aeropuertos y con los ferrocarriles en servicios mínimos, solo funcionarán los autobuses en las grandes ciudades de la República helena para facilitar la participación en las manifestaciones organizadas por los sindicatos, que confían en que sean masivas pese a que la Policía ya ha bloqueado los accesos a la capital desde la madrugada, donde se concentra el 50% de la población.

También las oficinas estatales, los bancos, los colegios y hospitales, mantienen cerradas hoy sus puertas y se espera que la actividad en el país se mantenga paralizada hasta mañana. Incluso está cerrado el espacio aéreo, por lo que se han cancelado unos 400 vuelos previstos para hoy, y sólo se abrirá para los casos de emergencia y para las operaciones de Estado. Los periodistas y los técnicos de la televisión participan en la huelga, lo que supone un apagón informativo de 24 horas.

Bruselas ha impuesto a Grecia un severo plan de ajuste, cuyo cumplimiento vigilará rigurosamente, para que reducir el déficit público, actualmente en el 12% del PIB, a razón de cuatro puntos porcentuales al año. Para lograrlo, el Gobierno ha anunciado recortes en los sueldos de los funcionarios –congelación salarial y reducción de las primas, muy generalizadas–, el aumento de la edad de jubilación, subida de impuestos y un fuerte tijeretazo en el gasto público.

Asimismo, una delegación de observadores de la Comisión Europea, del Fondo Monetario Internacional y del Banco Central Europeo revisan desde el martes la puesta en práctica de las medidas acordadas con el Ejecutivo comunitario para superar la crisis. Mientras, la agencia internacional de calificación de riesgo Fitch bajó ayer, por segunda vez desde principios de diciembre pasado, la califiación de los cuatro mayores bancos comerciales de Grecia.

"Son los ricos los que nos trajeron hasta el borde de la bancarrota y son ellos lo que tienen que pagar", ha comentado esta mañana Elefterios Fotopulos, trabajador de una imprenta, mientras esperaba en un barrio ateniense a que los autobuses volvieran a circular tras un paro de varias horas, para poder asistir a una manifestación. Precisamente, el Gobierno también ha anunciado aumentos de impuestos para los productos de lujo.


La UE y el BCE exigen más ajustes a Grecia mientras se agrava su recesión

El Gobierno de Papandreu "debe hacer todo
lo necesario" para reducir el déficit

Por Andreu Missé
El País, 13/02/10

Bruselas.–  Altos responsables de la Comisión Europea, Eurogrupo y Banco Central Europeo (BCE) exigieron ayer a las autoridades griegas que adopten medidas adicionales para sanear sus finanzas y ganar la confianza de los mercados. Estas peticiones de austeridad coincidieron con la publicación de las cifras de evolución del producto interior bruto (PIB) por parte de Eurostat que revelaron que la economía griega se contrajo el 0,8% durante el cuarto trimestre, lo que significó un deterioro muy superior al previsto y que se distancia de la media de la Unión a pesar de que ésta registró un crecimiento muy débil, sólo un 0,1%.

Para el conjunto del pasado año, la caída de la actividad económica griega se situó en torno al 2%, aumentando las dificultades del Gobierno para resolver la crisis de la deuda pública. La contracción de la economía implicará una menor recaudación de impuestos de la prevista y requerirá mayores esfuerzos para reducir el déficit. El Gobierno socialista griego de George Papandreu se ha comprometido a reducir el déficit público en cuatro puntos este año para pasar desde 12,7% al 8,7%.

En medio de esta coyuntura de dificultades financieras y económicas y con una oleada de protestas sociales contra las medidas de austeridad, Jürgen Stark, miembro del directorio del Banco Central Europeo (BCE), insistió ayer en que Grecia debe tomar nuevas medidas. En una entrevista a Der Spiegel, el economista jefe del BCE precisó que "el Gobierno griego debe poner orden en su propia casa". Stark, representante del ala más dogmática de la entidad, señaló que "las medidas adoptadas hasta ahora son el mínimo absoluto que deben ponerse en práctica ahora, pero que harán falta más, dado el claro deterioro de la situación".

Stark rechazó tanto la idea de ayudas bilaterales a través de préstamos o avales por parte de determinados Estados, como la de una transferencia de recursos de Alemania a Grecia. En su opinión estas medidas serían "contraproducentes o muy difíciles de conciliar con los principios de la unión monetaria". La canciller Angela Merkel se ha amparado en un dictamen del Tribunal Constitucional alemán para justificar las dificultades de conceder ayudas financieras a Grecia. En el mismo sentido, Stark expresó su rechazo al lanzamiento de una emisión de obligaciones europeas en beneficio de Grecia que, a su juicio, "no resolvería los problemas estructurales del país".

Los líderes europeos se comprometieron el pasado jueves a ayudar a Grecia aunque no precisaron ningún instrumento financiero concreto. La fórmula empleada para expresar la solidaridad de la UE con Grecia se centró en un "acuerdo político" que establece que "los Estados miembros de la zona euro tomarán las medidas determinadas y coordinadas, si fuera necesario, para preservar la estabilidad financiera de la zona euro en su conjunto".

