Irak resiste

 

El borrador para una nueva Constitución iraquí

"Toda operación política que se desarrolle bajo la dominación y ocupación estadounidenses de Iraq será sospechosa y no servirá a los intereses del país"

Comunicado de la Asociación de Ulemas Musulmanes
Bagdad, 24/08/05
IraqSolidaridad, 06/09/05
Traducción del árabe de Houmad El Kadiri

"Exigimos a la Administración estadounidense que abandone su arrogancia y deje de imponer procesos políticos que no solucionan nada al pueblo iraquí; que ponga fin a su ocupación fijando un calendario para ello."

Hemos insistido siempre en que toda operación política que se desarrolle bajo la dominación y ocupación estadounidenses de Iraq será sospechosa y no servirá a los intereses del país. Visto el proceso en curso para la elaboración de la [nueva] Constitución, y al igual que en situaciones anteriores, debemos indicar que teníamos razón. En relación a este asunto, hemos advertido en declaraciones anteriores que el momento actual, extremadamente complejo, no es adecuado para sacar adelante una Constitución que tenga el apoyo popular y que garantice la unidad de Iraq y sus intereses supremos, y que lo mejor era aplazar [su redacción] hasta después de la retirada de las fuerzas de ocupación.

El proceso constitucional actual allana el camino hacia la fragmentación y la división del país, oculta su identidad verdadera y despilfarra sus recursos, además de otras graves consideraciones. Tampoco ha asegurado un mínimo de consenso nacional necesario para adquirir legitimidad. Este fracaso es tanto de la Administración [estadounidense] que supervisa el proceso y que ha intervenido claramente en él y que es incapaz de sacar a Iraq de su impasse, como de la Asamblea Nacional y del actual gobierno actual [iraquíes].

Fin de la arrogancia estadounidense

Exigimos a la Administración estadounidense que abandone su arrogancia y deje de imponer procesos políticos que no solucionan nada al pueblo iraquí; que ponga fin a su ocupación fijando un calendario para ello, y que ponga la cuestión de Iraq entre las manos de Naciones Unidas a fin de que éste organismo se encargue del proceso político y, en consecuencia, el pueblo iraquí tenga libertad de elaborar su Constitución sin las presiones ni las intervenciones de nadie. De lo contrario, la Administración estadounidense se histórica, moral y legalmente responsable de lo que pueda ocurrir en Iraq, así como de las consecuencias peligrosas que el proceso actual podría atraer. Asimismo, hacemos responsable a la Asamblea Nacional de las consecuencias históricas, legales y nacionales derivadas de la aprobación de esta Constitución.

Nuestra Asociación sigue de cerca el curso de los acontecimientos y en un futuro próximo, cuando sea aprobado el borrador [definitivo] [1], emitirá una nueva valoración. Hacemos un llamamiento al pueblo para que apoye nuestro planteamiento respecto a esta Constitución, a que no se deje engañar por el plazo que le fue otorgado para la celebración del referéndum, puesto que todo el proceso, al igual que sus anteriores etapas, refleja la falta de credibilidad de los que lo han promovido: si en el contexto actual llegará a realizarse el referéndum [de ratificación de la Constitución previsto para el 15 de octubre] no va a ser diferente de aquéllas [fases] precedentes [2].

Secretariado general de la Asociación de Ulemas Musulmanes


Notas de IraqSolidaridad:

1. Véase en IraqSolidaridad: Carlos Varea: El borrador de Constitución: fin del Estado iraquí y de los derechos ciudadanos de su población

2. Forzado por la aparición de la actividad armada, EEUU, por medio de Paul Bremer, imponía en noviembre de 2003 un proceso de institucionalización interna sin fin de la ocupación que se iniciaba con la disolución de la Autoridad Provisional de la Coalición y la cesión formal de soberanía a una nueva instancia iraquí en junio de 2004 y que ha seguido con las elecciones de enero de 2005. Según el calendario estadounidense, el 15 de octubre se ha de refrendar la nueva Constitución (que será igualmente transitoria) y en diciembre se celebrarán nuevas elecciones generales para formar un gobierno, ya definitivo, antes de enero de 2006.

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