Argentina

 

Hospital Francés

Los trabajadores pelean contra el vaciamiento y el cierre

Socialismo o Barbarie, periódico, 26/01/06

La lucha obrera más importante de estos momentos en Buenos Aires es la movilización de los trabajadores del Hospital Francés. La actual patronal está llevando adelante un vaciamiento del Hospital con el objetivo de mandarlo a la quiebra. Los trabajadores han realizado cortes de calle, paros y marchas frente a los Ministerios de Trabajo y de Salud, así como un escrache en el edificio del Grupo Banco Provincia de Buenos Aires (involucrado por Provincia Salud).

Pese a todas las denuncias y evidencias de vaciamiento, tanto Tomada [ministro de Trabajo] como Ginés García [ministro de Salud] están haciendo la vista gorda, favoreciendo a la patronal para que gane tiempo y siga con su plan. Inclusive la burocracia de FATSA [sindicato de sanidad], encabezada por el “gordo” West Ocampo, está del lado de la patronal contra los trabajadores y sus delegados, aportando su dilatada trayectoria como cómplice de innumerables quiebras y cierres de clínicas.

La salud, que debería ser un derecho humano básico, desde hace mucho tiempo ha pasado a ser un negocio más en manos de médicos y grupos empresarios con el visto bueno de funcionarios y sindicalistas, que también son parte del festín. Ésta es la realidad del “capitalismo kirchnerista”: mucho verso mediático para engañar a la población, mientras por detrás siguen los aumentos de precios y se pagan 10.000 millones al FMI. La única verdad en la Argentina es que tiene atención médica de calidad una minoría que tiene plata, y el resto que se arregle.

Por todo esto llamamos a los trabajadores, especialmente a los de sanidad y de salud, y a todos los delegados y organizaciones obreras combativas, a hacer el mayor esfuerzo para rodear de apoyo y solidaridad hasta que ganen los compañeros, en su lucha por el pago ya de los salarios adeudados, contra los despidos, por impedir la quiebra y por la estatización del Hospital bajo control de los trabajadores.

Para difundir esta importante lucha, Socialismo o Barbarie entrevistó a tres compañeros que están a la cabeza de la resistencia de los trabajadores del Francés.

Daniel (de Administración):

“Para ganar necesitamos claridad, unidad y organización”

SoB: ¿Cómo comienza el conflicto en el hospital?

Daniel: Este es un conflicto que lleva más de ocho meses. En un primer momento se salió a luchar por el despido de una compañera y después se continuó luchando porque nos deben ocho años de aportes jubilatorios y atrasos en el pago de los sueldos. Hoy nos encontramos en una situación de crisis en el hospital, donde faltan insumos elementales como placas de radiografía, los afiliados tienen las prestaciones cortadas, incluso los que tienen enfermedades crónicas como los oncológicos, diabéticos, etc., y  no hemos cobrado el sueldo de diciembre y el aguinaldo. Todo  indica que están vaciando el hospital para concursarlo y después quebrarlo, o sea que ¡está en peligro la fuente laboral de 2.500 trabajadores!

La anterior administración de Tossi siempre tuvo negocios turbios y fraudulentos, como el caso de la fusión con Provincia Salud (Banco Provincia de Buenos Aires), que nunca estuvo clara. Tossi es uno de los máximos responsables de la crisis del hospital.

La lucha de los trabajadores produjo que el antiguo Consejo de Administración se fuera. En la actualidad, hay un nuevo Consejo presidido por el  Dr. De Leone, asesorado por el Estudio de abogados Llerena y Asociados, que tienen fama de vaciadores profesionales y que hasta ahora, lejos de arreglar algo, agravaron la crisis del Hospital. Lo único que hizo el nuevo Consejo es versear a los trabajadores y cuidar los maxikioscos de los jefes de servicios, porque, como a Tossi, sólo les interesa llenar sus bolsillos lucrando con la salud.

Para enfrentar esta situación, los trabajadores hemos realizado paros por sector y al mismo tiempo sacamos el conflicto a la calle, con distintas medidas como cortes de calle, denuncias a la prensa, reuniones con afiliados, una batucada en el edificio Bapro y marchas a los Ministerios de Trabajo y de Salud exigiendo la intervención del gobierno para que se garantice el pago de los sueldos y la continuidad de la fuente laboral, además de que reconozcan la Comisión Fiscalizadora elegida en Asamblea  para que controle qué se hace con los 10 millones que siguen entrando al Hospital.

