Amenazas de guerra
en Medio Oriente

 

La provocación de Israel contra Siria

Por Sergio Yahni (*)
El Corresponsal de Medio Oriente y África, 21/09/07

Para el autor del artículo, la reciente violación del espacio aéreo sirio por aviones de Israel no perseguía atacar presuntos depósitos de armas destinadas al Hezbollah ni impedir aspiraciones nucleares del gobierno de Damasco, de las que no existen indicios, sino provocar al gobierno de Bashar al–Assad para llevarlo a la guerra.

A la 1 de la mañana del 6 de septiembre, cinco aviones a reacción de la Fuerza Aérea Israelí volaron sobre el norte de Siria, penetrando en su espacio aéreo desde el Mediterráneo. Un avión voló a muy baja altura, provocando estampidos supersónicos que podían oírse en tierra. Los civiles sirios y el personal militar observaron los aviones volando del noroeste al nordeste de Siria.

Los oficiales sirios afirman que el avión dejó caer alguna clase de munición. Dos tanques de combustible de la FAI fueron encontrados en el sur de Turquía, en un área adyacente a la frontera siria.

Las autoridades israelíes se han negado a hacer comentarios sobre el incidente, inclusive se negaron a confirmar o negar que el incidente haya existido.

Inmediatamente después de ocurrido, Alex Fishman, el analista militar para el diario más importante de Israel, Yediot Aharonot, afirmó que el avión israelí voló a muy baja altura para provocar los estampidos porque quería ser descubierto. Normalmente, los aviones de la FAI vuelan a gran altitud en misiones de reconocimiento para evitar ser advertidos por los radares y por la la seguridad del vuelo. [1]

En ese artículo, Fishman calificó de contradictorias las alegaciones sirias sobre que el avión de la FAI dejó caer munición. Según Fishman, las naves que vuelan a velocidades supersónicas no pueden llevar munición externa.

Unos días después, el silencio bien guardado por el ejército israelí y las autoridades civiles fue roto por la administración norteamericana. El Washington Post y la CNN informaron el 11 de septiembre que el avión de la FAI bombardeó objetivos en Siria. En un informe del 11 septiembre de Christian Amampour, de la CNN, ella citó fuentes en el Medio Oriente y en Washington que revelaron que Israel había bombardeado un convoy de entrega de armas de Irán a Hezbollah que estaba cruzando el territorio sirio. El periódico israelí Haaretz publicó el informe de la CNN, añadiendo que las fuentes norteamericanas estaban satisfechas con la conducta israelí. Según Haaretz, el bombardeo fue un mensaje a Siria e Irán en el sentido de que son vulnerables y pueden ser atacados si es necesario. [2]

El New York Times del 12 septiembre citó fuentes anónimas en Washington que confirmaron la misión de la FAI, y reveló que elobjetivo era bombardear los depósitos de armas iraníes con destino al Hezbollah. El New York Times también citó a una autoridad anónima en Washington que declaró: "Israel ha efectuado recientemente vuelos de reconocimiento sobre Siria, sacando fotos de posibles instalaciones nucleares que las autoridades israelíes consideraron que podrían construirse con materiales proporcionados por Corea del Norte. [3]

El 15 de septiembre, el Washington Post informó que "el ataque parece haber estado relacionado a la llegada, tres días antes, de un buque de transporte de Corea Norte con una presunta carga de cemento". [4]

Según Yossi Melman, el analista de temas de inteligencia de Haaretz, el website del puerto sirio de Tartous (www.tartousport.com) registró la llegada de una nave llamada Al–Hamed que llevaba bandera norcoreana y transportaba cemento. Melman dice que la nave puede haber sido el objeto del ataque y agrega que el reporte de su llegada en el website fue cambiado después del artículo del Washington Post para que se lea que la nave llevaba bandera siria. Sin embargo, el informe de Haaretz también revela que en el website del Ministerio de Transporte egipcio (www.MTS.gov.eg) había un registro del 28 julio, casi un mes antes, que señalaba que la nave Al–Hamad había atracado en el puerto de Damietta Said, en el delta del Nilo, y ese sitio "registró la nave como de bandera surcoreana".

