Arde Bolivia

 

Cinco años de conflictos sociales y de salidas coyunturales

Por Pedro Saba, 10/06/05
Envío de Pedro Quispe, Tribuna Boliviana, 12/06/05

Bolivia ingresa al vigésimo día de conflictos; los mismos que si bien ya languidecen, también han desnudado por completo las profundas crisis que vive este país: crisis de orden social, económico, político, en síntesis una profunda crisis estatal. La Presidencia de la República ha recaído en manos del señor Eduardo Rodríguez Veltzé, Presidente de la Corte Suprema de la República, luego de sendas renuncias en la sucesión presidencial efectuadas por Carlos Mesa, presidente dimitente, Hormando Vaca Díez, presidente del Senado Nacional y Mario Cossío, Presidente de la Cámara de Diputados; lo que deja un saldo de 7 presidentes de la república en los últimos cuatro años.

Sin embargo, el vertiginoso recambio presidencial se vislumbra como una salida meramente coyuntural que dejará intactos los problemas de fondo que aquejan al país; pues las pugnas por la hegemonía política no se han resuelto. Las siguientes reflexiones intentan realizar una aproximación al llamado "embrollo boliviano" que ya lleva más de 5 años, y que en los últimos días ha originado enfrentamientos que conmocionan a la sociedad boliviana, que se suman a los ocurridos en el año 2000 y 2003.

La pugna por la hegemonía política

De un lado, la burguesía y los terratenientes cruceños (1) no han logrado refrendar su poderío económico en la escena política, en parte por el desgaste sufrido por los partidos políticos -Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR), Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR), Acción Democrática Nacionalista (ADN), Unión Cívica Solidaridad (UCS), Nueva Fuerza Republicana (NFR)- que en gran medida robustecieron su posición económica con la aplicación del modelo neoliberal que a la vez ha sido el causante de ese desgaste; y en parte, por que jamás pudieron trascender el estigma de élite regional e influenciar a todo el país, pese a contar con un apoyo innegable del imperialismo norteamericano.

Por otro lado, se encuentra la irrupción en espacios estatales de líderes sindicales, gremiales e indígenas; que acarician el poder, al formar parte de la alta burocracia estatal, pues a través de partidos como el Movimiento al Socialismo (MAS), el Movimiento Indígena Pachakuti (MIP) y el Movimiento 17 de Octubre (M17) han logrado escaños en el Parlamento boliviano, ministerios, vice-ministerios, prefecturas, municipios, etc. Estos partidos tienen fuertes vínculos con organizaciones sindicales obreras, minera, campesinas, indígenas y vecinales (2), que les permite tener la capacidad de movilización social con la cual consolidan y obtienen espacios de poder.

Ocaso neoliberal y remozamiento neoestatatilista

El poderío económico de los primeros y la capacidad de movilización social de los segundos ha hecho que ambas fuerzas se encuentren en una permanente tensión; sus características y distinta capacidad económica hacen que la lucha política trasladada al plano económico y viceversa los dividan en la adscripción a un determinado modelo económico, a patrones distintos de acumulación de capital; mientras los primeros toman como funcional a sus intereses el modelo neoliberal, que les permita facilidades para una rauda concentración y monopolización del capital; los segundos optan por el modelo de intervención estatal, el retorno a las nacionalizaciones de las llamadas empresas estratégicas que permitiría la disponibilidad de numerosos puestos burocráticos que satisfaga a su vasta clientela o base social.

El modelo económico neoliberal implantado desde el año 1985 modificó profundamente el rol del estado en la economía en Bolivia, cambiaron las reglas laborales y de la seguridad social, se pusieron antiguas empresas estatales en los rubros de transporte, telecomunicaciones e hidrocarburos en manos de empresas transnacionales. Ante el actual colapso de eso modelo económico, se ha allanado la oportunidad del MAS y el MIP para acceder a esferas de poder, pues su pasado reciente está fuertemente ligado al sindicalismo y a las organizaciones populares e indígenas, hecho que les permite articular discursos que cautiven a miles de bolivianos quienes observan como salida al desempleo o subempleo, del hambre y la miseria, el retorno a la intervención estatal en la actividad económica, en particular en la actividad hidrocarburífera, como una gran oportunidad de generación de excedentes económicos y empleos que supuestamente beneficiarán a todos los bolivianos a la explotación industrial en el mencionado rubro, ya que en la actualidad los hidrocarburos extraídos de suelo boliviano son exportados como materia prima.