SoB: ¿Qué respuesta tuvieron?

D.: Lo primero que hay que decir es que si no hacíamos todo eso, la  mayoría de los trabajadores ni siquiera habríamos cobrado parte del sueldo, porque la política de la patronal es pagar selectivamente para dividir y desmovilizar. Además, si nos quedábamos quietos nadie se enteraba de lo que nos pasaba, y esa presión fue la que obligó a los funcionarios a recibirnos sin audiencia, aunque hasta ahora, tengo que decirlo, sólo recibimos promesas de gestiones. Para mí están mirando para otro lado, evadiendo su responsabilidad, para ganar tiempo y beneficiar a la patronal. 

SoB: ¿Qué hace la directiva del  sindicato?

D.: Hasta hace unos días ni se había asomado, porque la mayoría de los delegados son opositores a West Ocampo y aparte la gente no los quiere, pero estaban trabajando por abajo para dividir. El 24, por ejemplo, armó una reunión de un día para el otro en el Ministerio de Trabajo a espaldas de los trabajadores. Allí el sindicato acordó junto con la patronal y el Ministerio un acta proponiendo un “comité de emergencia” integrado por la patronal, miembros del sindicato y por trabajadores, pero los trabajadores en inferioridad de número para votar y donde, además de no dejar claro cómo se pagan los sueldos, hay una cláusula de paz social.

SoB: ¿Y cómo cayó esta propuesta?

D.: Entre los delegados y compañeros que están movilizados cayó mal y todos la rechazan, porque después de todo lo que pasó es de locos creer que la solución es sentarse con la patronal cuando son ellos mismos los que están digitando todo para tragarse el Hospital. Lo que pasa es que en situaciones como ésta, donde la patronal, el sindicato y algún delegado vendido operan metiendo miedo a la gente, diciendo que “si hay más lío esto se hunde” o “esto lo salvamos entre todos”y haciendo correr infinidad de versiones, toda esta campaña produce confusión entre los compañeros y no saben para dónde disparar.

SoB: ¿Y qué están  haciendo para contrarrestar esta propuesta?

D.: Primero nos tomó por sorpresa, porque ni siquiera pudimos hacer una asamblea previa como para ir con algún mandato al Ministerio. A la interna le avisaron a último momento, cuando nosotros estamos haciendo reuniones acá con los compañeros, así que claramente fue una traición del sindicato el intento de ir a cerrar un acuerdo con el Ministerio de Trabajo, la patronal y algún delegado vendido todo a espaldas de los trabajadores. Hoy estamos recorriendo el Hospital con el acta y discutiendo con los trabajadores lo que implica esa acta, sobre todo la cláusula de paz social, que por 120 días nos va a impedir movilizarnos y tomar alguna medida de fuerza, dándole tiempo a la patronal para avanzar con el vaciamiento. Además, bajo ningún concepto los trabajadores podemos ser parte de una comisión compartida con la patronal porque  quedaríamos atrapados tomando decisiones que irían en contra nuestra. Yo les digo a los compañeros que es una trampa, es como poner al lobo a cuidar ovejas. Por eso hay que ratificar la Comisión Fiscalizadora y nuestra independencia de todo sector patronal, reafirmando nuestro derecho a controlar las cuentas del Hospital. Ya se está barajando hacer una asamblea general, porque la idea es recorrer todos los sectores y dar un debate en cada sector, a fondo, para poder llegar a una asamblea general con todos los compañeros informados y para poder tomar decisiones que sean favorables para el conflicto.

SoB: ¿Cómo están encarando el tema de la unidad con respecto a los sectores confundidos?

D.: Para nosotros el tema de la unidad es fundamental. Los forros de la patronal vienen llevando una política de división de los trabajadores constantemente, hablan con los trabajadores en contra de las medidas, las movilizaciones y demás. Pensamos que es importante organizarnos, eso sería una manera de empezar a contrarrestar la política de la patronal y  crear espacios de debate. La Comisión Interna hizo una propuesta a los trabajadores de hacer reuniones de interna ampliada, donde los compañeros puedan debatir, aportar, tomar tareas y tomar decisiones, porque evidentemente, es un conflicto que va a seguir, y lo que nos va a garantizar el triunfo es si hay claridad, unidad y  organización de los trabajadores de todo el hospital.

