Costa Rica

 

La situación del movimiento estudiantil

Por Reinaldo Quevedo
El Trabajador Centroamericano Nº 64, mayo de 2007

En el movimiento estudiantil, se puede hablar de un cambio sustancial, desde el momento en que la Coordinadora Estudiantil se disgregó, y pasó a convertirse en una coordinadora intertrotskista; porque justo cuando la debilidad que eso generó comenzó a hacerse manifiesta (a finales del año pasado) y mientras las vacaciones de enero mantenían alejados a los estudiantes de la lucha contra el TLC, se conforma un frente que viene a fungir el mismo papel desmovilizador que el Frente Nacional de Apoyo (FNA), pero en una versión universitaria: el Frente de la Universidad de Costa Rica Contra el TLC.

Y desenvuelve el mismo papel, en cuanto desnuda al movimiento de su carácter combativo, imprimiéndole la solicitud de una renegociación (único y exclusivo interés de las burguesías opositoras). Este Frente, por estar integrado más que todo por profesores y funcionarios administrativos, desempeñó un mejor trabajo de convocatoria dentro del campus universitario para la multitudinaria marcha del 26 de febrero que nuestra propia organización o que la FEUCR.

¡Contra la represión en la Universidad!
¡Solidaridad con los compañeros acusados!

El 28 de abril en el Auditorio de Ciencias Sociales, la Asociación de Estudiantes de Administración Pública organizó un taller sobre «Gobernabilidad Internacional» que impartiría el expresidente Miguel Angel Rodríguez, involucrado en fuertes casos de corrupción en los casos de la Caja-Fishel e ICE-Alcatel. Ante la indignación de que esa figurilla cuya mayor enseñanza es cómo estafar los recursos del pueblo trabajador y los sectores populares, un grupo de 6 activistas

estudiantiles de la Universidad de Costa Rica expresó su molestia gritando consignas contra la corrupción.

En medio de eso, los organizadores los agredieron. La seguridad de la universidad se hizo presente agrediendo a los compañeros con golpes y macanazos y apresando a Jaime Rodríguez y Santiago Villegas. Luego la compañera Maricruz Granados, que fue a averiguar cómo estaban, también fue apresada.

Recientemente, la seguridad de la U ha presentado una acusación hacia las autoridades universitarias contra los tres compañeros, que representaría una suspensión de la U de entre 6 meses a 6 años. Si bien, desde la Juventud Socialista no estamos de acuerdo con las acciones aisladas de las masas, denunciamos los actos de represión que han sufrido los compañeros por parte de los funcionarios universitarios.

Frente a esta acusación llamamos a los activistas, asociaciones y organizaciones estudiantiles, políticas, populares nacionales e internacionales a iniciar una campaña de firmas que denuncie estos hechos y que exija que las autoridades universitarias anulen la acusación y a que el Concejo Universitario se pronuncie de la misma forma.

Envía tu mensaje al correo de la rectora Yamileth González, rectoria@rectoria.ucr.ac.cr y al de la JS, pst_cr@yahoo.es

Esta marcha reflejó un importante nivel de combatividad, pero culminó políticamente llamando al referendo “gracias” a la iniciativa de la más nueva dirección de la oposición al tratado: el Frente Nacional de Apoyo, y a la continuidad que le dio el presidente Óscar Arias.

Para tratar la situación del movimiento estudiantil, y más aún, la de la oposición al TLC a nivel nacional, no se puede pasar por alto el ambiente político en que nos vemos inmersos desde que se conoce que el  referéndum es, lo que en fin de cuentas –y a penas para cuando empezábamos a delinear tácticas más agresivas como los bloqueos y la huelga general- va a decidir el destino económico del país, llevándose consigo, al menos por un tiempo, la oportunidad de trabajar la conciencia de las masas, para aspirar a una sociedad más inclusiva y coherente, la oportunidad de organizarse en pos de una sociedad socialista.

Y es que el referéndum no sólo desplaza la lucha de las calles a las urnas, sino que también la fulmina, y la fulmina en tanto la gente cesa de creer que la solución esté en las calles – pues ¿qué más encantador que la farsa de democracia de este país? – y se queda en sus casas, sin ser advertida, o sin advertir la Agenda de Implementación, que no es sino el TLC sin TLC.

¿No explica lo anterior la poca concurrencia a la marcha del 1 de mayo, que con dificultad y se asemejaba a las primeras marchas contra el TLC ? Y específicamente con los estudiantes, si recordamos la marcha del 8 de mayo del año pasado, cuando Arias asumió el poder, que era prácticamente una marcha estudiantil, y consideramos nuestra presencia en la marcha del 1 de mayo (escasa como la de todos los sectores) y nuestra falta de iniciativa por fomentar una para el 8 de mayo del año en curso, a manera de recordatorio de la de un año atrás, podemos constatar que el movimiento estudiantil no escapa a esta reacción, y que últimamente, se ha visto además debilitado por la falta de organización entre los sectores de la vanguardia estudiantil.

Lo único que se ha acercado a ser exitoso, ha sido un debate sobre el referéndum, en que participaron: el PAC, MAIZ, y nosotros, la JS, que lo organizamos, y cuya asistencia pueda deberse a la desinformación existente acerca del referéndum. Sin embargo, dos grandes fracasos denotan la falta de coordinación entre las vanguardias estudiantiles: la Asamblea del jueves 17 de mayo, organizada por nosotros (JS), a la que sólo llegaron dos personas, y la Asamblea del viernes 18 de mayo, convocada por la FEUCR, a la que no llegó ninguna. Tomando en cuenta la importancia de estas Asambleas: dotar al movimiento estudiantil de una posición con respecto al referéndum, fomentar la movilización contra la Agenda de Implementación, y elegir la o el representante estudiantil ante la Coordinadora Nacional, podemos concluir que hace falta una política clara para esta nueva coyuntura, a través de una convocatoria conjunta a una nueva Asamblea Universitaria.

Esta Asamblea debe promover un bloque de Asociaciones de Estudiantes y agrupaciones políticas y sindicales, por un No Combativo, que se distinga tajantemente del No del FNA, del Frente Amplio, y del Frente de la Universidad de Costa Rica, y a la vez que hace un llamado a los sectores populares a organizarse y votar No al TLC, se las inste a la Huelga General contra la Agenda de Implementación.