El MAS y el MIP han incorporado fuertemente en sus discursos consignas anti-imperialistas, primordialmente contra el imperialismo norteamericano; sin embargo, el MAS muestra más aquiescencia con los capitales de la Unión Europea y la China, este partido cuenta con una estructura partidaria más grande y de mayor alcance nacional que el MIP. También han incorporado la consigna democrática de tierra y la consigna indianista de territorio -primordialmente el MIP-, puntos de conflicto con los intereses defendidos por los partidos neoliberales, donde se encuentran paradójicamente -ya que es contradictorio con los principios liberales- concentrados los terratenientes (3).

Escenarios de la disputa política y económica

Las últimas movilizaciones han tenido como escenario principal las ciudades de La Paz, sede de gobierno, y la contigua ciudad de El Alto; para ser exacto el centro de la ciudad de La Paz, los barrios de La Ceja y de Senkata (4) de la ciudad de El Alto. Pues en estos lugares se han venido desenvolviendo movilizaciones, bloqueos y un bloqueo muy particular en Senkata, donde los vecinos cavaron zanjas y realizaron vigilias para impedir el acceso a la planta de distribución de combustible; estas acciones garantizaron la paralización casi total de actividades en estas ciudades, ante la falta de gasolina, de gas licuado, así como el impedimento a la entrada de productos alimenticios a estas ciudades.

Tal situación tuvo repercusiones en el resto del país, pues paulatinamente los bloqueos se fueron extendiendo al 75% de carreteras de Bolivia. En determinados momentos cobró relieve en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, ubicada en el Oriente boliviano, donde se protagonizaron enfrentamientos entre campesinos de San Julián (localidad al norte de Santa Cruz) del departamento de Santa Cruz y los miembros de la Unión Juvenil Cruceñista, fuerza de choque del Comité Cívico Pro-Santa Cruz, institución cívica totalmente copada por intereses de la burguesía agro-industrial cruceña. Y el día de ayer, los conflictos se reflejaron en la ciudad de Sucre (5), donde extraordinariamente sesionó el Congreso Nacional de la República.

Separatismo y racismo en Bolivia

Las características de cada una de las fuerzas políticas, económicas y sociales en contienda; una, empresarial, blancoide y proveniente de la región oriental de Santa Cruz, cuyo discurso ha logrado irradiar a otras élites departamentales (léase terratenientes) como ser: Tarija, Beni y Pando; la otra, de extracción popular, india y mestiza, con mayor presencia en la región altiplánica y valluna (6) de La Paz, Potosí, Oruro y Cochabamba; por momento ha hecho perder de vista que la pugna es de orden económica y política primordialmente; y que la diferencia regional y étnica son una de las formas como se presentan el fenómeno.

De allí que, el conflicto haya dado origen a exóticos planteamientos minoritarios pero sobredimensionados por los medios de comunicación como el planteamiento de la Nación Camba, la "Media Luna" (7), la República del Kollasuyo (8) que han impulsado de alguna forma matices racistas y regionalistas a las pulsiones que como decíamos líneas arriba son de carácter político y económico.

Desborde popular y rebasamiento de la dirección del MAS y del MIP

Un elemento, que mencionamos al final, pero no por ello de menos importancia es que desde el año 2000, las movilizaciones y luchas populares, que en un primer momento se presentaron como expresión de exigencias de los partidos del MAS y el MIP, han rebasado a estas organizaciones y han expresado claramente su intención de una profunda transformación social que vaya más allá de la mera obtención de espacios burocráticos en el estado. Sin embargo, esta intención de poder al expresarse espontáneamente, al carecer de una estructura ideológica, política y organizativa que sean concordantes con esa aspiración de transformación social; son recapturadas por el seductor lenguaje popular, pero funcional al capital y al sistema al que en apariencia se oponen, del MAS y del MIP.