En una dirección parecida se expresó el nuevo comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, el finlandés Olli Rehn. En la primera intervención ante la crisis griega, el comisario pidió al Gobierno griego, a través de un comunicado, "que haga todo lo que sea necesario, incluyendo la adopción de medidas adicionales, para garantizar que se alcancen los ambiciosos objetivos fijados en la actualización del programa de estabilidad, especialmente la reducción del déficit público en cuatro puntos porcentuales para 2010".

El Ejecutivo comunitario presentará su primer análisis sobre la valoración del ajuste efectuado por el Gobierno griego el próximo marzo, y a la vista de los resultados "propondrá medidas adicionales si es necesario".

Según el comisario, la lección que se debe sacar de la crisis griega es que "necesitamos urgentemente una vigilancia de las políticas económicas más profunda y más amplia, incluyendo la detección temprana y corrección de los desequilibrios para mejorar la protección de la estabilidad financiera de la zona euro".

Grecia ha adoptado ya un durísimo plan de austeridad, parte del cual está todavía pendiente de su aprobación por el Parlamento. En el campo del gasto, se propone entre otras medidas reducir la factura global que representan los salarios públicos, la disminución de los gastos hospitalarios y militares, estos últimos muy por encima de la media comunitaria, a consecuencia del contencioso con Turquía por Chipre. En el campo de los ingresos se prevé un aumento de la progresividad de los impuestos, aumento de los gravámenes en el tabaco y alcohol, eliminación de las exenciones fiscales y reforma de la fiscalidad de los inmuebles.

También expresó la conveniencia de que las autoridades griegas adopten "medidas adicionales" el presidente del Eurogrupo, Jean–Claude Juncker. El primer ministro luxemburgués manifestó al diario Libération la necesidad de ganar "credibilidad". "El plan griego", dijo, "debe aparecer como creíble. Si los mercados cuestionan la credibilidad de la gestión griega, deberán tomarse medidas adicionales". Juncker advirtió de todas maneras que los mercados "se equivocan" si "especulan" sobre la posibilidad de "una ausencia de reacción de la zona euro".


Papandreu se compromete en París a
cumplir el plan de austeridad

Por Antonio Jiménez Barca
El País, 11/02/10

París.– Tras una reunión en el Elíseo con Nicolas Sarkozy, el primer ministro griego Giorgos Papandreu aseguró ayer que su Gobierno tomará "todas las medidas necesarias" para reducir su explosivo déficit. Papandreu, después de comer con el presidente de la República Francesa hizo una breve declaración ante los periodistas con un solo mensaje: Grecia se compromete a adoptar todas las cláusulas de su estricto plan de austeridad a fin de garantizar el adelgazamiento de la deuda.

"Estamos preparados a adoptar las medidas necesarias para conseguir nuestro objetivo: reducir nuestro déficit en cuatro puntos a lo largo de 2010 y dejarlo en el 8,7%". Bruselas ya ha advertido que controlará cada tres meses la marcha y la efectividad del citado plan de austeridad emprendido por Atenas. "Lo digo claramente", continuó Papandreu. "Hemos presentado un plan de austeridad y de crecimiento a la Comisión Europea, que lo ha aprobado y estamos decididos a cumplirlo hasta en cada detalle".

Papandreu hacía esta advertencia el mismo día que los funcionarios públicos griegos se movilizaban, precisamente, para oponerse a este plan de austeridad. En la entrevista que Sarkozy mantuvo con Papandreu, éste le presentó, "de manera profunda", todas las medidas previstas para enjugar el déficit de Grecia, según explicó el Elíseo en un comunicado. También hablaron "de manera constructiva" sobre el orden del día de la cumbre europea que se celebra hoy, y donde se detallará, previsiblemente, el plan de rescate europeo a la maltrecha economía griega. Antes de hablar con Sarkozy, el primer ministro griego había charlado ya con la canciller alemana Angela Merkel por teléfono. Y después, tenía previsto hablar, también por teléfono, con el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy.

A lo largo del día, Francia fue adquiriendo protagonismo en cuanto a la ayuda europea a Grecia, cuyo papel estelar parecía reservado el lunes exclusivamente a Alemania. Al término del Consejo de Ministros celebrado ayer, el portavoz del Gobierno francés, Luc Chatel, anunció que hoy, en Bruselas, a lo largo de la cumbre, Nicolas Sarkozy y Angela Merkel celebrarán una rueda de prensa conjunta sobre este asunto.

Horas más tarde, el diario Le Monde revelaba, citando una fuente cercana a la presidencia de la República, que Francia y Alemania presentarán, antes del Consejo Europeo, sus medidas concretas para evitar un colapso financiero en Grecia. "París prefiere una acción común del eje franco–alemán antes de un conjunto de iniciativas bilaterales", añadió esa misma fuente, que concluyó: "La idea es que exista un fuerte compromiso franco–alemán, lo que no impide que haya después decisiones tomadas entre los Veintisiete. El problema es que, entre los Veintisiete, hay países como Portugal y España que están afectados. Lo que sería curioso es que esos países financiaran el plan de ayuda de Grecia".

El secretario de Estado francés para Asuntos Europeos, Pierre Lellouche, ya lo había advertido ayer por la mañana: "Hay una responsabilidad de Alemania y Francia en que Europa se reafirme. No hablo de dominar, pero cuando hay algo que no funciona, todos se vuelven hacia Francia y Alemania".