Rusia

 

Un primer balance de la Contracumbre alternativa de Petersburgo

Por Marina Klimova [1]
Sin Permiso, 30/07/06
Traducido por Gustavo Búster

Marina Klimova hace aquí un primer balance de la Contracumbre alternativa a la Cumbre del G–8 en Petersburgo.

A pesar de la amplitud de la represión y la desproporcionada correlación de fuerzas, los participantes de la Contracumbre han demostrado el carácter profundamente policiaco del poder en Rusia y, también, la existencia de un movimiento de resistencia en Rusia.

Cerca de 1500 personas han  participado en el Foro Social Ruso. Otras 500 personas en la manifestación organizada por el Partido Comunista de Rusia.  Y varios cientos en las iniciativas de la “Red contra el G–8”. Este es el balance humilde pero muy honorable de la Contracumbre de San Petersburgo.

Una iniciativa modesta comparada con las manifestaciones alterglobalistas en Europa Occidental. Pero una iniciativa importante dada la fuerte represión contra los participantes. Es también una etapa en el desarrollo de un movimiento social de resistencia en Rusia. De un lado, se han producido avances importantes en la resistencia, la auto–organización y la defensa de los derechos de la población. Del otro,  hay que reconocer que aun no se ha alcanzado la masa crítica necesaria para hablar de un movimiento social de masas fuerte.

A pesar de la debilidad relativa del movimiento, la Contracumbre, y en primer lugar el Foro Social Ruso es una prueba de la dinámica del movimiento, de su voluntad de acción solidaria y de la emergencia de una alternativa política. La primera jornada del FSR, el 14 de julio, fue testigo de ello. Todas las cuestiones programáticas han sido tratadas en las discusiones y seminarios: seguridad energética, reforma de la escuela, naturaleza del alterglobalismo, campaña por la vivienda, guerra de Chechenia, cultura. La mayoría de los seminarios han acabado con la adopción de una resolución y un plan de campañas. En algunos casos, las discusiones han conducido a la creación de movimientos (Movimiento por la vivienda..).

Todo ello a pesar de que la ausencia de numerosos  responsables regionales y la pesada atmósfera policíaca impuesta alrededor del estadio Kirov han pesado negativamente sobre el desarrollo de los trabajos. Pero también la voluntad de ciertas corrientes políticas de mantenerse aparte y no participar. A pesar de ello, el balance que se puede hacer es muy positivo, con la adopción de decisiones que  van a contribuir a consolidar los movimientos sociales y su diversidad.

La Unión de Comités de Coordinación de Rusia (SKS) ha celebrado en Ivé su conferencia el 13 de julio, la víspera de la inauguración del Foro Social. La SKS fue creada hace un año, con ocasión del I Foro Social ruso, a iniciativa de los distintos comités regionales surgidos de las luchas contra los recortes de las ventajas sociales que beneficiaban hasta ahora a distintas capas de la población (jubilados, inválidos..). Este movimiento existe hoy en 20 regiones y desarrolla su actividad en  diferentes direcciones, en especial en la lucha por el derecho a la vivienda. La SKS es una coalición de comités autónoma de los partidos políticos, que en numerosas regiones han intentado controlarlos, aunque sin éxito. Hoy esa fase ha sido superada y la SKS ha reforzado su autonomía con la creación de un grupo de trabajo coordinador con los principales dirigentes regionales.

La mañana del 15 de julio, la asamblea plenaria ha mostrado el espíritu combativo de los participantes. Se ha aprobado una moción denunciando la represión y en solidaridad con los militantes arrestados en su camino al Foro. Al terminar, los participantes en la Contracumbre han intentado ejercer su derecho a manifestarse. A pesar de la prohibición, los manifestantes se han agrupado tras las pancartas y banderas para dirigirse desde el estadio Kirov al crucero Aurora. A pesar de su determinación, no han podido romper la barrera de las fuerzas especiales antidisturbios OMON, en parte porque no se han podido sumar fuerzas con la manifestación organizada a la misma hora por el Partido Comunista de Rusia. A pesar de todos los esfuerzos, los manifestantes del Foro no han podido salir del estadio, mientras coreaban consignas: !Rusia no es una cárcel!, ¡Libertad para todos los detenidos!. Gracias a la sangre fría de los participantes, no ha habido detenciones. Pero 30 manifestantes de la marcha organizada por el PCR han sido detenidos, entre ellos ILSA Ponomarev, dirigente del Frente de Izquierdas, y Sergei Udaltsov, de la Vanguardia de la Juventud Roja.

Las iniciativas y las acciones se han continuado el día 16. Por la mañana a primera hora unas decenas de miembros de la Red contra el G–8 han organizado una sentada en la Prospectiva Nevski. 37 personas han sido detenidas, entra ellas ciudadanos rusos, bielorusos, ucranianos, polacos, búlgaros, alemanes y británicos. Otra acción contra la guerra de Chechenia también ha finalizado con detenciones por parte de la policía. Por la tarde, una manifestación de militantes anarquistas, disfrazados de payasos, en la Isla Vassilievski ha sido interrumpida por las fuerzas del orden, que también han hecho detenciones. La organización de apoyo legal Team se ha visto completamente desbordada por esta oleada represiva de la policía, pero continúa su labor de apoyo a los detenidos.


[1].– Marina Klimova es investigadora del Instituto Acción Colectiva de Moscú.