Mar - 22 - 2016

Nuevamente, hoy 22 de marzo, Estado Islámico (llamado también ISIS), organización semifascista que supuestamente representa los “intereses del Islam contra Occidente” ha golpeado con un bárbaro atentado en Bruselas, capital de Bélgica.

Como ocurrió por dos veces en Paris, Francia, en el 2015, Estado Islámico vuelve a dejar decenas de muertos y cientos de heridos, mayormente entre trabajadores y vecinos. La única consecuencia de esto es darle más legitimidad al “Estado de excepción“ y a la “guerra contra el terrorismo”, una excusa que le viene como anillo al dedo al imperialismo para golpear sobre los pueblos oprimidos del mundo árabe y justificar una agenda reaccionaria en el seno de los países europeos.

¡Estos atentados son injustificables, lo decimos categóricamente! Estado Islámico no es una organización que exprese, ni siquiera distorsionadamente, ninguna aspiración genuina de los explotados y oprimidos del Medio Oriente. Allí donde gobierna, en importantes franjas de Irak y Siria, Estado Islámico impone –con mano de hierro y métodos de terror bestiales– políticas brutalmente opresivas contra las mujeres y los trabajadores, cercena todas las libertades democráticas, políticas y sociales. ¡Estado Islámico es la reacción en toda la línea! ¡Es un callejón sin salida para la barbarie que se vive allí y que Estado Islámico no ha venido más que a reforzar!

Paralelamente, sus barbaros atentados en Europa no le hacen ningún favor a los trabajadores, las mujeres y la juventud de esos países. ¡Y menos aún a la población migrante de la cual se nutre! Al revés: le da argumentos suplementarios a los gobiernos imperialistas para imponer su agenda reaccionaria de guerra y destrucción de países enteros en Medio Oriente. Y, además, para proseguir su política brutal e inhumana de expulsión de inmigrantes, reducidos hoy a detenidos en verdaderos campos de concentración que recuerdan las peores imágenes de la Europa del siglo XX. Por último, las acciones de Estado Islámico sirven a los gobiernos para justificar y facilitar el ataque a los derechos laborales de los trabajadores europeos.

Estado Islámico no puede tener justifición alguna en sus métodos, ni sus objetivos. Ni unos ni otros son progresivos. No expresa, como ciertas organizaciones terroristas del siglo pasado, causas justas promovidas con método equivocados. Su causa no es justa. Su agenda es la vuelta a una suerte de imperios medievales, basado en la sumisión absoluta de la población autóctona con la excusa del “combate a Occidente”.

Sin embargo, sí es un hecho que el imperialismo sólo de manera hipócrita puede esconder su responsabilidad en la existencia misma de este tipo de organizaciones. ¡Muchas veces  las promovió para generar enfrentamientos fratricidas, que le permitieran dominar fácilmente Irak, Siria, el norte de África, Afganistán, etc.! Los imperialismos han destruido con su accionar países enteros de la región. Han dejado, además, sin perspectiva alguna a toda una generación de origen inmigrante en Francia, en Bélgica, en Inglaterra, en Alemania… (incluso teniendo en cuenta las disparidades de país a país en el abordaje de esa problemática). Este es el caldo de cultivo del que se nutren organizaciones como Estado Islámico.

De ahí que sea necesario repudiar de manera incondicional estos atentados, como así también a las “guerras antiterroristas” y los “estados de excepción” que promueven los gobiernos imperialistas europeos. Ahora, con la excusa de este nuevo atentando, van a reforzar en la próxima coyuntura esta agenda reaccionaria.

Llamamos a repudiar este nuevo atentado con la más amplia movilización de los trabajadores, de la juventud, de las mujeres. Una movilización que debe también enfrentar la tendencia a criminalizar y marginar aun más a las masas de migrantes en los países europeos. Y hay que plantarse también contra la mentira de que la solución al flagelo de los atentados sea multiplicar los bombardeos sobre poblaciones inocentes del Mundo Árabe. ¡Ellas han sido las primeras víctimas del Estado Islámico!

Repudiemos los atentados de ISIS con la movilización en las calles, solidaridad con las víctimas de los mismos, abajo los “estados de excepción” y las “guerras antiterroristas” de los gobiernos imperialistas.

Declaración de la corriente Socialismo o Barbarie, 22 de marzo del 2016

Categoría: Declaraciones, Europa Etiquetas: ,