Amnistía Internacional denuncia:

Israel cometió crímenes de guerra en Líbano

Haaretz, diario de Israel, 23/08/06
Traducido por Iván Vanney desde Israel para Socialismo o Barbarie

Londres.- En un reporte publicado el miércoles, Amnistía Internacional acusó a Israel de haber cometido crímenes de guerra, habiendo violado la ley internacional destruyendo infraestructura civil durante la reciente guerra contra las guerrillas de Hezbollah.

Esta organización de derechos humanos presento evidencia inicial, incluyendo datos sobre los ataques israelíes, el alto numero de victimas civiles, el daño provocado y las declaraciones de funcionarios israelíes que “indican que este tipo de destrucción fue parte de una estrategia militar, más que de «daños colaterales»”.

Amnistía Internacional, que envió delegados a monitorear los combates en ambos lados, Israel y Líbano, dijo que Israel violo leyes internacionales que prohíben los ataques directamente dirigidos a civiles y los ataques indiscriminados y desproporcionados.

La organización instó a Naciones Unidas a investigar si ambos combatientes, Israel y Hezbollah, violaron la ley internacional.

Un funcionario del gobierno israelí dijo en Jerusalén que su país actuó conforme a la ley: “Israel respetó todas las leyes internacionales, teníamos abogados en todas nuestras reuniones. Todo lo que hicimos fue antes meticulosamente analizado para corroborar que no viole la ley internacional”, dijo el funcionario que no estaba autorizado para dar declaraciones a la prensa sobre el tema, por lo cual habló bajo anonimato.

Israel sufrió la condena internacional cuando atacó objetivos en el sur de Líbano horas despuís de que guerrilleros de Hezbollah mataron a tres soldados israelíes y capturaron a dos en una incursión en la frontera el 12 de julio.

Las Fuerzas de “Defensa” Israelíes dijeron que entre la incursión y el cese de fuego del 14 de agosto, Israel realizo más de 7.000 ataques aéreos contra objetivos libaneses y aproximadamente 2500 bombardeos por parte de la marina.

UNICEF (Organización de las Naciones Unidas para la Infancia) estima que al menos 1.183 personas murieron, en su gran mayoría civiles y aproximadamente un tercio de ellos eran niños. Por su parte, el Alto Consejo Civil de Líbano declaró que 4.054 personas fueron heridas y 970.000 desplazadas de sus hogares.

Funcionarios de Naciones Unidas reportaron que aproximadamente 15.000 hogares de civiles fueron destruidos.

El informe de Amnistía Internacional decía que “la destrucción se extendió sobre edificios de departamentos, casas, centrales eléctricas y servicios de agua potable, rutas, puentes, fabricas y puertos”, lo que, sumado a declaraciones de oficiales israelíes, “indican una política de castigo contra el gobierno libanés y la población civil para que se vuelvan contra Hezbollah”.