Movimiento de inmigrantes en EEUU

 

Boicot en marcha pese a ola de redadas

Por Maribel Hastings
Corresponsal en Washington

El Diario – La Prensa, Nueva York, 04/28/2006

Washington.–  La coalición organizadora del llamado Gran Boicot del 1 de mayo o “Un Día Sin Inmigrantes” afirmó ayer que pese a presiones y rumores “el boicot va” y exigieron que la administración del presidente George W. Bush ponga fin a las redadas a través del país que según ellos sólo pretenden amedrentar a los inmigrantes y a quienes los apoyan para impedir que participen del paro.

En rueda de prensa en el Press Club de esta capital, los organizadores rechazaron que existan divisiones entre los grupos en torno al paro y lo que hay, dijeron, son “diferencias tácticas” que se superarán pasado el lunes porque después de todo los une el mismo objetivo: una reforma migratoria integral y evitar el avance de medidas policíacas como el HR4437 de la Cámara de Representantes. Denunciaron además una oleada “masiva” de redadas a través del país para intimidar a los inmigrantes.

Pero el portavoz del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), Michael Keegan, dijo a La Opinión que “no hay ninguna coincidencia entre las redadas y lo que ellos están haciendo o van a hacer”.

“Nuestra reacción es que no tenemos reacción porque nosotros lo que estamos haciendo es cumplir con nuestra responsabilidad de aplicar las leyes”, agregó Keegan. Las redadas, dijo, no son nada nuevo, se han dado y se seguirán dando porque mientras no haya cambios, “las leyes son lo que son”.

La semana pasada el DHS anunció la mayor redada corporativa de la historia de Estados Unidos con el arresto de 1,187 indocumentados en una sola empresa. Keegan indicó que la pesquisa que culminó en esa redada tomó 14 meses y el momento del anuncio no tuvo el fin de amedrentar a nadie.

La denuncia de los organizadores del boicot se produce mientras los líderes republicano y demócrata del Senado intentan acordar el procedimiento para retomar el debate del llamado lenguaje de legalización ganada Martínez/Hagel que además crea un programa de trabajadores temporales (PTT).

Ayer también hubo reportes de que el presidente George W. Bush apoya ese concepto de legalización ganada pero que no lo ha hecho público porque aún hay que negociar con el ala más conservadora de la Cámara de Representantes opuesta a cualquier PTT o plan de legalización.

Pero antes de que el acuerdo Martínez/Hagel se viniera abajo senadores de ambos partidos indicaron que Bush apoya el concepto. Y el lunes Bush catalogó el acuerdo como “interesante” e “importante”.

El aún portavoz presidencial, Scott McClellan, indicó que el presidente cree que el acuerdo “es el vehículo para arribar a una reforma integral”.

Mientras tanto, la Coalición Internacional del 1 de mayo trató de disipar dudas sobre la viabilidad del paro. "Venimos a decir de manera clara y contundente que el boicot va... No se ha cancelado ni se ha pospuesto y va a ser un éxito rotundo”, afirmó Juan José Gutiérrez, director del Movimiento Latino USA. Aseguró que no existen divisiones entre las organizaciones a pesar de que muchas no apoyan la estrategia del paro.


La lucha de los inmigrantes se agudiza. Huelga y boicot para el 1 de Mayo

Redadas contra indocumentados

Por Armando Salé
La Haine, 25/04/06

1187 trabajadores indocumentados y siete ejecutivos de la empresa contratante IFCO Systems, de Holanda, fueron detenidos en una operación nacional llevada a cabo por el Servivio de Inmigración y Aduanas de los EE.UU en 25 Estados diferentes. 

El gobierno norteamericano ha reaccionado violentamente atacando a la comunidad inmigrante mediante una redada masiva a nivel nacional contra trabajadores indocumentados. Es, sin lugar a dudas, un claro contraataque ante la presión política que venía sufriendo con las movilizaciones sociales de los últimos meses y la convocatoria de huelga y boicot para el próximo 1 de Mayo. El conflicto se agudiza.

