Estado español

Zapatero anuncia unos presupuestos "restrictivos y austeros" para el año que viene

Informa de una "reforma en profundidad" de
las políticas de empleo

Por Pilar Santos
Desde Madrid
El Periódico, 30/07/10

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha anunciado que los presupuestos del año que viene 2011 serán "restrictivos y austeros", al tiempo que ha reafirmado el objetivo de reducción del déficit público al 6% del PIB en el 2011 y un 3% en el 2013. "Los compromisos para reducir el déficit con el objetivo de un 6% en el 2011 y un 3% en el 2013 están respetándose", ha dicho el dirigente en una rueda de prensa para hacer balance de la acción de su Gobierno durante el primer semestre del 2010, que ha calificado de "difícil".

El dirigente ha avanzado que el Ejecutivo acometerá una "reforma en profundidad" de las políticas activas de empleo, porque los servicios públicos de colocación, ha admitido, "están lejos de lo que deseamos como país". En este sentido, ha informado de que el Consejo extraordinario de Ministros del próximo 20 de agosto aprobará la prórroga de la ayuda de 426 euros para los parados que han agotado la cobertura por desempleo.

La estabilidad del mercado laboral

Zapatero ha subrayado que, gracias a medidas como esta, la tasa de cobertura por desempleo en España está en el 80%, "la más alta de nuestra historia", y también ha recordado que la prestación de 426 euros a dado apoyo a 570.000 personas sin empleo. Ha explicado que la reforma de las políticas activas de empleo es necesaria para "mejorar la capacidad de casar las demandas y las ofertas de empleo" y asegurar que los trabajadores, y en especial los parados, reciben la formación y se capacitan para participar del nuevo modelo productivo.

El jefe del Ejecutivo ha asegurado que defenderá "donde haga falta" que la reforma laboral que aprobó ayer el Congreso "evitará despidos" y aumentará la estabilidad en el empleo. Asimismo, ha asegurado que clarificar las causas económicas que permiten el despido objetivo dará seguridad jurídica y favorecerá la contratación, y ha defendido la enmienda aprobada ayer con dichas causas.

El dirigente ha hecho balance de la lucha antiterrorista y ha asegurado que el proceso de paz y de diálogo con ETA, que acabó con el atentado de Barajas, "aceleró" las condiciones para "ganar la batalla" a la banda terrorista porque la debilitó. Tras garantizar que ETA "sólo tiene un destino", abandonar las armas sin esperar "nada a cambio", ha tachado de "inaceptable" que se intente politizar ahora una política penitenciaria que incluye el acercamiento de presos a cárceles del País Vasco, ya que está dirigida a "acabar" con la banda terrorista dentro de la "escrupulosa legalidad".

La decisión del Parlament

Preguntado sobre el barómetro de verano del Centre d'Estudis d'Opinió (CEO) de la Generalitat que arroja unos malos pronósticos electorales para el PSC, Zapatero ha asegurado que tanto él como el presidente de la Generalitat, José Montilla, se esmerarán "para obtener un amplio respaldo [electoral] en Catalunya". "Siempre hay que tener en cuenta las encuestas, pero nosotros trabajamos para ganar las elecciones y no las encuestas", ha añadido el jefe del Ejecutivo.

El mandatario ha encargado al vicepresidente de Política Territorial, Manuel Chaves, que "intensifique el diálogo" con la Generalitat para "evaluar" los pasos necesarios para el desarrollo del Estatut y para llevar a cabo iniciativas que "permitan un clima de mayor confianza entre las fuerzas políticas y las instituciones catalanas y el conjunto del Estado y el Gobierno español".

Zapatero, ha mostrado su respeto a la decisión del Parlament para prohibir los toros a partir del 2012 y ha instado a no politizar esta decisión, incluso aunque se pueda estar en desacuerdo con ella. "El Gobierno es y será respetuoso con las competencias de las comunidades autónomas", ha dicho. Asimismo, ha avanzado que el Ejecutivo español no dará apoyo a la proposición de ley que presentó ayer el grupo parlamentario del PP en el Congreso porque si no, "llegará un momento en que se politizará todo".

El presidente del Gobierno ha asegurado que "no hay pendiente" una remodelación del Gobierno, y no ha aclarado si volverá a ser o no candidato a la presidencia en el 2012. "No hay nada nuevo", ha proclamado.


