Economía
mundial

 

Sin el dinero de los exportadores de crudo, el dólar volvería a caer

Por Mark Whitehouse
The Wall Street Journal / IAR–Noticias, 19/04/06

El valor del dólar tiene grandes implicaciones para la economía global. También es muy difícil de predecir. Sin embargo, algunos economistas creen haber encontrado una pista: seguir el camino de los petrodólares.

En años recientes, el auge en el precio del crudo ha traspasado buena parte de la fortuna mundial a manos de exportadores en Medio Oriente, América Latina y Rusia, transformando sus decisiones de inversión en un importante indicador para los mercados globales.

Su afición por las inversiones en dólares ayudó a mantener a flote a la moneda estadounidense, contra las predicciones de los economistas de que la creciente deuda de EE.UU. debería en algún momento espantar a los inversionistas y hacer caer el dólar.

Ahora, sin embargo, algunos economistas creen que los productores de petróleo se alejarán de los dólares a la hora de invertir, permitiendo que la moneda estadounidense reanude una caída que empezó en 2001. Citan varias razones: las recuperadas economías en Europa y Japón, las recientes reacciones en EE.UU. contra la inversión extranjera y la deuda estadounidense, entre otras.

EE.UU. gasta en el exterior US$800.000 millones más de los que recibe, por lo que necesita atraer casi lo mismo en inversiones para mantener la tasa de cambio del dólar. Si no lo hace, y el dólar cae, es muy probable que las repercusiones se sientan en todo el mundo. A medida que menos dinero fluye hacia acciones y bonos de EE.UU., sus precios podrían caer. Pero, si el dólar cae demasiado, la Reserva Federal podría elevar aún más las tasas de interés de corto plazo, una medida que podría afectar el crecimiento global.

Pero la información disponible sugiere que hasta el momento las naciones exportadoras de petróleo, en vez de alejarse de las inversiones en dólares, han participado en la subida del dólar. A medida que el precio del crudo se ha más que duplicado en los últimos años, ayer el crudo liviano para entrega en mayo cerró en US$70,40 el barril en Nueva York, los ingresos de los países exportadoros de petróleo también se han más que dublicado, a casi US$700.000 millones en 2005, según el Tesoro de EE.UU.

Como resultado, las cuentas bancarias de los exportadores han aumentando a casi US$700.000 millones hasta septiembre de 2005, frente a los menos de US$400.000 millones en 2002, de acuerdo al Banco Internacional de Pagos. La mayor parte de ese dinero se guarda en dólares, de modo que el aumento de los depósitos ha impulsado la moneda estadounidense.

Pero si la historia sirve de guía, todo ese dinero no permanecerá en el banco por mucho tiempo. Auges petroleros anteriores han mostrado patrones similares, en los que los exportadores acumulan reservas de efectivo y luego las gastan o las traspasan a inversiones de más largo plazo, dice Thomas Stolper, economista de mercados globales de Goldman Sachs en Londres.

Banqueros centrales de Emiratos Árabes y Qatar dieron señales en las últimas semanas de que podrían pasar grandes porciones de sus reservas en dólares a otras monedas. Los exportadores de petróleo compraron US$50.000 millones en valores estadounidenses entre enero de 2005 y 2006. En igual lapso del año previo, esa cifra había sido de casi US$100.000 millones. En los próximos meses, los argumentos contra la compra de dólares se harán cada vez más fuertes.

Las economías de Europa y Japón están rindiendo mejor de lo previsto, lo que podría animar a sus bancos centrales a elevar las tasas de interés, haciendo más atractivas las inversiones en euros, con respecto a las en dólares.