Redada masiva a nivel nacional contra indocumentados

La situación actual comenzó con la aprobación de la propuesta de Ley HR 4437 por el Congreso y su consecuente paso a debate en el Senado. Esto desencadenó una de las mayores movilizaciones de la historia de la comunidad inmigrante en los EE.UU, provocando una inesperada convulsión social y una profunda crisis en la clase política norteamericana. Lo que parecía que iba a ser un camino de rosas para poner en práctica las legislaciones más xenófobas del partido republicano se convirtió en una batalla política que se va calentando por momentos.

1187 trabajadores indocumentados y siete ejecutivos de la empresa contratante IFCO Systems, de Holanda, fueron detenidos en una operación nacional llevada a cabo por el Servivio de Inmigración y Aduanas de los EE.UU en 25 Estados diferentes. La redada fue anunciada ante los medios el pasado jueves 20 de abril por el secretario de Seguridad Nacional Michael Chertoff. Los indocumentados detenidos encaran ahoran la deportación inmediata y los ejecutivos de la empresa penas de 10 años de carcel y multas de hasta 250.000 dolares por cada un de los 1.187 trabajadores.

Semejante redada solo puede enmarcarse en el pulso político que se viene dando desde hace meses entre un gobierno que quiere criminalizar la inmigración y formalizar el exclavismo encubierto existente; y más de 12 millones de inmigrantes indocumentados que demandan una reforma migratoria justa y que ya empiezan a radicalizar estrategias mediante una llamada a la Huelga y al Boicot para el próximo 1 de Mayo día internacional de los trabajadores.

Está claro que el Gobierno quiere recuperar fuerza en esta batalla política y demostrar que ellos siguen siendo los que mandan. Para ello han realizado una operación que busca intimidar a los indocumentados y mostrarles su invulnerabilidad. Recordarles que no tienen derechos en este país y que están desamparados ante la ley. Quieren mermar las fuerzas y los ánimos antes del 1 de Mayo, día en el que diversas organizaciones de inmigrantes están llamando a la Huelga de inmigrantes y a un Boicot comercial.

A destacar es tambien el hecho de que la empresa víctima es extrangera. Tampoco han perdido la oportunidad para atacar a una empresa holandesa dedicada a los artículos de embalaje y que compite con la economía nacional. “Vamos a seguir con esta acción en todo el país en el pleno cumplimiento de las leyes de inmigración y en beneficio de la seguridad nacional”, comentaba el pasado jueves la directora del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE), Julie Myers.

Y es que está claro que si alguien va a beneficiarse de la mano de obra barata en territorio estadounidense, esas son las empresas gringas. “El beneficio de la seguridad nacional” es el beneficio de la seguridad económica que implica contar con una fuerza de trabajo barata que multiplique la plusvalía y permita facilmente las reestructuraciones económicas necesarias para ser competitivo en el mercado internacional. Por ejemplo despidos masivos y translado de factorias para conseguir inyecciones rápidas de capital sin ningún tipo de reponsabilidad legal ante unos trabajadores sin derechos.

Otro objetivo que parece buscarse con esto es preparar el terreno para el programa de trabajadores huespedes que pretende lanzar el Gobierno. Persuadiendo a las compañías extranjeras o nacionales que produzcan en territorio norteamericano de la conveniencia de entrar en dicho programa ante el riesgo de no hacerlo.

Aun así y hasta que el programa de trabajadores huéspedes no esté en pleno funcionamiento, sigue quedando lejos un ataque semejante a una compañía nacional.

Los buenos modales se disipan y dejan al descubierto la verdadera naturaleza del conflicto

La clase política norteamericana venía ya tiempo queriendo suavizar el tono y las estrategias de protesta y presión, cuando el Gobierno al tiempo intimida con una redada masiva contra indocumentados a nivel nacional.

La clase política comienza a mostrar así el engaño que supone pedir buenos modales y moderación en un conflicto de intereses enfrentados. Sólo han intentado hacerse con el liderazgo del movimiento para neutralizarlo políticamente y llevarlo al terreno de un simbolismo inofensivo para los intereses burgueses.

