Irak resiste

 

EEUU busca 'legalizar' en la ONU su presencia militar en Iraq después del 30 de junio de 2004

Por Loles Oliván
CSCAweb, 31/03/04

"El secretario de la ONU da un nuevo respaldo internacional al plan promovido por EEUU para afianzar su tutela colonial sobre Iraq y avala formalmente al títere Consejo Gubernativo iraquí designado por las autoridades de ocupación como interlocución política de la ONU, mientras Bremer ordena la creación del nuevo ministerio de Defensa iraquí y de un nuevo ejército que deberá operar bajo mando militar estadounidense y 'luchar contra el terrorismo'"

El pasado viernes, 26 de marzo un nuevo equipo de la Organizaciones de Naciones Unidas (ONU) llegó a Iraq para supervisar los preparativos que conduzcan a la apertura formal de la transición de Iraq fijada por EEUU para el 30 de junio. Ya el pasado febrero y a requerimiento del dirigente shi'í as-Sistani, un primer equipo de la ONU se trasladó al país ocupado para evaluar -y finalmente desestimar- la posibilidad de poner en marcha un proceso electoral antes de esa fecha [1].

En esta ocasión, el equipo enviado por el secretario general de la ONU Kofi Annan tiene como misión mantener nuevos contactos con las autoridades civiles de la ocupación, con el Consejo Gubernativo (CG) iraquí y con el propio as-Sistani a fin de dar soporte internacional al proceso político que comenzará el próximo 30 de junio. Con ello, el secretario de la ONU da un nuevo respaldo internacional al plan promovido por EEUU para afianzar su tutela colonial sobre Iraq y avala formalmente al títere CG designado por el procónsul Bremer en junio de 2003 como interlocución política de la ONU. No en vano, la llegada de este nuevo equipo a Iraq responde a los requerimientos de los miembros del CG, quienes, a falta de legitimidad popular en el interior del país, requieren tanto como la propia Administración Bush obtener el reconocimiento de la ONU para poder presentarse interna e internacionalmente como el cuerpo político legal del Iraq ocupado.

EEUU, la ONU y as-Sistani

Esta visita se produce además en el nuevo contexto que ha creado la aprobación forzada del texto constitucional provisional por parte del CG [2], y que ha sido rechazada por el propio as-Sistani. Lejos de denunciarlo por atentar contra los intereses nacionales de Iraq (el texto sienta las bases para el mantenimiento indefinido de la presencia militar de EEUU en Iraq, así como para la venta de los recursos del país al capital multinacional y la privatización del Estado), as-Sistani ha aducido que, de acuerdo a la fragmentación del país en base a divisiones confesionales y étnicas que impone igualmente la nueva constitución, no se otorga a la mayoría shi'í -a la que dice representar- una representación suficiente. El dirigente espiritual iraní asentado ahora en Iraq ya ha anunciado que no se reunirá con los representantes de Kofi Annan "[...] a menos que la ONU declare que la denominada Ley Fundamental no es de obligada aceptación por los iraquíes" [3]. As-Sistani pretende desencadenar la amenaza de la ilegitimidad de todo el proceso de transición si no obtiene satisfacción a sus exigencias, comprometiendo, con ello, el ya de por si controvertido papel de la ONU en Iraq al forzar las claves de la intervención de la organización internacional no solo como respuesta a las demandas de la Administración Bush sino como mecanismo para obtener contrapartidas de poder en beneficio propio.

Rehabilitar la ONU como fuente de legalidad

Mientras la ONU ejerce un precario y limitado papel garante bajo el auspicio de EEUU, el Departamento de Estado estadounidense ha anunciado que ha encontrado la "fórmula legal" para que las tropas estadounidenses mantengan el control militar en Iraq [4].

A falta de legitimidad, dado el limitado papel otorgado por EEUU a la ONU como mero supervisor del proceso político de la llamada transición, pero fundamentalmente ante las reticencias de los miembros del Consejo de Seguridad (CS) a aceptar su reclamada participación militar en la ocupación iraquí sin obtener mayores cotas de participación en la gestión económica de la reconstrucción del país, la Administración estadounidense pretende ahora retomar el referente de la resolución 1511 del CS emitida en octubre de 2003 [5] como "base legal" para garantizar el mantenimiento de la presencia de las tropas propias y de sus aliados en el país ocupado. Merece la pena señalar que el texto de dicha resolución (que fue aprobada unánimemente por los miembros del CS y que implicaba la aceptación de la ocupación por parte de dicho CS) abría la vía a una muy previsible y ahora confirmada utilización a su favor por parte de EEUU para seguir afirmando la legalidad de la presencia militar de EEUU y de sus aliados en el Iraq ocupado y para avalar la vinculación progresiva de nuevas tropas militares de terceros países. Para que la vigencia de esta resolución pueda ser reclamada, EEUU podría proponer en un futuro próximo su revisión y nueva aprobación antes de que en octubre de 2004 expire el término de su vigencia.

