Irak resiste

 

Diario de la resistencia iraquí

Jornada mortífera en vísperas de la "transferencia de poder"

El partido Ba'as reivindica los ataques del jueves, mientras EEUU procura adjudicar la autoría a al-Qaeda

CSCAweb, 25/06/04

El jueves 24, a seis días de que produzca el denominado "traspaso de poder" por parte de la Autoridad Provisional de la Coalición (APC) al nuevo "gobierno transitorio" iraquí designado por EEUU y presidido por Iyad Allawi, la resistencia armada volvió a dar muestras de su fortaleza con una nueva cadena de acciones coordinadas contra las fuerzas de ocupación y las nuevas fuerzas de seguridad iraquíes creadas y entrenadas por EEUU.

El mando estadounidense se ha mostrado contradictorio a la hora de adjudicar la autoría de las acciones de este jueves, inicialmente atribuidas a sectores baasistas por el gran número de efectivos combatientes que implican (en algunas ciudades, se trata ya de operativos de combate regulares). Tras una inmediata reivindicación en internet por parte del jordano ar-Zarqaw, (identificado como responsable de al-Qaeda en Iraq), en la noche del jueves, el partido Ba'as reivindicaba en la fiable web al-Basrah (www.albasrah.net) la autoría de las acciones, mientras EEUU procuraba señalar a al-Qaeda como la organización que estaría detrás de todos los ataques del día, con el claro propósito de caracterizar la insurgencia en Iraq y la previsible ofensiva guerrillera previa al 30 de junio con un fenómeno de terrorismo protagonizado por elementos exteriores. Asimismo, EEUU y el propio nuevo gobierno de Allawi podrían estar interesados en una campaña de ataques indiscriminados que justificaran la continuidad o ampliación de una presencia de tropas extranjeras o las medidas ya anunciadas de endurecimiento represivo por parte de Allawi (véase: Medidas contrainsurgentes de Allawi. EEUU y Gran Bretaña propondrán en la Cumbre de Estambul de la OTAN que un contingente del Cuerpo de Reacción Rápida de la Alianza se despliegue en Iraq).

Por una parte, por algunos de los bjetivos de estas operaciones múltiples -instalaciones de los nuevos cuerpos de seguridad, comisarías (en Ramadi, Mahawil y Mosul) y academias de policía (en Mosul)- se desprende que la resistencia armada se está centrando en atacar los pilares de la nueva seguridad iraquí que la APC pretende establecer para el proceso de transición. Con ello, la resistencia vuelve a dejar constancia de que todos aquellos que colaboren con la ocupación están expuestos a ser objetivos de sus acciones armadas. Sin embargo, al menos los abiertos combates -ya de posiciones- en Faluya y Baqubah -en esta ciudad, iniciados a medianoche del miércoles al jueves y en los que los ocupantes han recurrido a bombardeos aéreos por parte de aviones de combate (en la foto, un avión estadounidense lanza proyectiles por encima de un helicóptero cerca del estadio de Baqubah -al-Jazeera)- son la prolongación de los choques habidos en el transcurso de esta semana (véase el 'Diario' de días anteriores). Allawi ha desestimado que se tratara de operaciones coordinadas, según recoge al-Jazeera.

Muy significativamente, el periódico electrónico en árabe Elaph.com asegura en su edición de este viernes que, al igual que anteriormente ha ocurrido en otras ciudades del centro-sur del país, los seguidores del clérigo shi'í as-Sadr del Ejército del Mehdi en Medina as-Sadr se, en Bagdad, podrán fin a sus enfrentamientos con las fuerzas de ocupación tras un acuerdo logrado con el nuevo gobierno de Allawi, lo que vendría a corroborar el acercamiento entre ambas partes que ha venido apareciendo en la prensa árabe. El propio as-Sadr corroboraba este jueves esta posición.