En este sentido fue el intento de “americanización” de las movilizaciones con las peticiones por parte de los políticos a los manifestantes de portar banderas estadounidenses. Esto haría mostrar una actitud de ruego y respeto hacia las instituciones gringas en vez de una de exigencia y orgullo que mostrarían las banderas de todos los países de los asistentes. Y tuvieron éxito, porque la clase política burguesa se ha hecho un hueco en el liderazgo de este nuevo movimiento emergente.

Sin embargo no lo han copado y las organizaciones políticas más combativas han pasado a llamar a la huelga y al boicot con una capacidad de convocatoria que ahora teme el gobierno.

La petición de dialogo y buenas maneras a los inmigrantes empieza a sonar a engaño y cada vez más gente comprende que esto no se trata de dialogo, sino de negociación. Y a la negociación no se puede ir de vacío, hay que llevar herramientas de presión. El Gobierno es el primero que entiende esto y ya ha mostrado las suyas. Ahora solo queda que los inmigrantes hagan lo propio y que en el camino desenmascaremos a los que de forma constante intentan engañar y conducir por la vía del ruego, porque eso sólo nos deja indefensos en la negociación.

El conflicto se agudiza, las mascaras van desapareciendo y las estrategías de ambas partes se radicalizan.


Grupo antimigrante pide apoyo al Movimiento Nacional Socialista (neonazis)

Lanza EEUU ola represiva contra indocumentados

Notimex, 27/04/06

Washington.– Organizadores del boicot del primero de mayo Un día sin inmigrantes denunciaron hoy una "ola represiva" del gobierno estadounidense contra los indocumentados consistente en redadas en varios estados del país.

De su lado, el grupo antinmigrantes Guardianes de la Frontera pidió al neonazi Movimiento Nacional Socialista (NSM, por sus siglas en inglés) iniciar una campaña violenta contra indocumentados y sugirió una serie de medidas para intimidar a la inmigración.

El director del Movimiento Latino USA, Juan José Gutiérrez, denunció que elementos del Departamento de Seguridad Interna (DHS, por sus siglas en inglés) han estado realizando redadas en varios estados del país, como Arizona, Michigan, Georgia, además de las ciudades de Washington y Miami.

"Hacemos un llamado al presidente George W. Bush y al Congreso a detener esta ola represiva", dijo Gutiérrez, quien aseguró que las redadas impidieron que varios líderes locales acudieran a Washington para participar en conferencias de prensa previas a la protesta del próximo lunes.

Gutiérrez señaló que a pesar de los actos de intimidación de las autoridades "el paro va. Bajo ninguna circunstancia lo cancelaremos o lo pospondremos".

El diario The Miami Herald aseguró en su edición de hoy que hasta parece que se adelantó la protesta de Un día sin inmigrantes, pues las calles de varios barrios de la ciudad de Miami se veían desiertas, ya que mucha gente permanece en casa por temor a las detenciones.

Fue el cónsul mexicano en Miami, Jorge Lomónaco, quien indicó al Herald que la situación ya había provocado dudas del gobierno mexicano. Lomonaco afirmó que sobre todo llama la atención el distrito de Homestead, donde gran parte de la población inmigrante es mexicana.

"El tejido social quedó afectado ahí", dijo Lomónaco, quien aseguró que el consulado se ha visto inundado por llamadas de inmigrantes que denuncian las redadas sorpresivas.

"La gente tiene miedo de salir a la calle, creen que los van a detener e interrogar", afirmó por su parte el Dennis D. Grant, un pastor jamaiquino–estadounidense.

De su lado, Cheryl Little, directora del Immigrant Advocacy Center, también citada por el Herald, aseguró que ningún detenido de las supuestas redadas ha buscado los servicios de su organización, si bien asegura que han recabado testimonios creíbles de gente que presenció esas redadas. También dijo que uno de los miembros de su grupo visitó el jueves el centro de detención de Krome, en el distrito de Miami–Dade, y que se encontró con 60 extranjeros recién detenidos.