Zapatero invita a confiar en el esfuerzo y el sacrificio

Por Pilar Santos
Desde Madrid
El Periódico, 31/07/10

José Luis Rodríguez Zapatero cumplió ayer con el compromiso de hacer balance cada seis meses de su gestión política y compareció ante la prensa. Sin límite de temas ni de tiempo. El presidente del Gobierno habló de toros, del déficit, de ETA, de las cajas, del Estatut y, sobre todo, de las reformas llevadas a cabo en estos meses. Las defendió con ahínco, incluida la laboral, que permite un despido más barato. «Estamos en la dirección adecuada y solo hace falta cumplir, cumplir y cumplir con las reformas», declaró el jefe del Ejecutivo.

Con una actitud relajada, Zapatero dedicó gran parte de su intervención y muchos minutos de sus respuestas a defender la reforma laboral. El líder de los socialistas aseguró que las modificaciones en las reglas de juego «evitarán despidos». «Lo defenderé donde haga falta», añadió.

Lectura de la enmienda

El presidente explicó que la reforma laboral da flexibilidad a las empresas para que, ante situaciones adversas, puedan reducir el salario o la jornada de los trabajadores o bien desvincularse de los convenios antes de llegar al despido. «Estas condiciones no estaban en nuestro reglamento con la claridad necesaria», apuntó. Su empeño en explicar una reforma contestada por los sindicatos, que han convocado una huelga general para el 29 de septiembre, llegó hasta el punto de que leyó la enmienda que incluye las causas económicas del despido objetivo, consensuada entre el PSOE y el PNV, y subrayó que solo permite despedir a las empresas que «no sean viables» y cuyos directivos demuestren que se cumplen los supuestos.

Zapatero dijo que esta crisis ha demostrado que el sistema laboral español «no sabe reaccionar» para adaptarse a las coyunturas negativas, por lo que ha sido necesario emprender dichos cambios legales, aprobados en un tiempo récord gracias a la abstención de CiU y el PNV.

El jefe del Ejecutivo aprovechó la comparecencia ante los medios de comunicación para anunciar que el Gobierno también tiene previsto modificar «en profundidad» las políticas activas de empleo, porque los servicios de colocación «están lejos» de lo que se puede desear como país. Afirmó que quiere convertir en una prioridad el «apoyo directo» a cada desempleado, una labor en la que pretende que concurran el resto de los partidos y, «en la medida que se pueda», las organizaciones sociales.

426 euros para los desempleados

Para reforzar el eslogan que ayer repitió en varias ocasiones –«austeridad, reformas y cohesión social»–, el presidente confirmó que el próximo Consejo de Ministros, que se celebrará el 20 de agosto, aprobará la prórroga de la ayuda de 426 euros para los parados que hayan agotado la cobertura por desempleo.

Zapatero dijo que la reforma laboral se suma a otras «decisivas» como la de las cajas, el plan de ajuste del déficit y la próxima de las pensiones, que ha emprendido en este semestre de «serias dificultades» para España. El tijeretazo aprobado en mayo, el principal recorte en el gasto social de la democracia y que ayer solo citó de pasada, está cumpliendo el objetivo de reducir el déficit, subrayó, una misión a la que se sumarán también los presupuestos generales del Estado para el 2011.

Presupuestos “restrictivos y austeros”

En este sentido, advirtió de que las cuentas para el año que viene serán «restrictivas y austeras», ya que supondrán una reducción media de gasto del 15% por cada ministerio. Ante la pregunta de si teme no obtener los apoyos necesarios para sacarlas adelante, una situación que le podría abocar a la convocatoria de elecciones anticipadas por la presión política, el presidente del Gobierno afirmó que «existen las condiciones» necesarias para que los grupos parlamentarios mantengan una «actitud responsable».

En este sentido, aprovechó para elogiar la «fortaleza» del grupo del PSOE en el Congreso y la capacidad de su portavoz, José Antonio Alonso, de forjar acuerdos. Zapatero defendió la aplicación de la geometría variable, esa táctica para sumar mayorías con el partido que más convenga según el momento. «Eso es hacer país. Ojalá hubiera más partidos que tuvieran esto en su ADN», afirmó.

Durante la hora que estuvo respondiendo las preguntas de la prensa, Zapatero dejó varias sin contestar. Las dos más interesantes, sobre el futuro de su Gabinete y el suyo propio. El jefe del Ejecutivo declaró que no considera que tenga «pendiente» ningún cambio ministerial y apoyó a la vicepresidenta Elena Salgado, quien al frente de Economía está sufriendo de la manera más cruel el desgaste político por la crisis. En cuanto a su futuro, un periodista quiso saber de qué depende que decida presentarse como candidato del PSOE en las elecciones generales que se celebrarán en el 2012. «No se lo voy a decir», respondió.