De allí que, las movilizaciones si bien han sido permanentemente utilizadas como parte de la fortaleza del MAS y del MIP, primordialmente del MAS, en la lucha política; generan además de una consecuencia innegable y adversa que es el desgaste popular; una función pedagógica y valiosas lecciones que elevan la conciencia política e ideológica del pueblo boliviano.

La Paz, 10 de junio de 2005


Notas:

(1) Los intereses económicos de la burguesía con sede en Santa Cruz de la Sierra se encuentran entremezclados en la agro-industria, la gran importación y la banca. Fueron beneficiados por el modelo de intervencionismo estatal de 1952 (Plan Boham impulsado por U.S.A.) y luego por el modelo neo-liberal, a partir de 1985; esta situación les permitió acumulación de capitales con el favor del estado y lograr un peso económico superior al anteriormente ostentado por el departamento de La Paz.

(2) Entre las organizaciones populares donde algunos líderes mantienen fuertes vínculos con el MAS, de Evo Morales Ayma y el MIP, de Felipe Quispe Huanca podemos anotar a la Federación de Juntas Vecinales de El Alto, La Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos, la Federación de Trabajadores Fabriles de Cochabamba, la Coordinadora del Agua en Cochabamba, la Central Obrera Boliviana, la Federación de Campesinos Cocaleros del Trópico del Chapare y de Los Yungas, etc. Estas organizaciones han sido las bases en las que se han sustentado socialmente las movilizaciones de los últimos 5 años; sería faltar a la verdad si se afirmara que la relación entre el MAS y el MIP es con todas las bases de estas organizaciones o con todos sus dirigentes; además los dirigentes que si son proclives al MAS y al MIP no mantienen una relación unilineal con estos partidos, pues existe una permanente disputa de liderazgos.

(3) La lista de terratenientes que son parlamentarios del MNR, MIR, NFR, ADN, UCS es enorme, como un pequeño ejemplo, basta señalar que el Presidente del Senado, Hormando Vaca Díez del MIR, cuenta con grandes extensiones de tierra improductiva en los departamentos de Santa Cruz y Beni.

(4) La planta principal de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) que suministra de combustible a las ciudades de La Paz y El Alto está situada en el barrio de Senkata, en la salida de El Alto camino a la ciudad de Oruro.

(5) En esta ciudad ubicada en el sur del país se efectuaron movilizaciones de protesta por diversas organizaciones populares de esta urbe, así como por un contingente de mineros venidos de Potosí y campesinos, a fin de frenar la posesión en el mando presidencial de Hormando Vaca Díez.

(6) La Reforma Agraria de 1953 sólo tuvo un alcance a la parcelización y entrega de tierras a campesinos en la región del Altiplano y el Valle de Bolivia; las pequeñas dimensiones de las tierras entregadas (llegaban a 10 Has) y el incremento de la población campesina han hecho que las economías campesinas colapsaran hace aproximadamente 30 años, como consecuencia ha habido un continuo y creciente proceso migratorio a las urbes o a otras regiones agrícolas del Oriente, Chaco y Amazonía donde se mantuvo el patrón terrateniente de tenencia de la tierra.

(7) Para mayor información de los proyectos de la llamada "nación camba" o de la "media luna", véase los sitios web: www.nacioncamba.org o www.nazioncamba.com

(8) El planteamiento de la "República del Kollasuyo" fue esbozado por Felipe Quispe Huanca desde el año 2000, aunque fue morigerado, incluso ignorado, cuando conformó el partido MIP y participó en las elecciones generales del año 2002. Consiste en la conformación de una república independiente en los territorios conformados por parte de Oruro y La Paz, incluso del Departamento de Puno en el Perú.

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