Annan indicaba el lunes, 29 de marzo al diario italiano Corriere della Sera que los miembros del CS de la ONU "[...] están trabajando para [la creación] de una fuerza multinacional, bajo mando unificado, que pueda colaborar con el gobierno soberano de Iraq y contribuir a la seguridad en el país" [6].

Por su parte, también este lunes, el secretario general de la OTAN, Jaap de Hoop Scheffer, afirmaba que la Alianza podría involucrarse en Iraq si el CS aprueba una resolución en tal sentido, resolución que calificó de "políticamente esencial" ]7].

Legalizar la presencia militar

Al retomar el referente de la resolución 1511, la Administración Bush retorna nuevamente a un pretendido marco legal internacional de la ONU, ampliamente violado por la invasión ilegal de Iraq pero que requiere rehabilitar como fuente de legalidad para obtener un respaldo internacional que de respuesta a dos frentes adversos a su proyecto de control sobre Iraq.

Por una parte, EEUU pretende justificar el mantenimiento de la presencia militar estadounidense y sus aliados una vez que se produzca la salida formal de la Autoridad Provisional de la Coalición (APC) el 30 de marzo. Será entonces cuando se abra el proceso de tutela colonial a través de la creación de un nuevo Consejo Interino iraquí que, de acuerdo con el texto de la nueva constitución impuesta por las autoridades de ocupación, deberá asumir y aceptar que sean las "fuerzas de la coalición internacional" quienes retengan el control de la seguridad en el país [8].

Para el Departamento de Estado y el Pentágono, la mencionada resolución, en su punto 15, otorgaría la autoridad al comando militar estadounidense para retener el control de Iraq hasta que culmine el proceso de "devolución de la soberanía" a Iraq, que habrá de concluir, no el 30 de junio de 2004, sino el 31 de diciembre de 2005, fecha en la que un nuevo gobierno iraquí deberá dar por concluido el periodo de transición.

Solventar el 'impasse' internacional creado por Zapatero

Por otro lado, EEUU pretende dar respuesta al impasse creado por la posición del nuevo presidente de gobierno español, Rodríguez Zapatero, tras el triunfo del PSOE y asociada a la promesa electoral de retirar las tropas de ocupación españolas estacionadas en Iraq si para el 30 de junio la ocupación iraquí no ha pasado al control de la ONU.

Ya el pasado 24 de marzo, en su primer encuentro con Zapatero en Madrid, Powell ofreció buscar una solución a través de la ONU para que el Estado español retenga su presencia militar en Iraq [9]. A falta de tiempo y de condiciones para promover una nueva resolución que difícilmente contaría con la aprobación de todos los cinco miembros del CS sin haberse alcanzado un acuerdo previo que garantizase la participación de Francia, Rusia e incluso de China y Alemania en la reconstrucción de Iraq y en sus beneficios asociados, la Administración Bush intentará ganar tiempo reactivando la resolución 1511 a fin de obtener el respaldo del gobierno español para evitar la salida de las tropas españolas de Iraq y, tras ellas, muy probablemente, las de los países latinoamericanos que operan bajo mando militar español en el país ocupado.

'Orden 67': nuevo ministerio de Defensa iraquí

Paralelamente a las tareas diplomáticas orientadas a rehabilitar un papel de la ONU acorde con los intereses inmediatos de EEUU, Bremer sigue ejecutando órdenes que operan en la configuración de un nuevo Iraq a la medida de los planes estadounidenses a largo plazo.

Si ya el pasado noviembre EEUU impuso en el acuerdo firmado por Bremer y los miembros del CG cláusulas no reveladas que garantizarían el mantenimiento de la presencia indefinida de las tropas y dispositivos militares estadounidenses y británicos en al menos seis bases militares distribuidas en todo el país [10], haciendo de su presencia militar indefinida el principal garante de la influencia estadounidense en un Iraq tutelado, el pasado 24 de marzo el procónsul estadounidense anunció al CG la creación por orden de la APC de un nuevo ministerio de Defensa iraquí, así como de un Comité de Seguridad Nacional [11].