Durante mucho tiempo, los conservadores norteamericanos e Israel han denunciado que Siria está cooperando con Corea Norte para transformar su programa nuclear de investigación civil en uno militar. [5] Además, Andrew Semmel, asistente de la secretaría de estado para la política de no profileración nuclear, se hizo eco de esta denuncia, diciendo a la agencia de noticias Associated Press en Roma que norcoreanos han estado en Siria y que Damasco puede haber tenido contactos con "proveedores secretos" para obtener equipamiento nuclear. "Hay indicios de que ellos están haciendo algo allí", dijo. [6] También John Bolton, el ex embajador norteamericano en las Naciones Unidas, reveló que la Fuerza Aérea Israelí atacó una instalación nuclear. [7]

Sin embargo, la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), así como organismos de investigación independientes, afirman que no hay ningún indicio de que Siria tenga un programa nuclear de carácter militar. [8] Es más, un informe publicado por la Agencia Sueca de Estudios de Defensa [9] afirmó que "Siria no tiene ninguna ambición de desarrollar un programa nuclear militar". Según ese informe, a Siria, además, les faltan los recursos económicos y técnicos necesarios para tal programa.

A pesar de que las evidencias revelan la improbabilidad de que Siria tenga ambiciones nucleares de carácter militar, aparecen declaraciones anónimas de Israel y de los Estados Unidos dirigidas a retratar a Siria como un peligro nuclear. Considerando el claro informe de la AIEA que afirma que Siria no trabaja en un programa nuclear militar y la falta de cualquier evidencia en tal sentido, ni los Estados Unidos ni Israel pueden acusar a Siria para justificar una guerra. Pero con la ayuda de Washington Post, el New York Times y la prensa israelí, Israel y la administración norteamericana han manipulado los hechos para crear una impresión falsa e influir a la opinión pública.

Al parecer, el objetivo del operativo de la FAI en Siria no era bombardear instalaciones nucleares o depósitos de armas iraníes, sino provocar a Siria para llevarla a la guerra. Si Siria no responde a esa provocación, llegarán una segunda y una tercera provocación que obliguen al régimen sirio a reaccionar. Entonces, los piromaníacos que gobiernan en Washington y en Tel Aviv habrán iniciado una nueva guerra en el Medio Oriente.

El único camino para evitar la guerra ahora es una movilización internacional clara para defender a Siria contra EE.UU. y las agresiones israelíes de apoyo. Defendiendo a Siria perderá legitimidad una guerra fundada en falsos pretextos y que traerá más desastres a la región.


Notas:

[1] Alex Fishman, Yediot Aharonot, 7 de septiembre de 2007.

[2]Haaretz, 12 de septiembre de 2007.

[3]The New York Times, 12 de septiembre de 2007.

[4] The Washington Post, 15 de septiembre de 2007.

[5]Ver, por ejemplo, el testimonio de John R. Bolton ante la Secretaría de Control de Armas y Seguridad Internacional el 16 de septiembre de 2007, en (http://www.globalsecurity.org/wmd/library/congress/2003_h/wmd–030916–408986.htm)

[6]The New York Times, 15 de septiembre de 2007.

[7]The Washington Post, 16 de septiembre de 2007.

[8] Haaretz, 16 de septiembre de 2007.

[9] Magnus Normark, Anders Lindblad, Anders, Norqvist, Björn Sandström, Louise Waldenström, FOI–R––1290––SE – junio 2004 ISSN 1650–1942

(*) El autor es un periodista y militante pacifista israelí. Su artículo fue publicado por el Centro de Información Alternativa (AIC). La traducción pertenece a Sam More para elcorresponsal.com.