La semana pasada, el DHS anunció la mayor redada corporativa en la historia de Estados Unidos, con el arresto de mil 187 trabajadores indocumentados en una sola empresa. El operativo formó parte de una nueva ofensiva contra inmigrantes ilegales.

Las radios de habla hispana de Miami han tomado numerosas llamadas que han denunciado que la policía detiene en las calles y a bordo de los transportes públicos a personas escogidas al azar.

Steve McDonald, vocero del Border Patrol de Florida, según el Herald, afirmó que la fuerza a la que el pertenece no lleva a cabo operaciones al azar a bordo de autobuses o en la calle y aseguró que su agencia no está involucrada en "redadas de inmigración".

El director de la Sociedad Americana de Musulmanes, Mahdi Bray, sostuvo que el hostigamiento a indocumentados no es distinto al que sufrió el movimiento por los derechos civiles en los 60, una vez que empezó a adquirir fuerza nacional.

"Se trata de redadas racistas que condenamos", dijo por su parte la fundadora de la Alianza para la Justicia Civil, Mara Verheyden–Hillard.

Así las cosas, el diario La Opinión de Los Angeles publicó este jueves que la líder del movimiento antinmigrante Guardianes de la Frontera, Laine Lawless, envió un correo electrónico con una lista de 11 sugerencias al llamado comandante SS de la unidad del NMS en Ohio, Mark Martin, pidiéndole iniciar una campaña violenta contra indocumentados y le hace varias sugerencias, si bien le insta a "ser creativo".


Tiendas y clínicas vacías por rumores de redadas contra ilegales

The Wall Street Journal / IAR-Noticias, 28/04/06

En la víspera de otra masiva manifestación por una reforma migratoria, el pánico se ha apoderado de enclaves de inmigrantes alrededor de Estados Unidos, dejando tiendas, restaurantes y consultorios vacíos, a medida que se esparcen rumores de que las autoridades están acorralando a los indocumentados.

El creciente temor se desprende del llamado del secretario del Departamento de Seguridad Interna de EE.UU., Michael Chertoff, para perseguir a los empleadores que contraten a indocumentados.

El anunció llegó luego de que investigaciones realizadas por la agencia de Inmigración y Aduanas (ICE), resultaran en el arresto de 1.187 empleados y siete gerentes del fabricante de embalajes IFCO Systems.

A raíz de ese evento, se cree que desde principios de semana miles de indocumentados han optado por quedarse en casa en vez de ir a trabajar.

En Newark, Nueva Jersey, maestros reportaron el jueves un ausentismo inusual por cuarto día consecutivo. En zonas aledañas a ferreterías y tiendas de artículos de construcción en Florida se ha visto sólo a unos cuantos inmigrantes buscando trabajo, cuando normalmente hay docenas de indocumentados.

La situación podría empañar el "día sin inmigrantes" programado para el lunes, otra manifestación masiva que espera sacar a millones a las calles de las principales ciudades de EE.UU.

Las protestas pidiendo una reforma migratoria han atraído a enormes multitudes en el último mes solicitando un estatus que les permita a los indocumentados trabajar legalmente.

Todo, en medio de un debate que ha provocado divisiones en el Congreso de EE.UU. El origen de los rumores de las redadas no está claro. "No tienen fundamento", dijo Virginia Kice, vocera de ICE. "No hacemos redadas al azar".

Con 12 millones de inmigrantes ilegales en el país, las operaciones de ICE usualmente apuntan a aquellos con antecedentes criminales que han evadido órdenes de deportación.

En el caso de empleadores, usualmente se investiga a firmas que se cree contratan a ilegales para evadir impuestos y reducir sus costos laborales.

Pero esa no es siempre la norma. El martes en Washington, ICE detuvo a 16 inmigrantes ilegales en una fábrica, que se suman a los 183 ilegales detenidos el lunes en Miami.

La redadas han sido interpretadas por algunos analistas políticos como un intento por aplacar las críticas al gobierno del presidente Bush de hacer la vista gorda frente a la difundida práctica de contratar a ilegales que portan documentos falsos. Los organizadores de la marcha del lunes están tratando de calmar a los potenciales manifestantes.