Otra vez el “autonomismo” mostró la hilacha

Toni Negri apoyó el SÍ a la Constitución neoliberal

Por Claudio Testa
Socialismo o Barbarie, periódico, 03/06/05

Parece haber causado cierto pasmo en la izquierda europea la posición adoptada por Toni Negri, uno de los principales referentes teóricos y políticos mundiales de las corrientes llamadas “autonomistas”. En una entrevista publicada en Libération –diario “progre” de París– Negri salió a la palestra apoyando al engendro de Constitución neoliberal. De esa forma, en la poco recomendable compañía de Zapatero, Schröder, Tony Blair y Condolezza Rice, Toni Negri fue una las tantas figuras del exterior que se sumaron a la campaña por el SÍ en Francia.

Posiblemente entre la vanguardia latinoamericana la última voltereta política de este saltimbanqui ha causado menos asombros. Es que Toni Negri ha recorrido el Cono Sur cantando loas al gobierno neoliberal de Lula y no menores alabanzas a la gestión de Kirchner. ¿Por qué en Europa iba a actuar diferente?

Las “razones” aducidas en Libération  para apoyar al SÍ es otra pequeña obra maestra de la escuela toni negrista. Sostiene, por ejemplo, que la Constitución es buenísima porque si bien “tiene un tufo liberal...” va a servir para acabar con esa “mierda del estado nación”. Por supuesto, siguiendo su norma de trabajo intelectual, Negri no se toma la molestia de demostrar ése y otros disparates. En este caso, o no se tomó el trabajo de leer la Constitución o miente deliberadamente. Es la misma escasa seriedad con que en su libro Imperio –editado poco antes de Bush– demostraba que el imperialismo en general y el yanqui en particular habían dejado de existir.

Aquí no tenemos espacio para analizar extensamente esta nueva elucubración del gurú del autonomismo. El lector interesado puede informarse en el excelente artículo de John Brown, “Las tentaciones de San Antonio (Negri) o el reverso tenebroso de la Multitud”, publicado en la edición del 29/05/05 de Socialismo o Barbarie, revista internacional en la web ( www.socialismo-o-barbarie.org ).

Sólo haremos una última reflexión. El principal problema que plantea Toni Negri a la reflexión teórica y política de la izquierda, no es ninguna de sus ideas. La gran cuestión que merece analizarse, es cómo un insigne charlatán de ese calibre pudo ocupar un lugar tan importante en el escenario intelectual y político de la izquierda, especialmente en los medios universitarios... Este hecho mide la profundidad que alcanzó la crisis política e ideológica en amplios sectores, con el derrumbe del “socialismo real”, las transformaciones de la globalización, las derrotas de los movimientos obreros y revolucionarios en los 80 y 90, y lo que parecía el reinado sin disputa de la ideología neoliberal después de la caída del Muro de Berlín, en 1989.

Negri (y el autonomismo en general) se presentaban como una respuesta a todo eso, una de cuyas premisas era tirar a la basura el capital teórico heredado del marxismo, y de un siglo y medio de luchas revolucionarias. Con una fraseología de apariencias “libertarias” y hasta “extremistas”, en verdad sólo eran una “traducción” y una adaptación “de izquierda” a esos triunfos de la contrarrevolución capitalista-imperialista y sus ideologías.

Pero en el siglo XXI el viento ha comenzado a soplar desde otros cuadrantes. El autonomismo en general y Negri en particular han ido pasando además por la dura prueba de los hechos... y de las luchas políticas y sociales. Y tanto en Europa como en América Latina, el fiasco del autonomismo ha sido mayúsculo. El apoyo de Negri a la Constitución neoliberal europea es otro escalón de esa decadencia.