Medio Oriente

 

La ONU acusa a Israel de empleo de bombas racimo contra civiles

Por Ivan Vanney
Desde Israel para Socialismo o Barbarie, 20/09/06

Las bombas racimo son misiles que expiden municiones, bombas y explosivos antes de impactar. Estos proyectiles o materiales explosivos expulsados por las bombas racimo son letales incluso cuando no explotan al impactar, ya que su aspecto resulta llamativo para las personas. Especialmente los niños suelen provocar su detonación al tocarlos. De esta forma, las bombas de racimo esparcen por todo el territorio minas anti-persona.

Naciones Unidas denuncio el vergonzoso empleo por parte de Israel de bombas racimo en su última invasión a Líbano. Declaró que al menos 350.000 bombas racimo sin explotar están dispersas en el sur de ese país, publico el diario Haaretz.

Tiempo antes, Amnistía Internacional había exigido a Israel que acepte una investigación por el mal empleo de estas armas suministradas por Estados Unidos.

En respuesta Israel, negó el “mal uso” de estas bombas y aseguro ajustarse a la ley internacional. Sin embargo, David Shearer, coordinador humanitario de Naciones Unidas en Líbano, calificó la acción de Israel como “vergonzosa”, ya que “esas bombas fueron lanzadas tres o cuatro días antes de que la guerra finalice. Para ese entonces la Resolución 1701 que resolvía el conflicto ya había sido firmada para dar vigor a la tregua en los próximos tres días”.

La información proporcionada por Israel sobre los lugares en donde fueron disparadas las bombas de racimo que no detonaron, es insuficente, según Chris Clark, Director Coordinador de Minas en el sur de Líbano.

“Quisiéramos que Israel nos informe del numero real de estas bombas que fueron disparadas y sus verdaderas coordenadas. Esto nos permitiría ingresar en los campos minados y desactivar las bombas, pero eso no ocurrió aún”, dijo Shearer.

Naciones Unidas identifico 516 sitios que fueron objetivos de las bombas racimo, y dijo que entre el 30% y 40% de estas bombas no explotaron, convirtiéndose entonces en una amenaza para la población civil, especialmente para los niños. Hasta el  momento sólo 17.000 bombas racimo han sido desactivadas y se estima que el trabajo podría prolongarse por otros treinta meses.

Desde el fin de la guerra quince personas murieron a causa de las minas de las bombas racimo, incluyendo a un niño, y otros 83 heridos, de los cuales 23 también son niños. Por eso, los esfuerzos se están concentrando alrededor de los colegios y áreas de juegos, pero pronto trabajaran en las tierras de producción agrícola. Es que muchos labradores y campesinos no pueden retomar sus actividades a causa de las bombas racimo que fueron encontradas en plantaciones de frutas y olivares.

“También fueron encontradas esas bombas racimo entre los escombros de los edificios destruidos, complicando la tarea de reconstrucción”, dijo Clark.

Shearer, por su parte,  califico el hecho como “un desafió a la razón” por haber sido disparadas las bombas en las últimas horas de la guerra y numerosas organizaciones de derechos humanos han sumado su condena a la política bélica israelí.


Fuentes: Haaretz y agencias.