Colombia

 

Polémica propuesta de Álvaro Uribe

“El Presidente parece estar abriendo paso a la impunidad"

Por Matías Mongan
Agencia Periodística del Mercosur (APM), 24/05/07

Propuso excarcelar a aquellos paramilitares que confiesen su “verdad” ante la justicia. Esta medida también beneficiaría a los congresistas oficialistas que se encuentran en prisión, a causa del escándalo de la parapolítica.

“Lo que sí creo es que sin amnistiar y sin indultar, en caso de delitos atroces, nos tenemos que preparar para darle el beneficio de la excarcelación a quienes confiesen la verdad, a quienes confiesen la verdad y esa confesión sea aceptada por los jueces de la República. Yo creo que tenemos que abrir una sana discusión nacional en esa materia y por eso quería plantearlo esta noche aquí”, con estas textuales palabras el Presidente Álvaro Uribe conmocionó aún más a una Colombia que desde hace varios meses esta convulsionada debido al escándalo de la parapolítica.

En el marco de la inauguración de Expoconstrucción, el martes a la noche en Bogota, el Primer Mandatario expuso las razones de su plan que busca excarcelar a personas que reiteradamente cometieron de crímenes de lesa humanidad: “Yo creo que es más importante premiar la verdad que purgar una pena, porque muchas veces se purga la pena pero no se supera la enfermedad”.

“Lo que queremos no es tener más gente en la cárcel para que el país tenga más guerrilla y más paras y más narcotráfico, lo que queremos es que el país nos acompañe en el proceso de recuperar plenamente las instituciones…. Mi invitación es a crear una discusión nacional constructiva, en la dirección de premiar la verdad, para así ver como podemos recuperar el camino institucional”, enfatizo Álvaro Uribe.

Lo que primero se desprende de estas polémicas declaraciones, es que el Jefe de Estado a través de esta propuesta para “premiar la verdad” finalmente esta reconociendo la grave crisis institucional que esta viviendo su gobierno, a raíz del escándalo por los nexos –investigados y demostrados por la Justicia– de varios políticos ligados a su entorno con integrantes del grupo paramilitar Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).

La iniciativa propuesta por Uribe no sólo busca dejar en libertad a personajes siniestros que cometieron un sin fin de aberrantes crímenes, sino que pareciera que también apunta de eximir de culpas a la más de decenas de políticos oficialistas que actualmente están en prisión en el marco de la causa por la parapolítica que lleva adelante la Corte Suprema.

Desde hace unos meses, el Presidente Colombiano venia dando señales acerca de la posibilidad de otorgar una excarcelación condicionada a todos aquellos dirigentes que según su opinión se vieron forzados bajo presión a firmar acuerdos con grupos criminales al margen de la ley.

Es más el pasado vienes explícitamente el mismo Uribe les dijo al Presidente de la Corte Suprema y al Fiscal General que estaba confiado en que "la justicia en su sabiduría va a saber establecer diferencias con respecto a los que fueron sometidos por los verdugos del terrorismo”.

No obstante la opinión sostenida por el Presidente colombiano, algunos paramilitares de las AUC –sobre todo Salvatore Mancuso– y hasta los mismos entes investigadores en reiteradas ocasiones han remarcado que los políticos acudieron a esas reuniones por voluntad propia. Hasta inclusive utilizaron a la violencia paramilitar para beneficiar sus intereses eleccionarios.

Volviendo a la propuesta de implementar un plan de excarcelación “condicionada” a todos aquellos acusados que cuenten su verdad ante la justicia, sería bueno preguntarse lo siguiente: ¿Que van a sentir los familiares de las victimas de las AUC cuando vean que los asesinos de sus seres queridos van a salir en libertad gracias a que contaron su “verdad” ante la Justicia? ¿De que manera esta medida va a permitir recuperar el “camino institucional”, de la conciliación, en Colombia?

Ya de por sí es muy poco el castigo (penas de 5 a 8 años) que contempla la Ley de Justicia y Paz, si tenemos en cuenta todos los crímenes de los que son acusados los paramilitares. Pero esto ya es demasiado, si la propuesta gubernamental logra aprobarse en el Congreso, no va a ayudar en nada a premiar “la verdad”, sino que lo único que va a hacer es perpetuar el sistema impune que le ha permitido a un grupo ilegal como las AUC convertirse en “un verdadero Para–Estado”.

