Se agrava el escándalo por deforestación del Amazonas. El PT de Lula, salpicado por denuncias de corrupción

Un dirigente petista fue detenido por integrar una mafia que destruye el Amazonas

Por Eleonora Gosman, corresponsal en San Pablo
Clarín, 05/06/05
Enviado por Correspondencia de Prensa, 05/06/05

Ni el Partido de los Trabajadores se salvó, esta vez, de verse salpicado por la mafia de la madera que se dedicaba a devastar el Amazonas. La Policía Federal detuvo, el jueves, a un centenar de empresarios y funcionarios, quienes a cambio de coimas fraguaban autorizaciones para talar la selva. Y ayer la revista Veja denunció que entre los detenidos está Hugo Werle, un alto dirigente del PT que presidía hasta ahora el Instituto Brasileño de Medio Ambiente (Ibama) de Mato Grosso.

Con el título de "Corrupción: el Amazonas en venta", el artículo del semanario paulista afirma que habría otros militantes del PT comprometidos con el esquema delictivo de entregar permisos "truchos" para la explotación maderera. Asegura que Werle, el ahora ex gerente de Ibama, fue "recaudador extraoficial de fondos de campaña del partido (PT)" en las últimas elecciones municipales en Cuiabá, capital de Mato Grosso. Ese estado brasileño está bajo sospecha desde hace tiempo. Su gobernador, Blairo Maggi (del Partido Popular Socialista), es conocido en Brasil como el "rey de la deforestación".

El episodio de Mato Grosso es el último de los casos de corrupción que caen sobre el gobierno de Lula da Silva como fichas de dominó. Hace 10 días, el Congreso brasileño sancionó la creación de una comisión parlamentaria que deberá investigar la mafia enquistada en la empresa estatal de Correos, descubierta por denuncias de la prensa.

Se trata de una historia de estafas y coimas a través de licitaciones y, en sí misma, no tendría nada de demasiado extraordinario a no ser porque se supo que parte del dinero ilegal iba a parar a los bolsillos de prominentes políticos vinculados al gobierno de Lula da Silva.

En este caso, estaría involucrado el diputado federal Roberto Jefferson, titular del Partido Laborista (PTB) que forma parte de la coalición oficialista, quien desde ese lugar consiguió poner un "amigo" en la presidencia del Correo que se encargaba de proveer regularmente de fondos a la agrupación laborista.

Veja, que tiró la primera piedra hace dos semanas, ayer publicó el nombre de su "garganta profunda". El hombre que le había suministrado toda la información sobre la banda del Correo es Lídio Duarte, quien presidió hasta hace 2 meses el Instituto Brasileño de Reaseguro. Dijo que renunció por "no resistir" las presiones que venían de arriba para coimear y truchar licitaciones y añadió que "cada funcionario" debía poner 140.000 dólares "para el partido".

El gobierno empieza a dar señales de alerta roja. Lula se reunió con los diputados y senadores del PT y les dijo que las denuncias están orquestadas por la oposición. Pero es una obviedad: la misión opositora es, precisamente, denunciar y poner palos en la rueda del oficialismo.