Uno de los problemas que hay es que es una interna reducida, no está el plantel de delegados completo y alguno encima patea en contra, y eso es una debilidad que tenemos los trabajadores. Entonces con los compañeros que están más comprometidos con el proceso, más activistas, estamos comenzando a organizar reuniones para que los compañeros puedan tomar tareas y hacer otros aportes, no solamente quedarnos con los debates en las asambleas de sectores y la asamblea general, que es muy importante, pero además crear otros espacios donde los compañeros puedan tomar la lucha en sus manos. En este último mes creo que hemos tenido un avance, porque hasta ahora hemos sido muy combativos, pero en lo que fue organización no fuimos lo suficientemente fuertes como para poder garantizar mejores resultados, si bien hemos tenido una madurez respecto a entender que no podemos quedarnos adentro del hospital aislados.

SoB: ¿Algo más?

D.: Sí, quería agregar que después de todas estas semanas está quedando claro que esta patronal vaciadora puede hacer lo que hace porque tiene vinculaciones con el poder político, ya sea el Ministerio de Trabajo o de Salud. Inclusive con la burocracia sindical, ya que están todos confabulados para quedarse con el gran negocio que hoy es la salud a costa del hambre de los trabajadores y la estafa a los afiliados. Por eso, como enfrentamos a los poderosos, les agradezco en nombre mío y de mis compañeros a todos los que se acercaron para apoyarnos como los compañeros del Garrahan, del Ramos Mejía, del Banco Provincia, del MAS, del PO, entendiendo que para ganar hay que sumar más sectores que apoyen y multipliquen la solidaridad con la lucha de los compañeros del Hospital Francés.

Claudio (de Rayos):

“Si no se lucha no se consigue nada”

SoB: Contanos cómo está el conflicto en el sector de rayos.

Claudio: En nuestro sector no compran material de contraste, las placas radiográficas las escatiman mucho, principalmente en tomografía y resonancia, donde compran muy poquito y citan menos turnos de los que podrían citar. Por eso nosotros pensamos que el vaciamiento y el boicot de los directivos del hospital se ve en los propios jefes del servicio de radiología. Con respecto a los sueldos, la promesa de la patronal es que esta semana los saldarían, pero no hay miras de una pronta solución para el mes que viene, lo cual nos hace pensar que es muy probable que volvamos a tomar la medida.

SoB: ¿Cómo está la unidad con los demás sectores del hospital?

C.: Está bastante dividida la situación, la patronal ha trabajado mucho sobre el resto de los compañeros, amedrentándolos, diciendo que si paran la empresa quiebra. Si a eso le sumás el vaciamiento propio, que están haciendo faltar la medicación, los compañeros ven que hay menos caudal de pacientes, que hay menos medicación, y todo lo atribuyen a las medidas de fuerza. Hay muchos que están muy atemorizados y ante el miedo de la pérdida de la fuente de trabajo, prefieren no actuar.

Hemos charlado con compañeros de otros sectores, pero para evitar confrontaciones por el momento hemos suspendido todo contacto. Preferimos mantenernos así, y una vez que levantemos las medidas, a partir de que salden los sueldos, comenzar a charlar otra vez, a ver si se animan un poquito, porque hasta ahora, lo poco o lo mucho que hemos logrado, se ha logrado con la unidad de los compañeros, con las medidas de fuerza. Nuestro sector, que es el que está llevando a cabo las medidas de fuerza, está muy unido, y la lucha va a ser hasta el final, porque las pocas cosas que se han logrado ha sido con la unión, con la lucha y la defensa de nuestros derechos.

SoB: Ustedes sacaron el conflicto hacia fuera, hicieron cortes en la calle y marcharon al Ministerio de Trabajo y de Salud ¿cuál es tu opinión sobre esa experiencia?