Los ataques se produjeron en Mosul (norte de Iraq), Baquba, Mahawil y Ramadi (centro), así como en diversas zonas de Bagdad. Además, los enfrentamientos armados entre combatientes iraquíes y las fuerzas de ocupación estadounidenses se intensificaron en Faluya donde el sábado pasado el ejército de ocupación estadounidense lanzó un nuevo ataque aéreo con misiles contra una vivienda de civiles iraquíes que reabrió una nueva fase de enfrentamientos directos tras dos meses de relativa calma en la ciudad. El balance total de estas operaciones asciende al menos a 99 muertos (la mayoría, en Mosul), entre ellos tres soldados estadounidenses, y 268 heridos, según las nuevas autoridades sanitarias iraquíes y que no incluyen a los heridos estadounidenses.

Las tres nuevas bajas mortales en combate estadounidenses elevan a 527 el número de militares de EEUU caídos en ataques o enfrentamientos con la resistencia desde el 1 de mayo de 2003, 31 en el transcurso del mes de junio.

En Mosul habrían muerto al menos 62 personas en diferentes ataques contra instalaciones de la policía. Un coche bomba hizo explotar las instalaciones de la Academia de Policía matando a 50 personas, entre ellas un soldado estadounidense y un guardia de seguridad privado, y otras 170 heridas, entre ellos tres soldados estadounidenses, según fuentes hospitalarias de la ciudad.

En Baqubah, a 60 kilómetros al noroeste de la capital (capital de la provincia de Diyala), los intensos combates se cobraron dos nuevas bajas mortales estadounidenses y otros siete soldados resultaron heridos, en el transcurso de una emboscada con armas ligeras y granadas según fuentes militares de la ocupación, que han indicado que entre 20 y 30 insurgentes fueron muertos por susefectivos. Miembros de la resistencia armados con armas automáticas y lanzacohetes ocuparon dos comisarías de policía y atacaron la vivienda del jefe de policía de la provincia. Un avión de combate estadounidense lanzó tres bombas de 500 libras (227 kilogramos) contra una posición de la resistencia cerca del estadio de fútbol. En el principal hospital de la ciudad los heridos se amontonaban.

En el distrito de ad-Dora, en el sur de Bagdad, una explosión contra un puesto de control militar vigilado por tropas estadounidenses y efectivos iraquíes mató a cuatro soldados iraquíes (identificados como "guardias nacionales") y al menos otro soldado estadounidense resultó herido.

En Ramadi, a 110 kilómetros al oeste de Bagdad y capital de la provincia de al-Anbar, combatientes de la resistencia lanzaron granadas contra dos comisarías de policía y una de las sedes gubernamentales. Ocho personas resultaron muertas, otras 13 heridas, según fuentes hospitalarias, y varios coches de policía y la instalación fueron destruidos.

En Mahaweel, al este de Bagdad, un número indeterminado de nuevos soldados iraquíes fueron alcanzados por disparos de bala en otra operación contra una comisaría. El edificio fue incendiado posteriormente.

En Faluya, cuyo efectivo control sigue a manos de la resistencia aunque formalmente se haya delegado la seguridad en la Brigada Faluya, a cuyo mando está un antiguo oficial del ejército iraquí, las fuerzas de ocupación volvieron a cercar la ciudad desde posiciones del exterior mientras los helicópteros Apache patrullaban de manera permanente sobre la ciudad. Los combates se prolongaron en la periferia este de la ciudad durante dos horas. Un helicóptero Cobra del Cuerpo de Marines estadounidense fue abatido, aunque se ha informado que sus dos tripulantes resultaron ilesos. Igualmente, fuerzas estadounidenses abrieron fuego contra un convoy en el que viajaban el alcalde de la ciudad y el jefe de policía cuando pretendían dirigirse hacia el mando estadounidense para establecer una nueva negociación de tregua, finalmente alcanzada en la tarde del jueves.

[Fuentes: News Release CJTF-7 Coalition Press Information Center, Nota Informativa 04-06-22C, Associated Press, Reuters, Al Fanar, Revista de Prensa Árabe y al-Jazeera. Traducción y elaboración: CSCAweb.]

Volver