Como era de esperarse los principales exponentes de la oposición salieron a criticar la iniciativa de Álvaro Uribe. Para el senador del Polo Democrático, Gustavo Petro, en la actualidad se esta dando “Un conflicto de interés. Un empleado público, cualquiera que sea, no puede usar la ley para el beneficio particular y personal… gracias a esa excarcelación (Uribe) exoneraría a su primo, a su vicepresidente, el Ministro de Defensa y políticos del uribismo".

Por su parte el vocero del Partido Liberal, Juan Fernando Cristo, aseguró que la actitud del Jefe de Estado es: “curiosa, sospechosa y poco seria. El Presidente parece estar abriendo paso a la impunidad en este país”.

Hasta los mismos integrantes de la coalición oficialista salieron a reprobar el posible plan de excarcelación a los vinculados por la parapolítica. “Estoy en desacuerdo. Creo que Colombia no puede seguir negociando el estado de derecho, debe aplicar las leyes que tiene vigentes”, remarco la senadora del partido de la U, Gina Parody.

Quien salio a defender la postura del Primer Mandatario colombiano, fue el Ministro del Interior y Justicia, Carlos Holguín. Este sostuvo que por intermedio de esta propuesta el Presidente no incurrió en ningún conflicto de intereses ya que solamente lo que “estamos haciendo es una invitación a un debate amplio, franco y democrático".

El funcionario cree que el país no va a poder resistir 7 u 8 años para poder así establecer la verdad acerca del accionar de los grupos paramilitares, por esta razón el gobierno quiere implementar esta medida que según su óptica contribuye a forjar: “Un nuevo pacto social, para que nunca vuelva a pasar lo vivido".

Realmente son muy pocas las chances de que las cosas cambien en Colombia, sobre todo si se implementan políticas como esta, que lo único que hace es reforzar la impunidad que gozan los paramilitares en la actualidad. A pesar del discurso oficial, los “paras” de nuevo orden desde hace tiempo han vuelto a operar en el territorio colombiano. Una clara prueba de ello es el informe divulgado hace sólo unos días por Amnistía Internacional en Londres, en donde se denuncia que varios ex integrantes de las AUC “siguen actuando y cometiendo violaciones de derechos humanos, con la aquiescencia o la connivencia de las fuerzas de seguridad”.

Se necesita una medida más drástica para luchar contra el “cáncer” paramilitar, que a lo largo de años se ha logrado enquistar en la sociedad colombiano. Sin lugar a dudas que una medida adecuada para solucionar este contexto de crisis institucional podría ser un llamado a una Asamblea Constituyente que busque refundar a la nación colombiana.

Este punto de vista es sostenido por el gobernador del Valle del Cauca, Angelino Garzón, quien en una carta dirigida a Álvaro Uribe le manifestó acerca de la necesidad de llamar a “una Constituyente de construcción democrática, para dar salidas de consenso. Una Constituyente por la dignidad nacional, que reivindique la política como ejercicio de la búsqueda del bien colectivo, lejos de la corrupción, del narcotráfico y de las presiones violentas de los grupos armados ilegales”.

El funcionario regional señaló que a causa de la parapolítica, hoy en día instituciones claves para el juego democrático, como es el Congreso de la República, están inmersas en una grave crisis de legitimidad: “No es hora de preguntarnos, si escenarios propios de la democracia, como una Asamblea Nacional Constituyente, podrían ser el camino más indicado del pacto político y social que ponga fin a la violencia”, enfatizó.

Realmente son muy remotas las chances de que el Presidente colombiano tenga en consideración esta iniciativa que busca crear un nuevo orden social en su país. Uribe no esta interesado en nada de esto, solo busca reproducir el status quo existente. Una prueba de ello es su lucha contra “viento y marea”, para que los Congresistas demócratas en Estados Unidos den aval al Tratado de Libre Comercio firmado entre ambas naciones.

La cuestión recae, en que si Uribe realmente no hace nada, y pronto para solucionar la crisis que vive su gobierno, la “bomba parapolítica” le puede llegar a explotar en las manos…