C.: La veo positiva, porque cuando comenzamos, uno estaba con la incertidumbre de si esto llevaría a un buen camino o no, pero el saldo al día de hoy es que si no hubiera sido por las marchas, por el acompañamiento por los medios de difusión, no habríamos logrado que la sociedad tome conocimiento de la gravedad institucional por la que está pasando el hospital. Y la patronal lo que menos quiere es que la sociedad sepa del vaciamiento que están llevando a cabo y de la estafa que le han hecho a la empresa. Si nos hubiéramos quedado en nuestro sector hoy viviríamos siendo más engañados, porque la jefatura de nuestro servicio es cómplice de la crisis económica que hoy atraviesa la empresa, más allá de que además de ser jefe de servicio forma parte del consejo de administración. Entonces, si no se lucha no se consigue nada.

SoB: ¿Tuvieron alguna respuesta del Ministerio de Trabajo a sus reclamos?

C.: Al Ministerio de Trabajos fuimos en dos oportunidades. En la primera se labró un acta, nos atendió un funcionario de cuarta categoría que no tenía poder de resolución. Nosotros tenemos conocimiento que esta gente habla con el sindicato, el cual no nos respalda para nada. No, no esperamos nada del Ministerio de Trabajo.

SoB: ¿Sufrieron algún tipo de presión?

C.: Sí, hemos sufrido persecuciones, aprietes, sin ir más lejos, tres días atrás a dos compañeros los llamó el encargado del servicio en horarios no laborables para aclararles de que acá va a haber un antes y un después de la medida de fuerza, que él va a recompensar a la gente que no tomó la medida o formó parte de la medida, y eso lo tomamos, lisa  y llanamente como un apriete, lo hemos denunciado a la dirección del hospital con nombre y apellido al encargado de servicio, Marcial Cancelo, y la dirección prometió tomar cartas en el asunto. Pero con la unidad superamos los aprietes de esta gente, que lo único que quiere es mantener la dictadura que tuvieron todos estos años.

Eva (del Centro de Atención al Público):

“Los directivos no dan la cara”

SoB: ¿Cómo se vive el conflicto en tu sector?

Eva: Es una situación difícil ya que estamos en contacto directo con el público, hay gente que se solidariza y gente que no, gente que te escucha, te pregunta, mucha incertidumbre para ellos y para nosotros, porque no tenemos una respuesta clara de lo que tenemos que hacer, no hay ningún directivo que dé la cara, no hay lugares para derivar, para la atención, no hay farmacia, no hay nada. La única atención fija es en el hospital y en el hospital también es complicado, porque los servicios no funcionan como tendrían que funcionar.

SoB: ¿Qué piensan los trabajadores hacia la problemática del afiliado, del paciente?

E.: Es una situación desesperante para todos, hay gente que conocés de estar trabajando tantos años en el mismo lugar, que sabés qué problemas tienen y cómo lo sienten y uno se pone en el lugar de ellos y se pone mal. El gobierno debería intervenir, es un hospital muy grande donde trabaja mucha gente, es un conflicto muy grande y hay mucha gente involucrada, no solamente el personal, hay  obras sociales, hay de todo. El quirófano no está operando, están todos los servicios parados, hay gente que está mal porque no la operan, hay gente que no le dan la medicación, ayer hablé con una paciente y hace tres meses que no le dan los retrovirales, ellos no pueden dejar de tomar esa medicación.

SoB: ¿El paro está firme en tu sector?

E.: Sí, lo que pasa que ya salimos unidos nosotros, nos empezamos a unir, a partir de este conflicto. Hay gente que no participaba, yo, por ejemplo, hace ocho meses que estoy luchando. En este caso, en el sector donde estoy trabajando yo, en el CAP, se sumó la mayoría de la gente, hay muy poca gente que está trabajando. Yo creo que se cansaron de la mentira, porque nosotros tenemos el cajón lleno de promesas, entonces las secretarias decían que tenían fe en fulano, en mengano, y al final no les dieron respuesta y las terminaron abrochando. La falta de respuesta fue lo que llevó a agravar el conflicto.

SoB: ¿Cómo ves el conflicto de ahora en más?

E.: Yo creo que está difícil la cosa, lo veo más complicado que antes, porque en el Ministerio no te dan respuesta, llenan de promesas y no te solucionan nada. Nosotros hemos logrado más apretando a alguien para que paguen que ellos con sus oficios y sus cargos.