Medio Oriente

 

¿Hasta cuándo los judíos vamos a seguir permitiendo que ese ejército y ese Estado sigan asesinando en nuestro nombre?

¿Abrazados judíos y palestinos?

Por Néstor Kohan
Lista de la Universidad de Buenos Aires, 28/07/06

Sin insultar a nadie y respetando las diversas posiciones ideológicas de esta lista de la Universidad de Buenos Aires (UBA), me pregunto:

¿Hasta cuándo los judíos vamos a seguir permitiendo que ese ejército y ese Estado sigan asesinando en nuestro nombre?

En tiempos de Jorge Rafael Videla, en Argentina se asesinaron 30.000 personas. Según estimaciones de organismos de derechos humanos, aproximadamente 1.500 de esas personas secuestradas, torturadas y desaparecidas eran de origen judío.

Pregunta obvia: ¿el Estado israelí, el servicio secreto MOSSAD, el ejército de Israel, etc,etc... –supuestos "defensores del judaísmo a nivel mundial"– hicieron algo para protegerlas?

Sencillamente nada.

Siguieron apoyando con una cínica sonrisa en la boca a Videla, Massera y compañía –generales, almirantes y comodoros de confesa ideología antisemita– como si nada sucediera. Lo cual demuestra que su supuesta "defensa del judaísmo" es una simple falacia del peor tinte propagandístico.

Lo mismo hicieron en Chile con el general Augusto Pinochet (otro nazi confeso). El Estado de Israel –al menos sus clases dominantes, no los trabajadores– fue su estrecho aliado. Poco le importó que Pinochet y sus secuaces hayan copiado, además de sus técnicas de tortura y exterminio, hasta el uniforme del ejército alemán de Hitler. Lo mismo sucedió con la Nicaragua de Somoza. Lo mismo en Sudáfrica con el régimen terrorista y neonazi del apartheid, defensor de la "pureza racial" frente a los negros. Israel siempre estuvo a su lado.

Quizás me equivoco. Pero tengo la sospecha que si el ejército israelí nos tuviera a tiro o dentro del radio y la distancia de la mira, no dudaría un minuto en apretar el gatillo y liquidarnos o a lo sumo en mandarnos a prisión, como ya lo ha hecho con numerosos compañeros –socialistas, comunistas, trotskistas, etc– de Israel que, enrolados coactivamente en ese ejército que no los representa, se niegan valientemente a disparar contra el pueblo palestino.

Y frente a aquellos que aprovechan el repugnante fascismo israelí para sacar a relucir viejos prejuicios antisemitas (identificando falsa y tramposamente Estado sionista = estado judío) prefiero recordar un emocionante, entrañable y conmovedor abrazo que viví entre las madres palestinas y jóvenes marxistas judíos (algunos de Israel) en una escuela de formación política del Movimiento Sin Tierra (MST) de Brasil. ¡Abrazados palestinos y judíos!

¿Abrazados judíos y palestinos?

Sí, es posible, a condición de rechazar el chantaje de ese ejército invasor, torturador y salvaje, al servicio de los intereses más siniestros de Estados Unidos en Medio oriente.

¿Hasta cuándo vamos a permitir que sigan masacrando gente en nombre nuestro?