Sin posibilidad de un acuerdo, se hunde el proyecto de una nueva constitución

Devastador ataque de la resistencia en Irak provoca al menos 40 muertos

Por Kim Sengupta
The Independent
La Jornada, 26/08/05
Traducción de Gabriela Fonseca

Bagdad, 25 de agosto. Los intentos por adoptar una nueva constitución iraquí se hundieron este jueves en el caos al tiempo que una nueva ola de violencia se ha desatado a todo lo largo del país e insurgentes perpetraron un devastador ataque en Bagdad.

Al menos 40 personas -incluidos 13 policías y un estadounidense- murieron después de que decenas de hombres armados y enmascarados ocuparon partes de la capital, y el presidente Jalal Talabani escapó a un intento de asesinato en que murieron ocho de sus guardaespaldas y 15 más resultaron heridos.

Este jueves también fueron descubiertos los cuerpos de 36 hombres -que se cree eran chiítas o kurdos- en el río seco Kut, cerca de la frontera iraní, en Badrah. Todas las víctimas fueron ejecutadas de disparos en la cabeza.

Como para mostrar una nueva dimensión en la continua crisis en torno a la constitución iraquí, hoy se registraron combates entre grupos chiítas en desacuerdo sobre el tema, y que dejaron un saldo de nueve muertos.

Funcionarios sunitas se oponen con vehemencia a la estructura federal que propone la actual redacción del documento, y afirman que éste es un pretexto de chiítas y kurdos para apropiarse el norte y sur del país, ricos en yacimientos petrolíferos.

Sin embargo, el clérigo chiíta radical, Moqtada Sadr y su ejército Mehdi, quienes tienen su mayor influencia en el centro de Irak, relativamente pobre en recursos, también están opuestos al federalismo, y el jueves se enfrentaron con los chiítas favorables a la constitución del grupo Badr, encabezado por Abdul Aziz Hakim, en una serie de tiroteos en poblados chiítas al sur y este de Irak.

En tanto, la confusión rodeaba al proceso político según versiones contrarias de funcionarios gubernamentales sobre la redacción de la constitución. En un momento, el vocero gubernamental, Laith Kubba, declaró que ya se habían acordado algunos cambios en los documentos y que éstos serían sometidos a votación al final de la jornada. "Para cuando concluya el día, tendremos la versión final. Será aprobada. La Asamblea Nacional, entonces, le pondrá su sello", afirmó el funcionario.

Sin embargo, Bishro Ibrahim, vocero de la Asamblea Nacional, sostuvo que no se llegó a acuerdo alguno y que no había planes de convocar a la Asamblea.

Durante el día, los partidos árabes sunitas insistieron en que no aceptarían acuerdo alguno sobre el federalismo.

Las negociaciones continuaron por la noche sin que hubiera posibilidades de llegar a un acuerdo pues si bien se hicieron algunas enmiendas, aún se conservaba la referencia al federalismo, y se pensaba presentar cuanto antes el documento a la Asamblea, aunque se postergó hasta el domingo la votación sobre su adopción.

Los chiítas y kurdos tienen una mayoría intrínseca en la Asamblea Nacional y les será fácil obtener un voto favorable. La constitución, después, será objeto de referendo y podrá ser bloqueada si se obtienen dos tercios de votos negativos en al menos tres de las 18 provincias de Irak.

Negociadores sunitas amenazaron el jueves con interponer acciones legales si la constitución es adoptada como está actualmente. Hussein Falluji, miembro sunita del panel de redactores, dijo: "si esta constitución sigue incluyendo el federalismo, debe ser arrojada al bote de la basura y redactarse de nuevo".

El presidente George W. Bush anunció un nuevo envío de más tropas a Irak, anticipándose a un resurgimiento de violencia en el momento en que se celebre el referendo. El jueves, el mayor del ejército, general Rick Lynch, afirmó que las fuerzas de la coalición están listas para enfrentar la situación.

Sin embargo, los ataques de hoy en Bagdad parecen haber tomado por sorpresa a alas fuerzas estadounidenses e iraquíes. Decenas de pistoleros enmascarados irrumpieron en los distritos de Khadra y Jamma, de Bagdad, y mataron a supuestos "colaboracionista". Policías que llegaron al lugar cayeron víctimas de coches bomba.

Lynch dijo que los insurgentes parecen "tener la habilidad de escoger bien el momento y lugar de sus ataques. Han usado una táctica de enjambre y perpetrado un complejo ataque contra civiles y oficiales de la policía iraquí".

Una fuente de alto rango de la policía iraquí señaló: "Los insurgentes se están volviendo cada vez más osados. No esperábamos este ataque y tuvimos que luchar duramente. Al final, salimos vencedores".

En los episodios de violencia entre chiítas, combatientes del Ejército Mehdi y del grupo Badr incendiaron oficinas de ambos grupos e intercambiaron fuego de cohetes y rifles automáticos. Sadr exigió a Hakim, líder del Consejo Supremo de la Revolución Islámica en Irak, que condene la violencia, pero también hizo un llamado a la unidad de todos los chiítas y afirmó: "No olvidaré este ataque. Pero Irak está pasando por una fase crítica y difícil que requiere de unidad".