Por su contenido y formulación, la Orden 67 reafirma la determinación de EEUU de retener el control militar sobre Iraq y sobre las instituciones creadas fruto de la ocupación. Así, el nuevo ministerio de Defensa iraquí, que "estará sujeto al administrador de la APC" [12], estará dotado de unas nuevas Fuerzas Armadas (40.000 efectivos) una vez que su entrenamiento a cargo del Pentágono haya concluido el próximo otoño, e igualmente quedará bajo su cargo los denominadas Cuerpos de Defensa Civil, estructura paramilitar ya operativa bajo mando estadounidense en las zonas urbanas del país y cuyo número aumentará hasta otros 40.000 efectivos.

En abierta conexión con la rehabilitación de la resolución 1511 que el Departamento de Defensa pretende activar para legalizar el mantenimiento de la ocupación militar en Iraq, y en combinación con la necesidad de hacer frente por la vía militar a la resistencia iraquí que opera cada día más activamente contra la ocupación [13], Bremer ha promulgado la creación de un nuevo ejército vinculándolo a la "lucha contra el terrorismo":

"[...] A la luz de la actual situación de emergencia en el interior de Iraq y de acuerdo con el declarado deseo de Iraq de unirse a otras naciones para ayudar a mantener la paz y la seguridad y para luchar contra el terrorismo en el periodo de transición conforme a las provisiones de la resolución 1511 del CS de la ONU, todos los efectivos entrenados de las Fuerza Armadas iraquíes, incluidos los Cuerpos de Defensa Civil iraquí cuando sean trasferidos a las Fuerzas Armadas Iraquíes, deberán estar en todo momento bajo el control operativo del Comandante de las Fuerzas de la Coalición con el fin de efectuar operaciones combinadas y proporcionar otros apoyos de acuerdo con las Órdenes 22 y 28 y otras órdenes futuras de la APC. El ministro de Defensa ejercerá el control administrativo de los efectivos de las Fuerzas Armadas iraquíes bajo el control del Comandante de la Fuerzas de la Coalición." [14]

La Orden 67 prevé igualmente que Bremer sea quien nombre el cargo de ministro de Defensa, el de jefe de las Fuerzas Armadas y el de la nueva figura de asesor de Seguridad Nacional para un también nuevo Comité de Seguridad Nacional. Estos cargos tendrán asignado un mandato de tres años que en el caso del también nuevo cargo de inspector general, se prolongará hasta cinco. Para el cargo de ministro de Defensa ya se ha avanzado el nombre de un oficial kurdo con buenas relaciones con Turquía, con cuyo Ejército habría colaborado en la erradicación de la presencia armada del PKK kurdo-turco en el Kurdistán iraquí.

Igualmente, EEUU ha nombrado al general Ricardo Sánchez comandante en jefe de las tropas de ocupación estadounidenses y aliadas una vez que la APC haya trasferido la autoridad al Consejo Interino iraquí. Las Fuerzas Armadas iraquíes y los Cuerpos de Defensa Civil deberán operar bajo su mando [15].

Notas:

1. Véase en CSCAweb: EEUU fuerza la aprobación por el Consejo Gubernativo iraquí de un borrador de Constitución, mientras alienta la implicación de la ONU y la OTAN en la ocupación.

2. Véase en CSCAweb: Rubricada la Constitución provisional para Iraq: libertades formales, ocupación efectiva

3. Jordan Times, 29 de marzo de 2004.

4. The New York Times, 28 de marzo de 2003.

5. Phyllis Bennis: 'La resolución 1511: una victoria pírrica para la Administración Bush' - Resolución 1511 de Consejo de Seguridad de la ONU sobre Iraq, op. cit.

6. Citado en al-Jazeera.net, 29 de marzo de 2004.

7. Associated Press, 29 de marzo de 2004.

8. Véase en CSCAweb: Rubricada la Constitución provisional para Iraq: libertades formales, ocupación efectiva

9. La Vanguardia, 25 de marzo de 2004.

10. Véase en CSCAweb: Un acuerdo secreto entre EEUU y el Consejo Gubernativo iraquí garantizaría la presencia militar indefinida anglo-estadounidense en Iraq.

11. "L. Paul Bremer Administrator Coalition Provisional Authority Remarks to Governing Council Baghdad City Council March 24, 2004"

12. "Coalition Provisional Authority Order Number 67: Ministry of Defense"

13. "Una media diaria de una baja mortal estadounidense en combate, sitúa a marzo entre los meses más sangrientos para las fuerzas de ocupación en Iraq", en Diario de la resistencia iraquí - Marzo de 2004

14. "Section Four: Misión and Organization. Punto 2 de la "Coalition Provisional Authority Order Number 67: Ministry of Defense".

15. The New York Times, 28 de marzo de 2004.

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