Francia

Los raperos, en el punto de mira

Un grupo de parlamentarios franceses pide actuar contra algunos grupos por sus letras violentas

Por Lluís Uría
La Vanguardia, 25/11/05

Un diputado de la UMP acusa al rap de ser "uno de los factores" desencadenantes de los disturbios en las ´banlieues´

Cuánto tiempo va a durar esto todavía? Hace ya años que todo debería haber reventado (...) La guerra de los mundos la habéis querido, aquí la tenéis / Pero qué esperamos, qué esperamos para meterle fuego / Pero qué esperamos para dejar de seguir las reglas del juego". La letra de esta canción, del rapero francés Joey Starr, del grupo NTM, podría haberse convertido en el particular himno de la reciente revuelta en las banlieues de las ciudades de toda Francia si no fuera porque data de hace diez años. Compuesta en 1995, era una premonición de la ira que se estaba incubando en los barrios de las periferias urbanas, entre los hijos de la inmigración, nuevos franceses excluidos del sueño republicano de libertad, igualdad y fraternidad.

El rap, nacido en los suburbios negros de Nueva York, empezó a introducirse en las barriadas del extrarradio de las ciudades francesas en los años 80 y, poco a poco, se ha acabado convirtiendo en la voz y la bandera de los jóvenes desarraigados de las cités,los Blacks (negros) y los Beurs (árabes). Sus letras se han ido haciendo también más violentas, hasta el punto de que algunos políticos han empezado a establecer una relación de causa a efecto entre las canciones y los actos de violencia urbana que han dejado a Francia sin aliento durante tres semanas.

Un grupo de 153 diputados y 49 senadores, sobre todo - pero no únicamente- de la derecha, han solicitado esta semana al ministro de Justicia, Pascal Clément, que considere la posibilidad de actuar contra siete grupos o cantantes de rap por promover el racismo "antiblanco" e incitar al odio contra Francia en sus canciones. Los acusados son 113, Smala, Ministère Amer, Lunatic, Fabe, Salif y Monsieur R, cuyos textos son en ocasiones extremadamente virulentos (ver recuadro). "El mensaje de violencia de estos raperos, recibido por jóvenes desarraigados, desculturizados, puede legitimar en ellos la incivilidad y en el peor de los casos el terrorismo", afirmaba ayer el diputado de la UMP François Grosdidier, promotor de la iniciativa, quien no duda en considerar al rap como "uno de los factores" que han alimentado la violencia de estas semanas en los barrios marginales. Otro diputado de la UMP, Daniel Mach, denunció el pasado mes de agosto al rapero Monsieur R por la letra de una canción en que calificaba a Francia de "perra". A raíz de ello, el Ministerio de Justicia ordenó a la fiscalía la apertura de una investigación. El juicio por este caso se verá el próximo 6 de febrero en el tribunal de Melun.

La vinculación de las canciones de los siete grupos citados por los parlamentarios con los disturbios de estas últimas semanas es bastante incierta, tanto como la posibilidad de actuar judicialmente en su contra, pues la mayoría hace años que se disolvieron o retiraron. De hecho, el propio Ministerio de Justicia encargó al fiscal dilucidar si, además de la existencia de un posible delito, éste puede haber prescrito. François Grosdidier responde a ello que, en cualquier caso, las canciones siguen estando accesibles en tiendas de discos y en internet.

El ministro del Interior y presidente de la UMP, Nicolas Sarkozy, acusó a principios de este mes a uno de estos grupos - Sniper- de transmitir en sus canciones contenidos "racistas y antisemitas" y ya avisó, en una intervención ante la Asamblea Nacional, de su determinación de llevar ante la justicia a todos aquellos cantantes y músicos que escribieran canciones de este tipo. "Aquellos que no respeten la reglas de la República tendrán que rendir cuentas ante la justicia de nuestro país", dijo. Sus correligionarios se lo han tomado al pie de la letra.

Olivier Gachin, experto en rap y autor del libro La ofensiva rap, deploró ayer la iniciativa de los diputados, a quienes reprochó la búsqueda de chivos expiatorios. "Después de la poligamia, los raperos serían también responsables de los disturbios de las banlieues. ¡Es de un desprecio increíble!". Lo mismo vino a decir Monsieur R: "Una vez más se buscan cabezas de turco porque la banlieue ha ardido".